Capítulo 3

No lo niego me preocupé por su estado de salud, en ese momento yo lo quería no sé dé que forma, pero me angustiaba lo que le pudiera pasar, él estuvo solo en urgencias por 4 días, estaba desesperado, los médicos decían que pudo haber sufrido un coma diabético que era necesario que se cuidara y alimentará bien.

Al tercer día de estar en urgencias ya le iban a dar el alta, pero tenía que pagar cierta cantidad de dinero para poder salir de allí, yo hablaba con él la mayoría del tiempo, intentando ayudarle a que se olvidara un poco del lugar en donde estaba, hablábamos de películas, libros, documentales, yo estaba tranquila porque sabía que ya lo iban a dejar salir, al día siguiente le pregunto como sigue y me cuenta que está desesperado que le faltaba una cantidad mínima del dinero y que por eso no había podido abandonar el hospital.

En ese momento empecé a preguntarle que cantidad de dinero necesitaba, él solo me cambiaba la conversación y me decía que estuviera tranquila, las horas pasaban y el desespero de él aumentaba, estuve dispuesta en ir a buscarlo, a acompañarlo en aquel lugar, pero él se negaba, decía que no quería exponerme a ninguna enfermedad, además el covid estaba en aumento, que hacía más hablando con él y dándole apoyo por mensajes.

En ese momento me contó que había tenido muchos gastos en las fiestas decembrinas, que había adelantado saldo de su tarjeta de crédito y había pedido a su madre y un amigo dinero prestado para pagar en urgencias, pero que aún le hacía falta, yo sin pensarlo dos veces le dije que le prestaba lo que necesitaba, él me decía que no, que le daba mucha vergüenza, pero yo le dije que era un préstamo, que me dejara ayudarlo, después de insistir por varios minutos él aceptó, de inmediato le hice una transferencia y logro pagar en el hospital, él me decía que yo era un ángel, que nunca nadie había hecho tanto por él, estaba muy agradecido y estaba feliz porque por fin podría salir de ese lugar.

Así sucedió, él salió de urgencias y pudo regresar a su casa, ese día no quise hablarle más para qué descansara, pero en horas de la tarde noche apareció, en ese momento él aseguraba que ya me quería y que era el momento de que la relación pasara de una amistad a algo más, ese día mis padres habían salido de viaje y yo estaba sola en casa, él me dijo que nos viéramos al día siguiente, yo gustosa acepte, pero esa misma noche hablamos de un tema un poco delicado para mí, el sexo, él me decía que podía intuir que yo era virgen, y que eso me hacía muy valiosa, pero que a nuestra edad y en una relación el sexo era una parte fundamental para que todo funcionara, yo sabía y entendía lo que él decía, pero mis inseguridades salieron a relucir, yo fui muy sincera con él, le dije que me daba miedo que me viera desnuda, él decía que yo era perfecta así y que así le gustaba, esas palabras me daban mucha tranquilidad, pero el miedo a que se alejara por mi temor aumento.

Él fue muy sincero conmigo, yo solo le dije que me diera un poco de tiempo, que tarde o temprano sucedería, él dijo que él esperaba lo que fuera necesario, que lo importante era que yo me sintiera bien, que me sintiera cómoda.

Esa noche no pude dormir estaba muy emocionada por que después de tres meses de hablar con él lo conocería finalmente, le conté a mi hermana que iba a salir, a ella no le pareció correcto, porque mis papás no estaban y porque no lo conocía, pero en ese momento no me importo nada, yo estaba muy ilusionada con la idea de verlo.