Capítulo 3: Devuelta a clases

Hoy es el primer día de clases en un año nuevo, hoy empiezo quinto año, el ante último año de secundaria y como les dije el año pasado este año va a ser diferente en muchos sentidos, como vieron hasta ahora.

Hoy me fui en mi auto a la escuela porque se me había hecho tarde para que me buscará Adriel por casa, así que tuve que ir manejando yo.

Cuando llegué a la escuela, estacione y antes de bajar escuche hablar a Enzo con Marcos y Adriel.

-¿Y el nerd de su amigo donde esta? ¿Como era que se llamaba....Burro? No ese no era su nombre-Dijo con malicia- mmm no me acuerdo...

-Oye que te pasa, el no te hizo nada- dijeron mis amigos.

- O ¿a caso le tienes envidia por lo que has escuchado de él?- dijo Adriel.

- Cállate, y no le doy importancia a murmullos que no son ciertos- le contesto- ¿Y? ¿Me van a decir donde esta su amiguito?

-Aca estoy- le conteste bajándome del auto y acercandome a él- ¿Acaso sos mi dueño? ¿Que me buscas?

- Callate...- dijo cuando me termine de acercarme a él pero no pudo terminar la frase porque se atragantó cuando me vio que era más alto que el año pasado.

- Te lo voy a pedir una sola vez y por las buenas...Deja de molestarme y de decirme nerd y todos esos estúpidos apodos que me has puesto o vas a ver- le largue.

-O ¿que vas a hacer nerds, sabelotodo?- replicó.

-Lo que voy a hacer es darte una buena paliza adelante de todos tus amigos-le conteste.

- No te tengo miedo, que seas más alto ahora no quiere decir nada- me desafió.

- No seas idiota y haceme caso- le dije- no quiero tener problemas.

-Sos puro chamuyo.

-Idiota- dije esto y procedí a ir hasta la puerta de ingreso de la escuela y entre antes de que pudiera hacer algo que no me guste ya que no vale perder el tiempo en él.  Mis amigos me seguían por detrás sin decir nada. 

-Jake, ¿estas bien?-dijo Adriel.

-Jake, para tienes que hablar con nosotros-dijo Marcos, no me detuve hasta que entre al aula y me senté en mi banco.

-Jacob Elordi, tienes que decir algo ahora o voy y le digo a Ana que te gusta.- soltó Marcos.

- No puedes sobornarme con eso- le dije.

-Oh claro que puedo y lo estoy haciendo- dijo mirandome y mirando a Adriel que parecía divertido con esta situación.

-Acaso no entiendes de que si empiezo a hablar voy a terminar haciendo algo que no quiero, ¿ no lo entiendes?- me desespere no porque no quisiera hablar sino porque sabía que iba a darle una paliza al idiota de Enzo y mis dos amigos lo sabían.

- Pues no podes no hablar con nosotros-dijo intervino Adriel- y no está bien que lo sobornes Marcos.

-¿Acaso no te molesta que no nos quiera hablar con nosotros si no lo sobornamos con decirle a Ana que a este tarado le gusta?- le contestó Marcos.

-Si me molesta que no nos quiera hablar de lo que pasó allá afuera pero es si decisión si quiere decirnos o no- le replicó.

-¡OIGAN!¡YA BASTA!- les grite, por suerte no había nadie en el aula o en algún lugar cercano-. Me cansaron ustedes y todos los que me molestan.- puse los brazos en el banco y apoye en ellos mi cabeza y me quedé así hasta que fueron entrando todos, incluyendo a la profesora.

Ninguno de ellos dijo nada más de lo sucedido por como reaccione cuando lo mencionaron antes de la clase, pasaron los minutos y paso la hora de la clase, pero no preste atención a nada de lo que la profesora habia dicho durante toda la hora. Salimos al patio para el recreo y fui al baño, luego fui a sentarme debajo de un árbol, mis amigos me seguían de cerca y callados.

-Marcos, ¿anotaste algo de la clase de lengua?- le dijo Adriel.

-Si, si quieren se las paso a ambos- lo dijo mirandome mas a mi que a Adriel  pero sólo asenti porque no quería hablar, no todavía queria que se me pase toda la rabia, pero no podía porque Enzo me estaba mirando con cara burlona y eso me daba más enojo que cualquier otra cosa.

-Jacob ¿puedes hablar? Nos estas preocupando mucho que no hables- dijo Marcos- no te estoy obligando a hablar si no quieres claro- lo dijo por la cara que tenía cuando lo mire.

-Lo siento chicos, por como los trate antes de que empezará la clase- lo dije tratando de despejarme y para no seguir mirando a Enzo.- No se lo merecían, lo siento.

-Oye, no hay problema- dijo Marcos.

- No es tu culpa que el idiota ese te hiciera enojar- agrego Adriel.

-Pero ustedes no se merecían que los tratará así, bueno por lo menos a vos Adriel porque Marcos si se lo merecía... un  poco- dije mientras le sonreía a Marcos con malicia.

- De acuerdo, me lo merecía-admitió.

Sonó en timbre que indicaba que había terminado el primer recreo de los tres que teníamos, nos paramos para encaminarnos a las escaleras que llevaban al aula. Pero antes de entrar algo me hace caer al suelo, era Enzo y su grupo de amigos, Santiago, Mauro y Román, molestandome de nuevo, me paré y le di un puñetazo a Enzo, este cayo de espalda al suelo, iban a reaccionar sus amigos para golpearme pero al ver que era más fuerte que ambos se acobardaron y entraron al aula sin mirarme y apresurados. Enzo se paró y entro al aula poniéndose la mano en la nariz ya que esta le estaba sangrando, me miro con odio y se sentó junto a sus amigos.

-Que...mierda....fue.... eso- dijeron  mis amigos al unísono.

-Le di lo que se merecía, bueno casi todo- dije.

-Oye, mira tu mano esta sangrando- dijo Adriel- ¿queres que vaya por hielo y algo para que no te siga sangrando el labio?-dijo Marcos.

- De acuerdo, solo vamos a decirle al profesor que vamos por eso y que volvemos enseguida- le conteste, el asintió y se encaminó hacia donde estaba el escritorio del profesor mientras todos mis compañeros me miraban y luego lo miraban a Enzo y devuelta a mí y luego empezaron a murmurar hasta que llegó el profesor y se callaron; Marcos le aviso que iríamos por las cosas que íbamos a buscar en un principio y este accedió, pero antes de que saludamos por la puerta me pregunto que me había pasado.

-Enzo me hizo caer y se la devolví- dije señalando a Enzo con la cabeza-  llevan años molestandome y los que me conocen le dirán que nunca reaccionó a estas cosas pero esta vez se pasaron de los límites que puedo soportar o que no debería soportar- le dije al señor Alberto Gonzáles.

- Pues tienes que saber que la violencia no es un medio para reaccionar y el bullying no es aceptado por la escuela ni la tienes que estar soportando, Enzo recibirá su sanción- dijo el profesor- Pero no puedes volver a reaccionar así, ¿Lo entiendes no?

-Eso es injusto ¿por qué yo recibiré un castigo pero Jacob no?- protestó él.

-Porque el se estaba defendiendo y no molestando a otra persona- le replicó el profesor.

-Uuuuuuuh- dijeron mis compañeros para provocar a Enzo,menos sus dos amigos.

-Jacob, Marcos vayan a buscar hielo y lo que necesiten- continuó el profesor.

-Pero ¿no ve como me dejo la cara este idiota?- le contesto Enzo de mala manera.

-Si lo veo pero no es tanto el daño que te hizo Jacob...-le dijo- como lo que le hiciste a Jacob que le dejaste el labio partido, la mano sangrando y por lo que veo el ojo morado- le dijo el señor Gonzáles.

-Pero...-dijo Enzo.

-Pero nada y vaya a la oficina del director, Enzo Molina, ahora mismo- concluyó el señor Gonzáles.

Enzo se levantó quejándose y puteandome por lo bajo y cuando paso por al lado mio murmuró algo que apenas alcance a escuchar.

-Esto no se acaba aca maldito pendejo- y salió por la puerta.

Cuando salió por la puerta del aula, Marcos me guío hacia la puerta para acompañarme a buscar lo que necesitaba ponerme en la cara y para que parará de sangrar.

Después de unos minutos Marcos termino de bendarme la mano y me puso un algodón con cinta en el labio y me tendió el hielo para que me lo pusiera en el ojo, que ahora se empezaba a hinchar y a ponerse negro. Y así transcurrió el resto del día todos hablando de la golpisa que le di  a Enzo y como el profesor lo mando a callar y a la dirección. Vaya primer día de clases ¿verdad? Cuando estaba saliendo de la escuela con los chicos Enzo me agarro del brazo y me detuvo, me hizo dar la vuelta para que el me mirara pero tuvo que levantar la cara para poder mirarme a los ojos ya que ahora yo era el más alto del curso y el más fuerte de todos los chicos.

-Escuchame bien idiota...- empezo a decir-...¿crees que no escuche cuando Marcos te amenazaba con ir a decirle a Ana que te gusta?- me miro y al ver que estaba sorprendido por lo que dijo siguió hablando- ¿crees que no puedo darme cuenta de que te gusta? Antes solo me enfocaba en molestarte pero desde ahora voy a hacerte la vida imposible.

-Ana no me gusta ni un poco- le replique.

- ¿Ah si?, pues esta grabación me dice lo contrario- sonrió al poner la grabación  en donde Marcos me estaba amenazando de que le iba a decir a Ana de que me gustaba si no les hablaba a ellos dos.- ¿Y ahora que me dices? ¿Quieres que se lo muestre a Ana?- me empezó a amenazar.

- No te atreverías- le conteste con indiferencia.

- No me pruebes porque soy muy capaz de hacerlo ¿ por qué no lo hago ahora? Ahí está saliendo Ana- dijo señalando la.

- No lo hagas o vas a ver de lo que soy capaz- empece a decir.

- No no, si no quieres que lo haga primero no me amenaces y segundo vuelve a ser el chico tímido que no responde al bullying que le hacen- prosiguió diciéndome.

-¿Y si no lo hago que?

-Subo tu video a Instagram, además de mostrarle a Ana el video.

Me libere el brazo que me estaba sujetando Enzo y le di la espalda dirigiéndome hacia mi auto, dejando atras a mis amigos y a Enzo y a sus amigos, empece a manejar hacia mi auto en ese momento solo queria estar solo y no hablar con nadie.

Estaba furioso con Enzo con Marcos y conmigo mismo por dejar que me trate así la gente.  Vaya primer día, desearía que nunca hubieran terminado las vacaciones cuando llegue a la calle que me llevaba a mi casa me dirigí hacia el seminario, entre y cuando llegue al lugar en donde me sentaba siempre apagué el auto y me baje de el, y me dirijo hacia donde siempre me quedaba mirando el paisaje de la ciudad y me quedé ahi hasta que se hizo de noche. Me llegaron varias llamadas de mis amigos, de mis hermanos y de mis padres pero no le conteste a ninguno de ellos, hasta que decidí ir a mi casa, me subí al auto y conducir hasta mi casa cuando llegue mi mamá y mi papá me estaban esperando sentados en el sillón del living, cuando atravese la entrada mi mamá se acercó a mi me abrazo.

- ¿En donde estabas?Estábamos muy preocupados por ti- me dijo ella.

-Llamaron de la escuela diciendo que te metiste en una pelea- dijo mi padre.

- Yo no la empecé....- fue lo que pude decir antes de que me interrumpiera él de nuevo.

-Lo sabemos, el directo nos dijo lo que paso- contestó.

-Solo me defendí...-dije pero empecé a llorar antes de poder decir algo más.

-Lo sabemos, sabemos que no lo hiciste a propósito- dijo mi madre abrazandome de nuevo.- Esta bien que te defiendas pero no de esa manera.

- ¿Y que debo hacer? ¿Dejar que me sigan haciendo las cosas que me hacian?- empece a gritar- No se ustedes pero yo ya no lo aguanto más, toda la secundaria me golpeaban y me golpean y lo que me piden es ¿que no se los devuelva?.

No deje que me respondieran y me fui a mi habitación a encerrarme, no baje a cenar, puse la música en mi celular y me puse los audífonos, me quedé dormido llorando porque ya no aguantaba más.

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