¡Que Mujer!

Neith había logrado ser Comandante en 6 meses, pero un día el General la nombró a ella como la nueva General, ya que iba a morir y se había encariñado con Nathan, por eso ahora es el General de las Huestes Celestiales; su demonio se empezó a manifestar en su conducta, volviéndola seria y orgullosa, el brillo de sus ojos había disminuido y su sonrisa era casi inexistente.

A pesar de que amaba ayudar a su Reino, la personalidad alegre y vivaz de Neith había desaparecido y Jehová lo notó mucho, así que decidió ayudarla.

-Hermana, ¿quieres cocinar algo conmigo?

-No

-Por favor

El cabello de Neith se erizó, al color oscuro de su cabello parecía salirle mechas rojas, su ojo derecho se tornó rojo, sus colmillos eran amenazantes y le dijo a su Hermano:

-¡¿NO ENTIENDES QUE NO QUIERO HACER NADA CONTIGO?!

Jehová la dejó sola, al darse cuenta de su querida Hermana no era la misma de antes habló del tema con su Padre.

-Padre, Neith está siendo consumida por su demonio.

-Lo sé, Hijo

-¿Hay algo que se pueda hacer por ella?

-Preferiría que no te metas en eso.

Mientras ellos hablaban, Neith sufría por dentro, es como si el demonio hubiera tomado el mayor control sobre ella. Dentro de la Princesa era una lucha constante, a veces Neith si podía tener control sobre sí misma.

Se sentía mal, quería llorar y desaparecer; tomó su capa, su espada y salió por la ventana de su habitación.

Cuando salió había una gran persecución, unos hombres poseídos habían robado en 2 casas joyas y libros con registros importantes. Aprovechando eso, Neith los persiguió por todo el Reino.

-¡Que rápidos son estos rufianes!

Los hombres al darse cuenta de que La Forastera los seguía se asustaron y huían cada vez más rápido, esta situación calmó un poco a Neith que se sentía mal, pero no hay que olvidar que amaba esto de luchar y perseguir a los poseídos. Para ella era relajante.

Mientras todo eso pasaba en el Reino, un nuevo habitante venía a mudarse. Su nombre era Hange Rivaille Ackerman (Lo sé, ya sé que me dirán que es como 2 de los personajes del anime Shingeki no Kyojin, pero la cosa es que de verdad se llamaba así este chico... si no me creen, solo lean y entiendan la historia) vino para unirse al Ejército y heredar la casa de su fallecido abuelo.

Antes de que llegara al Reino, la persona que lo ayudó a llegar le contó sobre la heroína que hay, sobre La Familia Real y los poseídos. Al escuchar sobre la heroína el corazón de Hange latía muy fuerte y sus mejillas se ponían rojas, entraron al Reino y justo en medio de la persecución de Neith y esos poseídos rufianes. En un momento que parece que pasó en cámara lenta, Neith y Hange cruzaron miradas y Neith le sonrió de manera pícara, dejando ver su rostro, belleza y nuevamente su energía tan contagiosa.

Hange la siguió con la mirada hasta perderla, nunca había visto a una mujer tan hermosa, ruda y valiente.

-¡Que mujer! es mas impresionante de cerca.

-Te lo dije Hange, esa mujer es increíble.

-Y es muy hermosa, tengo que conocerla mejor, ten esto. Ya vuelvo Paul.

Hange la logró ver de nuevo, pero Neith ya había capturado a los rufianes y devuelto los objetos robados.

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