capitulo 4

Ariana

Teodoro- belleza mía te vez hermosa.

Alex- vez tengo buen gusto - Sonríe al ver mi cara

Ariana- no te preocupes esta me las cobro.

Alex- ¡vengativa!  lo que nos faltaba - Me dijo burlesco

Ariana- papá me sientonto incomoda solo mira este vestido presiento que se me saldrá una bubis.

Alex- de donde chaparra - Se ríe

Teodoro- no, no la seguridad ni en la guerra perdida se puede desvanecer…

recomponiendo me al escuchar a mi padre. Tomo una copa de vino blanco dando un sorbo.

Era el momento del discurso, lo observo detenidamente al decir sus palabras frente a todos en el salón sin importar que él se dé cuenta, mi padre como buen observador y protector ve las miradas entre Ibrahim y yo.

Que desde que subió no ha dejado de mirarme y eso me agrada, el por qué, aun no lo sé. Al culminar su discurso todos aplauden, el salón está a reventar.

Varias personas se acercan a saludar a papá. Veo que Ibrahim camina hacia nosotros, saluda a mí a

padre extendiendo su mano, la que mi padre da un apretón cortésmente

Ibrahim- todo quedo muy bien Srta. Le agradezco por el esfuerzo y la dedicación de su equipo y el suyo.

Teodoro- sí, mi hija se toma su trabo muy enserio.

Alex- demasiado diría yo - Dijo tomando de su trago

Nos miramos a los ojo por unos segundos, ya se estaba volviendo costumbre. Aparto la vista al ver que papá y Alex me observan; Alex frunce el ceño.

Doy una leve sonrisa fingida halo dicho, papá e Ibrahim hablaban de su empresa, mientras yo aprovecho para escabullirme a la salida estaba agotada.

Esperaba mi auto cuando siento una presencia extraña…

- hoy sí que te vez hermosa - Esa voz retumbo en mi cabeza me doy la vuelta si era él

Ibrahim

Segundos después veo que ella sale, salgo tras ella, un hombre frente a ella; noto que su presencia la coloca nerviosa su mano temblaba, la esconde detrás de su pierna aprieta el puño.

Salgo de inmediato a largos pasos.  Miro fijo al sujeto

Ibrahim- ¿pasa algo?

El hombre me mira iracundo al ver mi cercanía a Ariana.

- No para nada solo converso con la dama

trata de tocarle el rostro; el cual ella hace aun lodo evitando el contacto. En ese momento el cólera se me sube.

Ibrahim- Cuidado con lo que haces

- O qué?  - Replica - acaso…

no lo dejo terminar y afirmo su duda.

Ibrahim- Si es mi mujer y a mi mujer ningún otro hombre la toca.  En nuestras miradas solo se puede notar ira.

Ariana

Es el después de tanto tiempo, está aquí frente a mí, mi pasado vuelve a mi presente asiéndome temblar como hace años no lo hacía.            “Roberto”

sentía que me iba a desvanecer en cualquier momento, Ibrahim se acerca tomándome de la cintura, siento su agarre fuerte.

Cuando oigo que le dice a Roberto que soy su mujer, lo miro sin negarlo, me coloco de lado sujetándome de su cuerpo para no caer cuando…

Roberto- ¡tu mujer? - ríe irónico, pues tu mujer y yo tenemos un pasado y está marcada por mi familia…

Extiende su mano queriendo tocar mi cicatriz que estaba descubierta por el modelo del vestido. Ibrahim fue más rápido agarro su brazo ejerciendo presión en él. Al llegar mi auto Ibrahim me dirige a este, ayudándome a subir en el asiento del copiloto y el sube en del piloto sin antes darle una mirada amenazante a Roberto.

Ibrahim- ¿te encuentras bien?

Acaricia sutilmente el dorso de mi mano que posaba en mi pierna. Halo que yo solo asentí con la cabeza.

Ibrahim estaciona el auto miro, no es mi casa ¿Por qué estamos en su casa?

Ariana- ¿Por qué me traes a tu casa?

Ibrahim- creo que no es una buena idea que estés sola, no has dejado de temblar en todo el camino,

solo mira tu mano; lo note cuando te sujetaste para que no calleras. - Ella terca salió del auto, salgo rápidamente la alcanzo caminando junto a ella.

Ariana- estoy bien, así que no tiene de que preocuparse…

Ibrahim

En ese momento veo que se desploma frente a mí, la sujeto evitando que caiga al suelo, la cargo en mis brazos y entro a mi casa; me dirijo a mi habitación la acuesto en mi cama.

Toco sus mejilla para tratar de despertarla, la llamo, pero no reacciona, le quito los zapatos dejándome ver una tobillera de plata en su tobillo con varios dije sus pies blancos sus uñas bien arregladas color nube.

Toco su pulso está bien la dejo descansar. Llamo al señor Teodoro para avisarle de lo sucedido con su hija, lo que me agradece y me pide que no la deje salir hasta que él llegue.

Se ve tan bella dormida no puedo dejar de verla, esta chica se está volviendo una maldita obsesión para mí. ¿Obsesión o amor? Me pregunto a mí mismo, no, no, amor no; puede ser posible, pero si lo es no la dejare escapar, pasó mis dedos por su mejilla. Observo su cicatriz que dejo a la vista al moverse, aunque la había visto cuando no le quitaba la mirada en la fiesta. Sin poder contenerme paso suavemente la yema de mis dedos por esta, dibujando su forma.

Ariana

Despierto espabile varias veces para aclarar mi vista, miro a mi alrededor veo a Morfeo dormido a mi lado en la cama con su cabeza apoyada en mi abdomen trato de enderezar me sin despertarlo algo imposible pues a mi primer movimiento este levanta la cabeza y mueve su cola, miro a mi alrededor eran las tres de la madrugada, daba el reloj en la mesa de noche a mi lado.

Ariana- ¿Qué paso? -  Toco mi cicatriz recuerdo todo lo ocurrido, acaricio a Morfeo que me mira presintiendo como me siento cuando…

Ibrahim- me tome el atrevimiento de traerlo, al parecer te extrañaba no dejaba de labrar, apenas te vio se acostó a tu lodo y no se ha movido de allí.

Busco en la habitación de donde provenía esa voz, veo una figura al pie de la ventana. Camina adonde estoy se apoya en el espaldar del sillón frente a mí. Traía el mismo pantalón de la recepción, la camisa con los dos primeros botones suelto dejándome ver parte de su pecho las mangas hacia arriba sujeta en sus codos. Reacciono colocándole de pie

Ariana- ¿Por qué carajos estoy aquí? -  Me alejo unos pasos del Morfeo acostado nos mira a los dos como confundido.

Ibrahim- ¿Cómo te sientes? Para responder a tu pregunta, te desmallaste…

Ariana- y te aprovechaste de eso para meterme en tu cama - Musitó sin dejarlo terminar de hablar, recorro mi cuerpo veo que estoy vestida.

Ibrahim- no pasó nada, no soy un pervertido y si hubiera pasado créame no lo olvidarías…

Me dice con voz sexi y arrogante; es un presumido.

Ariana- eso es lo que usted cree

En ese momento se habré la puerta es Alexander trae en sus manos un bolso al verme se acerca.

Alex- ¿Ariana estas bien?    Acaricia mis hombros

Ariana- si ya me voy a mi casa, cogí mis zapatos del suelo, llamo a Morfeo que no se mueve solo me mira

Alex- ehh, no lo creo papá dijo que te quedaras aquí hasta que el llegara.

Ariana- que imposible - Niego con la cabeza, veo como Ibrahim con una leve sonrisa triunfante se sienta en el sillón y acaricia a Morfeo.   Mi casa está a solo unos metro lo puedo esperar allá

Alex- sí, pero papá dijo que no podías quedarte sola y Ibrahim se ofreció a cuidarte.

Ariana- ¡CUIDARME! acaso necesito que me cuiden - digo alzando la voz, me dirijo al puerta trato de abrirla, pero no habré, miro a tras veo a Ibrahim con un pequeño control en sus manos…  habré la puerta - le ordeno.

Ibrahim- no lo creo, tu padre me dijo que no te dejara salir.

Tiro los zapatos al suelo.

Ariana- habré la maldita puerta Ibrahim - me acerco a él, que camina hacia mí.

Alex- por lo menos no me voy a aburrir - dice colocando el bolso en la cama y acostándose en ella

nos mira como quien ve una película. Ibrahim y yo lo miramos fulmínante al ver su burla.

        - Chicos por Dios…

Oigo que suena mi celular tomo la llamada al ver que es papá

Ariana- padre me voy… me interrumpe

Teodoro- espera donde estas ya voy para allá.

Fin de la llamada

Alex- ¿Qué te dijo?

Ariana- que ya viene.  Será que lo podemos esperar abajo

Mi voz sale cansada, mucho más al oír el tono de papá. Ibrahim se dirige a la puerta la habré asiéndose a un lado. Tomo mi cartera y mis zapatos salgo de la habitación detrás de Alex, me detengo al frente de

Ibrahim.  llamo a Morfeo dándole rápidamente un vistazo a su habitación su perfume está en toda ella, tiene buen gusto todo en aquella habitación encajaba a la perfección y lo lujoso destacaba. Al voltear me nuestras miradas se encuentran quedándonos así por unos segundos en total silencio.

¡este hombre es inigualable! esos ojos grises con esa mirada penetrante que me eriza la piel, sus labios carnosos con un singular rosados natural en ellos.  Por Dios del cielo que estoy pensando, que pasa contigo “regaño mental.”

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