Capítulo 16

Nota: alcaide es el dirctor general de una prisión, Alcalde, pues...todos sabemos lo que es un alcalde 🐀.

-¿Sabias que el alcaide viene hoy por primera vez? -un compañero comentó mientras se dirigían al trabajo.

-No veo porque eso debería importarme tarde o temprano vendría ¿no? -un aburrido Mack contestó.

-Dicen que es un bastardo rico y orgulloso.

-Repito niño, ¿Porque me importan estas cosas? Mientras haga mi trabajo y lo haga bien no veo porque tendría problemas -Mack volvió a responder con aburrimiento.

-No, si no lo digo por ti, si no por don  amabilidad aquí presente -el guardia señalo a Dennis-. Según dicen el tipo no sólo es un bastardo rico, orgulloso y prepotente, también dicen que no se tienta el alma si de despidos se trata, así que trata de ser amable o terminaras sin empleo -advirtió a sus compañeros, mientras  observaba fijamente a Dennis con diversión, este le sacó un dedo y lo ignoró por unos segundos.

-Me da igual si me echan ¿Sabés? Es mas estaría casi agradecido, no quiero saber ni tener nada que ver con ningún bastardo rico.

-¿Que? -el joven guardia se veía un poco distraido.

-Si me despiden -explicó a sus Compañeros que lo veían interrogantes-. La verdad es que no me importa, este trabajo desde un principio iba a ser  temporal, yo como que e pensado en irme de aquí -contó despreocupado.

-No me digas  que no te gusta este maravilloso y emocionante lugar -Mack lo miro con desapruebo fingido.

-No es eso, es solo que...nunca nada pasa ,es tan aburrido -se quejaba mientras los tres entraban a la cárcel, su lugar de trabajo.

-Si, creeme ya me di cuenta de que este lugar es una mierda aburrida pero es tranquilo y esas cosas son buenas para Blue.

-Hey...muchas cosas pasan aquí aunque ustedes no lo crean -el otro guardia habló de nuevo.

-Si...yo no lo creo, no es mi intención ofender al lugar donde viví mis mejores años de infancia pero, este lugar es tan aburrido que hasta un día viendo como seca una pared recién pintada es más emocionante que una semana aqui.

-No es así, este lugar puede ser emocionante, a veces demasiado -el joven guardia que era el único nativo residente que trabajaba en el lugar defendió su pueblo.

-Si...no lo creo, este lugar es demasiado, demasiado, demasiado aburrido -Dennis volvió a decir mientras se apresuraban al trabajo.

-Se me olvidaba que tu eres la madre de la diversión -se burló sarcástico Mack una vez que ambos se encontrarán parados en el patio de la prisión junto a los prisioneros, esperando que el famoso alcaide llegará, este tardó alrededor de 30 minutos en dignarse en aparecer. Dennis se encontraba abotonando la manga de su camisa ya que el botón continuaba soltándose cuando se anunció que el alcaide había llegado, este empezó su discurso con rapidez.

---:Las cosas van a cambiar no tolerare a ningún haragán, delincuente mentiroso, embustero o débil en mi cárcel aparte de los prisioneros. Así que, el que no este preparado para cumplir con su trabajo, es libré de presentar su renuncia en cualquier momento. Y para los criminales en este lugar, hay algo que deben entender y yo se los voy a dejar claro en este momento. Quiero que sepan que no estoy en venta, yo no soy una prostituta a la que pueden comprar fácilmente así que no me envíen dinero, regalos o amenazas. Ninguno de ustedes me asusta así que no se tomen la molestia de intentar sobornarme y si alguno de ustedes intenta sobornarme, extorsinarme o cobrarme algún favor me aseguraré de que los envíen a un lugar no tan agradable como en el que están ahora, ya que yo no le debo nada a ninguno de ustedes y mi historial está tan limpia como sucio el de ustedes, aparte de eso...buena suerte señores. El personal que se sienta inconforme con esto puede pasar a mi oficina si tienen algo importante que decir de lo contrario, no me molesten -el tipo continuó hablando durante un tiempo. Tiempo en el que Dennis se quedó completamente inmóvil mientras apretaba la manga de su camisa hasta arrancar por completo el maldito botón, no se atrevía a levantar la cabeza. No, no, no seguro era una coincidencia, esa no era la voz, con seguridad sus oídos se confundieron o su cerebro se volvió completamente loco se decía mentalmente. Después de unos tensos minutos, que mas bien parecieron siglos, optó por ponerse su armadura impenetrable de "nada me importa" levanto el rostro y si, allí estaba esa mirada que lo había cautivado desde el principio. Ese semblante serió y esa imponente figura todo era igual sus sentidos no lo estaban engañando esto era real, sentía que sus piernas fallaban la ira dentro de el creció mucho más, el tipo causante de su dolor estaba allí como si nada. Por un momento pareció que este leyó sus pensamientos ya que le lanzó una fugaz mirada, poco tiempo después el discurso finalizó y todos se dirigieron a sus labores.

Dennis no creyó que fuera casualidad que justo ese día lo hubieran asignado a la puerta de la oficina principal de la prisión, cuando fue a su lugar Taylor ya se encontraba dentro, lo supo porque las secretarias no dejaban de hablar de lo guapo joven y rico que era el alcaide y como todas intentarían conseguirlo excepto Mindy que aseguraba que ella le veía algo raro lo que significaba que creía que era gay, esa mujer si que tenía un gaydar de primera.

-¿Y tu que piensas Dennis?  -interrogó sonriente Mindy cuando lo vio, esta era pequeña de melena corta y castaña ojos cafés y piel blanca.

-No tengo nada que decir sobre sus ambiciones chicas.

-¡¡Dennis!!.

-De acuerdo, deseo que sus ambiciones se cumplan, pero no voy a decir nada más.

-Ya veo -río la chica y siguió hablando con sus compañeras sobre la belleza del hombre en la oficina.

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