CREO EN MI

Cristina sale corriendo del lugar en un mar de lágrimas, su primer amor la traicionó de la peor manera, el único lugar en donde puede recibir amor, es en el orfanato en los brazos de Alma, su mejor amiga, así que se dirige a ese lugar.

Alma se encuentra jugando con un grupo de niños, cuando observa ingresar a Cristina llorando de una manera desenfrenada, así que encarga a los niños a otra colaboradora y se dirige a dónde fue Cristina, al ingresar ve que su niña llora acurrucada en una almohada.

_ Mi cielo que te sucede ¡que te han hecho! _ Alma dice angustiada.

_ Usted tenía razón, él no era confiable me engaño, le ví teniendo relaciones sexuales con Claudia, ella es su novia desde hace mucho tiempo, te agradezco mucho por tus consejos me sirvieron para no caer en la tentación.

_ Cristina abraza de su cintura a Alma y agradece por sus consejos, que le sirvieron para no caer en la trampa de Pedro.

Mientras que Cristina es consolada por Alma, en la mansión Lozano hay otro acontecimiento.

Los padres de Pedro acuden a su habitación, luego de escuchar semejante alboroto.

_ ¡Que sucede aquí! ¡Por qué tanto alboroto! Necesitamos descansar y por la bulla no podemos dormir. _ Dice Lucila enojada.

_ Mamá lo que sucede es que luego que culminará nuestra reunión, llegó la huérfana y de frente se vino a buscar a mi hermano, Pero lo vio con Claudia en la cama y salió de la mansión corriendo y gritando. _ Dice Miriam demostrando inocencia.

_ ¡Cómo qué tu hermano está en la cama con Claudia! _ Grita Jerónimo.

* Jerónimo de una patada abre la puerta de la habitación de Pedro, para vergüenza de muchos, Claudia se encuentra montada encima de Pedro demostrando su desnudez, ella grita por la impresión y se cubre con las sábanas.

Jerónimo se acerca a su hijo, ya que la única que reflejó sorpresa fue Claudia y no Pedro, ni para reclamar el allanamiento en su cuarto, el padre golpea a su hijo, para que reaccione, Pero no lo consigue.

_ ¡Llamen a una ambulancia! _ Grita Gerónimo.

_ ¡Que le pasa a mi hijo! _ Grita desesperada Lucila, toma de los cabellos a Claudia y la saca de la cama, luego le quita las sábanas y la deja desnuda.

Claudia de la vergüenza, no sabe que hacer, ahí también se encuentra Joel, que decide mirar al piso y no mirarla a ella, porque le da asco.

_ Por favor Miriam, entrégame mi ropa, sabes que lo planeamos las dos, no puedes decir lo contrario. _ Dice Claudia.

_ ¡Estás loca! Cómo puedo estar de acuerdo para que lastimes a mi hermano ¡Tramposa!

* Llega la ambulancia y Pedro es conducido a la Clínica, luego que le administraron el antídoto, ya por la madrugada regresa a su casa, para cambiarse de ropa e irse al aeropuerto, de la misma forma Joel, no tuvo tiempo de despedirse de la niña que le robó el corazón, Pero como tiene su número de contacto, se despedirá por ese medio.

Finalmente, ambos amigos viajan rumbo a España, Pedro sin cumplir su deseo de poseer a Cristina y Joel sin la satisfacción de declarar su amor por la niña que le robó su corazón.

Pero Miriam tiene un plan macabro en contra de Cristina, arde en celos por la forma en como Joel la consolab, como la abrazaba y acariciaba su cabello, a ella le hubiese gustado que él la tratara con tanto amor, como él trataba a Cristina.

_ Padres deseo que me comprometas con Joel Altamirano, sé que él estará 4 años en España, Pero lo esperaré e incluso iré a visitarlo. _ Dice Miriam.

_ Pero hija, Joel es hijo de uno de los trabajadores de la empresa, Pedro solo se hizo amigo de él, para que lo ayude a pasar sus materias en la preparatoria.

_ Dice Lucila.

_ Lo que sea padres, a mí me gusta Joel y lo quiero como mí marido, si no cumplen mi deseo, tomaré como marido al peor y miserable de los hombres, para que su círculo de amigos hablen de ustedes.

_ Dice Miriam amenazante.

_ No hagas eso, está bien, todo lo que quiera nuestra princesa será cumplido, ahora mismo llamaré a los padres de Joel y firmaremos un contrato de unión marital, ese muchacho no podrá negarse en casarse contigo, de lo contrario sus padres irán presos. _ Dice Jerónimo.

_ Muy bien padre, sabes que te amo mucho, Pero deseo pedirte otro favor.

_ Dice Miriam con una carita triste.

_ Padre necesito cinco millones, para comprarme muchas cosas, me siento triste porque mi amado se fue y no sé cuando lo volveré a ver, ustedes cómo padres no querrán ver a su hija deprimida, no es así. _ Dice Miriam.

_ Claro que no hija, ahora mismo te transferiremos el dinero y cómprate lo que quieras. _ Dice Jerónimo.

Media hora después.

Miriam se encuentra hablando por teléfono y tiene una acalorada discusión con la otra persona qué está detrás de la llamada.

_ Mira monja de medio pelo, si tú no haces lo que yo te pido, te acusaré de prostitución, gritaré a los cuatro vientos, de que en el orfanato, se encuentra a los cuidados de los niños una prostituta y que se encuentra enferma. _ Dice Miriam.

_ Por favor no hagas eso, soy una pecadora que busca cambiar su vida, porque eres mala, no deseo hacer mal a nadie. _ Dice la monja.

_ No sé cuál es tu rollo, solo quiero que hagas lo que te pido, enviaré a una persona con las instrucciones, espero que no falles.

 _ Está bien. _ Dice la monja con tristeza.

MÁS TARDE

Cristina se pone de pie, ya que se encontraba descansando en la habitación de Alma, hoy tenía que acudir a dar clases a la hija de una de las benefactoras del Orfanato.

Sale de la habitación y se dirige a la puerta de salida del orfanato, Pero es intervenida por una monja.

_ Niña, no has comido durante todo el día, si vas a salir bebé aunque sea un vaso de jugo, eso te hará sentir mejor.

_ Dice la monja.

_ Gracias hermana María. _ Dice Cristina, coge el vaso y se bebe todo el jugo que había en el vaso.

* Sale por la puerta principal del Orfanato y en el transcurso que va caminando, se va sintiendo mareada, se coge de la cabeza por la desesperación, los mismos hombres de la minivan que la quisieron asaltar, bajan del vehículo y se le acercan.

_ Uy chiquita, no sabes cómo te disfrutaremos. _ Dicen un hombre regordete lamiéndose los labios.

_ Cristina intenta defenderse, repartiendo puñetes y patadas, Pero no atina a ninguno, la droga que bebió en el jugo hace que pierda toda fuerza y voluntad.

La suben a la fuerza a la minivan y se la llevan sin rumbo fijo, en el camino uno de los hombres recibe una llamada y el tipo contesta.

_ El plan dió resultados.