Capítulo 9

Después de pasar rápidamente por su apartamento a tomar un rápido y muy necesario baño, al fin estuvo en su trabajo en un pequeño restaurante con desayunador, el olor a huevos revueltos hizo gruñir su estómago y después de que su compañero en el turno de la mañana le pasará un sándwich y se lo tragara mientras se vestía, se dispuso a atender a los clientes que parecían llenar el pequeño lugar haciéndolo ir y venir de una a otra mesa con diferentes pedidos muy rápido.

-¡¡Hey mesero, por aquí, ya estamos listos!! - la chillona voz de una chica lo hizo voltear. Santa mierda, mierda, mierdaaaaaa, no, sólo no, por favor no rogó al cielo y no era para menos. Sentado junto a una sonriente chica de pelo largo y rosa fosforescente estaba Loud, su rostro era tan serio y lo miro con tal desconocimiento que nadie pensaría que hace unas horas estaba tan profundo dentro de Blue mientras lo tomaba y gruñia como animal, es más aún después de haberse duchado Blue podía sentir su restos de la noche anterior salir de su interior sobre todo cuando Loud clavó su ardiente mirada en el.

-Quiero los panqueques arcoíris, un té de hierbas aromáticas y este amargado va a querer?... -La chica se quedó callada viendo la forma en que Loud miraba al mesero-. Oh Dios, te pido una disculpa por la actitud de éste tipo, es solo que...veras, tu...pareces una copia exacta del amor de su vida y pues es imposible no mirarte, ya que te vez exactamente como el, bueno te faltan los tatuajes, el trágico pasado de mierda entre otras cosas pero aparte de eso eres igualito.

Blue gimió internamente, ahora todo el embrollo tenía una gran cantidad de sentido. - Entonces los panqueques arcoíris y un té, ¿Cierto? -Blue puso su mejor cara de póquer.

-Ah bueno, al menos tu voz no es como la suya, verte es realmente perturbador si conoces al amor de este tipo, pero escucharte es como romper la burbuja, la magia simplemente se esfuma -la chica volvió a hablar.

Mierda penso Blue qué de manera inconsciente apretó los dientes. Vaya, eso explicaba porqué no lo dejaba hablar cuando estaban juntos, una sensación amarga se instalo en su estómago mientras se dirigía al mostrador para entregar el pedido.

Blue volvió unos minutos después y entregó el desayuno de la chica junto a un café negro que Loud había pedido, esto era para lo único que este había abierto la boca en su dirección después de eso lo ignoró por completo. Maldito tipo que se movía tan bien, Blue se odió por sentirse como se sentía frente a Loud pero estando tan cerca de él podía sentir su aroma y el calor que su cuerpo exudaba lo hacía estremecer ya que podía sentir todas y cada una de las marcas que este dejará en su cuerpo hacia unas horas, mientras que Loud parecía estar tan nervioso como una lechuga, aunque era una lechuga monumentalmente hermosa y elegante como siempre. Vestido con un lujoso traje que seguramente valía más de lo que blue ganaba en un año, mierda se veía tan bien y cuando un dedo de Loud tocó la manó de Blue accidentalmente, este pudo sentir la lujuria expandirse en ondas dentro de el volviendo su cuerpo hipersensible mientras que obviamente para Loud no era la gran cosa ya que ni siquiera se disculpo y siguió hablando con la bonita chica que no dejaba de mencionar lo emocionada que estaba por comer en ese lugar.

Blue no supo nada de Loud por los próximos días, eso no era algo extraño ya que en ocasiones podían pasar semanas sin que le llamará pero ingenuamente había creído que tal vez el lo llamaría después de lo del restaurante. Cuando pasaron 10 días sin saber de él blue supo que no seria así, Blue también había decidido que Loud, su masculina, hermosa cara y su gran duro y sexi cuerpo, podían irse al demonio el no lo necesitaba. Su determinación se fue al carajo 14 días después de lo del restaurante, mientras se encontraba en el hospital visitando a su padre cuando un mensaje entro a su celular. Eran sólo 5 palabras, un simple :Ven a mi casa ya.

Tal vez fue por las terribles noticias que su hermano y el acababan de recibir pero de inmediato salió del hospital y se dirigió al apartamento de Loud.

Loud lo besó con pasión logrando lo que Blue deseaba, olvidarse de todo, olvidarse de que todo lo que habían hecho había sido en vano. Olvidarse que estaba por perder a su padre, olvidar el rostro de su padre que ya no era capaz de respirar sin ayuda, olvidar que los médicos ya se habían dado por vencido con el, olvidar que pronto estaría completamente solo en el mundo. Ya que seguramente su hermano no estaría feliz de tenerlo cerca cuando su padre ya no estuviera, de todas formas Blue solo era el hijo de la amante de su padre, una chica que lo dejó en manos del gobierno en cuanto nació, el no la culpaba por eso, seguro tuvo sus razones. Pero no había conocido a su hermano hasta que tuvo 10, fue cuando su padre biológico de alguna manera logró obtener su custodia, la esposa de este no había sido cruel con el. No...ella más bien había actuado como si el no existiera, ignorando su presencia casi por completo, eso hasta que tiempo después de su llegada, un día, ella simplemente se marchó. Su hermano que tenía 15 en ese momento, le había gritado que todo era su culpa y blue no negó las acusaciones porqué eran ciertas. Mierda grito internamente estaba por perder a su padre el único ser en el mundo que lo había querido y se había preocupado por el. La feliz semi inconsciencia vino cuando Loud lo hizo ver estrellas y la lengua en su boca parecía querer chupar su cerebro por su garganta.