Convertirse En La Esposa De Un Mafioso

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"¿Dónde está mi hijo?"

Era la primera vez que Bi Laksmi oía a Araya llamar a su hijo con un posesivo así. Normalmente Araya solo lo llamaba de forma grosera, como '¿dónde está ese niño?' '¿¡dónde está ese niño demonio!?'

"El joven amo está en su escuela, señora."

Ahora Bi Laksmi estaba realmente preocupada por su pequeño amo, ¿para qué más buscaría la Señora al joven amo si no era para torturarlo? Y no había nada que Bi Laksmi pudiera hacer como sirvienta, incluso su amo era indiferente a la situación de la casa.

"¿Escuela?" Araya murmuró interesada, una brillante idea cruzó por su cabeza.

"¿A qué hora regresa Ghariel? Que yo lo recoja."

Ahora la sirvienta de Araya tenía otra conjetura, aunque las palabras de Araya sonaban como una buena madre que quería recoger a su hijo. En cambio, pensó, ¿qué cosa mala hizo que el humor de su Señora decayera? Normalmente Araya se acercaba a Ghariel para desahogarse así.

¿¡Y si la Señora quiere regañar al joven amo frente a sus compañeros de escuela?! Pensó Bi Laksmi preocupada.

"Bi Laksmi, ¿te pregunté a qué hora?" Reprendió Araya al ver a su sirvienta que en cambio estaba soñando despierta.

"Ah, lo-lo siento Señora. Eso. El Joven Amo normalmente regresa a la una de la tarde," respondió Bi Laksmi apresuradamente.

"Hmm, significa que faltan dos horas, ¿verdad?"

Bi Laksmi asintió, "el que está encargado de recoger y llevar al Joven Amo es Sir Bastian, Señora."

"¿Bastian?"

***

Un hombre de veintitantos años que llevaba varios archivos en sus manos entró en una de las habitaciones más importantes de esta mansión, nadie podía entrar allí aparte de él y su amo.

Clic...

Después de abrir la puerta con su huella digital, entró directamente en la habitación que solo estaba iluminada por la luz tenue de una vieja lámpara de araña cuyo resplandor se atenuaba sobre la mesa de madera negra en la habitación.

A lo largo de la pared, varios tipos de pistolas y armas de fuego estaban expuestos ordenadamente en estantes de madera oscura, como si fueran adornos y a la vez una advertencia. Había un revólver clásico con grabados en el mango, una pistola automática con destellos de acero frío, hasta una escopeta de doble cañón que parecía haber sido usada a menudo. Algunos rifles viejos se apoyaban en la esquina, mientras que montones de municiones estaban apilados en un armario de cristal deslucido.

El hombre se sobresaltó un poco al darse cuenta de que la silla detrás de la mesa negra estaba ocupada por alguien.

"Lo siento Amo, entré sin llamar. Pensé que se dirigía a la oficina esta mañana," dijo mientras se inclinaba cortésmente.

Su nombre es Bastian, la mano derecha del mayor jefe de la mafia de este país. ¿Quién más si no el Amo Gevandra Raguel Smith?

Gevan, que estaba disfrutando de un vino en la mesa, parecía no reprocharle nada. Solo Bastian tenía acceso a su estudio además de él mismo.

Bastian colocó los archivos que traía sobre la mesa de trabajo de su Amo. Después de eso se quedó de pie allí hasta que su Amo le diera la orden de irse. Por un momento pudo ver el rostro cansado de Gevan, el hombre claramente no estaba bien al beber alcohol en esta mañana que se acercaba al mediodía.

Gevan pareció suspirar inquieto mientras se alisaba el cabello, "Ella volvió a intentar suicidarse esta mañana," reveló en voz baja.

"¿La Señora?" Preguntó Bastian retóricamente. Claramente sabía que estaba dirigido a la Señora principal de esta casa, la única persona que siempre lograba destrozar a su Amo.

Pero estaba bastante sorprendido, porque no había escuchado ninguna noticia. La última vez que Bastian supo que su Señora había intentado suicidarse tirándose de las escaleras del segundo piso.

"No escuché nada, Amo. Ningún sirviente habló de ello."

"Se dirigió a la azotea, solo yo la vi." Reveló Gevan.

Todavía recordaba cómo esta mañana, cuando iba a bajar usando el ascensor, vio que el número del ascensor se dirigía al cuarto piso. Si fueran los sirvientes los que iban a limpiar la azotea, no usarían el ascensor. Así que sus pensamientos solo se dirigieron a su traviesa esposa. Y su suposición era cien por ciento correcta.

"Le ordenaré a la sirvienta personal de la Señora que le preste más atención, Amo." Dijo Bastian, él es quien maneja el estado de esta mansión.

"Instala también cámaras de seguridad allí."

Bastian asintió en respuesta a la orden de su Amo. Toda la mansión, incluso las áreas privadas como la piscina, ya estaban usando cámaras de seguridad.

¿Qué pasaría si su Señora intentara suicidarse en el baño después? No se imaginaba si su Amo también instalaría cámaras de seguridad allí, pensó Bastian.

Gevan volvió a beber su bebida prohibida, ahora mientras reía entre dientes. "Pero, no me gritó, antes."

Bastian pudo ver un brillo de felicidad en los ojos de su Amo, "Tal vez la Señora ya pueda controlar sus emociones, Amo." Respondió Bastian simplemente.

"A pesar de que podría disfrutar de la vida bien en esta mansión, ¿por qué tiene tantas ganas de morir? Mujer estúpida." Reveló Gevan mientras golpeaba sus dedos sobre la mesa.

Bastian permaneció en silencio sin responder, su amo no hablaría tanto si no fuera porque está borracho. Además, como una persona que ha estado con Gevan desde pequeño, Bastian no sabía cómo reaccionar.

Gevan es dos años menor que él, desde pequeño Bastian ha sido diseñado como la mano derecha de Gevan, como su padre que también fue la mano derecha del jefe anterior.

Si desde su punto de vista neutral, su Amo es quien tiene la culpa aquí. Arrebatar la vida de una chica así como así, incluso hacer que pierda la cordura, Bastian admite que su Amo es realmente cruel.

Pero no tiene derecho a juzgar, su trabajo es solo ser una buena mano derecha de Gevan. Obedecer las órdenes de su Amo, ya sean buenas o malas.

***

Después de escuchar un poco el desahogo de su Amo, ahora Bastian debe cumplir con sus obligaciones diarias. Asegurarse de que su Joven Amo esté a salvo para ir y volver de la escuela.

"Espera, Bastian."

Apenas había pasado la puerta de la mansión cuando se giró al escuchar la llamada.

Se sorprendió bastante al encontrar a la Señora quien lo llamaba. Normalmente Araya sería muy sensible con las personas alrededor de Gevan, especialmente él. Pero Bastian no mostró ninguna expresión exagerada. Esperando a que la persona que debía ser respetada después de Gevan continuara hablando.

"¿A dónde quieres ir?" De los varios tipos de preguntas que ya había pensado, Araya eligió preguntar esto.

"Hacer mi trabajo, Señora." Respondió Bastian cortésmente.

"¿Qué trabajo?" Está bien, Araya siente que ya se está comportando como una entrometida.

Además, la cara de esta persona es tan dura como la de ese Gevan Gevan, pensó para sí misma.

"Recoger al Joven Amo Rayvandra, Señora."

Rayvandra es el nombre de Ghariel en casa, excepto Araya a quien no le gusta el nombre que le dio Gevan. Prefiere llamarlo Ghariel, eso es lo que Araya sabe por su memoria.

Araya se metió el cabello detrás de la oreja para reducir la incomodidad, "Iré contigo." Dijo.

Bastian permaneció en silencio por un momento, en secreto observó la apariencia de Araya que ya estaba lista con un bolso Dior en sus manos.

"Si se puede saber, ¿a dónde quiere ir la Señora?" Preguntó Bastian con frialdad. Por lo que sabe, si Araya quiere salir, la mujer conducirá sola con su colección de autos de lujo, nunca viaja como esta vez.

"Quiero ir a recoger a Ghariel, ¿te molesta?" Preguntó Araya de vuelta.

Afortunadamente, la actitud original de Araya es arrogante como esta, así que no necesita fingir ser educada, ¿verdad?

"Por supuesto que no, Señora. Iré a buscar el auto, la Señora puede esperar aquí un momento." Dijo Bastian y se dirigió al garaje.

Qué impaciente por ver al pequeño Ghariel, a esta edad son muy lindos, ¿verdad?. Pensó Araya entusiasmada.

Después de eso, entró en el auto conducido por Bastian.

Ambos no sabían que había un Gevan observando su interacción desde la ventana del tercer piso de la mansión.

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continuará.