La Debilidad Del Capó

...Stefani Greco...

Estoy aquí entre mi ropa, sin saber que ponerme para el dichoso evento, hoy estuve todo el día con la que es mi suegra y cuñada, de un lado a otro, con lo de la dichosa boda, estoy exausta, y este tipo, me dice que debo ir con él, no se ni quien le dió mi número, pero no estaba de humor a si que le colgué rápido, me duche y estoy entre 3 vestidos, uno negro, uno azul, y una vino,, optó por el vino, es largo, elegante con encaje, corte V, sin mangas, me medio recogo el cabello, marcando mis ondas, dejo dos mechones sueltos a los lados, me maquillo sencillo, y veo que son las 7:45, guardo mi celular, y tomo mi cartera bajo, y están todos en el salon —Que guapa hermana —me dice Victoria, yo le sonrió

—A dónde vas hija —me dice mi padre.

—A un evento con Massimo, me avisó en la tarde —todos asienten

—Alla te vemos hija —yo asiento y sonrió, en eso una empleada entra con Massimo, realmente le gusta la puntualidad

—Buenas Noches, estas lista —asiento y salimos juntos, me abre la puerta de su Ferrari, y acelera, hasta llegar a una mansión, se estaciona, y se baja abrirme la puerta, toma mi mano para ayudarme a bajar, después camino a su lado y el entrelaza mi mano en su brazo, entramos juntos y de inemdiato siento miradas por todos lados, de verdad me molesta la atención, pero recuerdo mi apellido y el que pronto llevare —Estás bien —la voz gruesa y varonil de Massimo me regresa a la realidad, y solo asiento

—Quiero agua —el asiente y camina hasta la barra y regresa con una botella de agua y me la da —Gracias —el medio sonríe, saco un frasco de mi cartera y tomo una pastilla, le doy un trago al agua, y la tapo, veo que Massimo me mira, pero no dijo nada, en eso un hombre, también guapo, se acerca a nosotros, sus ojos son marrones

—Buenas Noches, un gusto soy Alessandro, amigo de este testarudo —yo sonrió y le doy la mano, veo que Massimo finje no haberlo oído

—Soy Stefani, prometida de... De Massimo —volteo de inemdiato al detenerme y volver hablar, su cara me causo gracia, pero solo me límite a sonreír, Alessandro rio bajo y me dió una sonrisa cómplice, en eso varía gente se acercaba a saludar, y Massimo me presentaba como su prometida, ya queria salir de ahí, ví la hora en mi celular y eran las 11 de la noche, me empezaba a sofocar, y Massimo no volvía del baño, a lo lejos ví a Alessandro con otro hombre, me acerque a el —sabes sí tienen un balcón o jardín Alessandro —el me mira y asiente

—Ven vamos, a mira, el es Moisés, también amigo de tu prometido ausente y mio —saludo a Moisés

—Alessandro sácame de aquí, por favor —le dijo bajito y el aisnete con cara preocupado, le dice algo a Moisés y me lleva a un jardín cerca del estacionamiento

—Estas bien —yo niego, saco una pastilla y me lo tomo, con el agua, ya era la 3er botella de la noche —quieres que busque a Massiml —lo miro

—No, no me dejes sola, por favor —en eso siento como me mareo, todo me da vueltas y me tomo del brazo de Alessandro —sácame de aquí por favor —siento como me toma en brazos y me sienta en un asiento, me siento muy mal, mi celular suena y suena, y después empezó a sonar el de Alessandro, el acelera y responde el teléfono

•Aqui va conmigo.

•Ok, ahí te vemos

•La veo mal

•Ahi te veo

Cuelga y tomo su mano —baja el vidrio por favor —el lo baja poquito —detente por Dios, hazlo ya —baja la velocidad y frena de golpe, abro la puerta apresurada, salgo, empiezo a vomitar, solo siento como toman mi cabello y ponen una mano en mi espalda

—Tranquila, ten aquí tengo más agua —solo asiento, a lo lejos veo unas luces de auto, me enjuague la boca, y veo a Massimo, sin saco, con la camisa media abotonada, algo despeinado, encerio me dejó sola en esa fiesta por irse a...

—Como estás, te llevo a casa —se me acerca y me da un olor desagradable a alcohol combinado con humo de cigarro y a perfume barato de mujer, levanto mi mano para detenerlo, cuando de repente veo a una mujer bajar del auto de Massimo, y le habla

—Massimo, estoy aburrida —sonrió y lo miro, planeaba hacer que me llevará Alessandro, pero viendo a esta copia barata de kardashian, pensé en hacer que la dejé aquí botada en la carretera y me lleve a mi, pero el auto a de apestar a su perfume, lo miro

—No, vete con tu amante, apestas a ella, perfume barato —la tipa se acerco a nosotros, Alessandro se recargo en su auto y sonreía divertido

—Que dijo está perra —levanté una ceja y mire a Massimo, jamás me rebajare al nivel de ninguna, menos de una tipa que solo es la amante y se conforma con eso

—Monica cállate, y cálmate —la tipa solo asintio y agacho la cabeza —y tú súbete al auto, te llevo a tu casa —negué y mire de reojo a Alessandro quien reía de la situación —que te subas, no tengo tu tiempo ni paciencia —lo miro, con una sonrisa seca

—Entonces lárgate, al final me dejaste sola en esa estúpida fiesta a la que tú me llevaste, por irte a revolcar con esta tipa, que se conforma con tus mijagas —Massimo me mira demasiado molesto, puedo verlo en sus ojos, pero no me intimida

—Maldita engreída, súbete al maldito auto ahora

—Que no, menso con esa mujer sin clase

—Stefani, se me está acabado la paciencia.

—Que lastima, soy testaruda, orgulloso y muy terca, a si que no, no me subiré a tu auto, hasta que lo laves y no huela a ella, ni tu tampoco —lo veo suspirar y conseguí lo que quise

—Alessandro llévala a su casa —Alessandro quien parece disfrutar la escena asiente, me da su saco, ya que empezó hacer fresco, y Massimo.... Massimo se le queda viendo.

—Que amigo, dónde está tu saco, hace frío y está mujer acaba de vomitar todo —en eso siento como me mareo de nuevo, y me tomo de Alessandro escondiendo mi rostro en su pecho, y a lo lejos escucho mi celular

—No te alejes —le dijo bajito, el pone una mano sobre mi cabello y de la nada, siento como me jalan, todo se me mueve, espero el golpe, pero nunca llega, siento unos brazos y al abrir los ojos, me doy cuenta que estoy a centímetros del rostro se Massimo, lo miro y lo empujó a los segundos fue mala idea, ya que casi me caigo, pero logré mantener el equilibrio —que diablos te pasa animal, casi me tiras —le gritó acomodando-me el saco de Alessandro....

Stefani Grecco Colombo

Massimo Russo Rizzato

Alessandro Luchesso