La Villana Conoce La Historia

Tres días pasaron después de la desastrosa fiesta de disfraces del palacio imperial, la noticia de que mi temperamento había hecho de las suyas fue la comedilla de todo el circulo social, por eso en esa tarde mientras estaba en una pequeña reunión con unas señoritas que me habían invitado, parecían bastante entusiasmadas con saber un poco más del tema.

A pesar de que fue algo escandaloso, no creí que tuviera tanto apoyo.

—Te entendemos un poco señorita Madeline, yo también quisiera tener el valor para enfrentarme con la amante de mi prometido. —Dijo una joven hija de un barón.

Mis ojos de inmediato se fijaron en la temerosa señorita.

Pude reconocerla un poco ya que su familia la iba a casar con un marqués, era un matrimonio arreglado, y al igual que el mío, el joven hijo de esa familia se enamoró de alguien más.

Y aunque era un secreto a voces, ahora sabíamos que era real.

Me interesó un poco más su historia, y por eso cuando salimos de la reunión le pedí seguir hablando a solas.

Como estábamos en un salón de té, nos movimos hacia un lugar más arrinconado, con la finalidad de que nadie nos escuche. Y ahí fue cuando escuché mejor su historia.

Ella de verdad estaba completamente enamorada de su prometido, fue un amor a primera vista, desde la vez que los presentaron.

Ella creyó que él de igual forma se sentía, pero la realidad le golpeó como un rayo cuando una noche de banquete lo miró a solas con su amante.

La señorita estaba entre sus brazos, siendo besada con pasión mientras el corazón de la joven era roto.

—Los enfrenté en ese momento, pero solo me dijeron que ellos se amaban... Cuando la noticia de su alteza al príncipe con la señorita Rosé se supo, me sentí mal por usted.

—La diferencia es que no lo amaba de verdad.

Suspiré. Y aunque este año todo ha sido un desastre, puedo asegurar que ha sido el mejor año que he vivido. He conocido muchos nuevos sentimientos y disfrutado más mis días.

Dejar que mi corazón explorara nuevos sentimientos ha sido de las mejores experiencias que he sentido. Permitirme conocer el amor junto al joven Duque Aaron me emocionaba.

—La ley imperial considera el adulterio como un acto inmoral y considera la traición como un motivo para anular el matrimonio... Sé que lo que voy a decir suena algo imposible y difícil, pero si no quiere este matrimonio puede apegarse a esta ley. —Le comento a la joven baronesa, tomando la taza de la mesita.

Ser una persona infiel en esta sociedad era algo mal visto, aunque la gran mayoría lo eran. Los círculos sociales de los nobles estaban llenos de hipocresía y máscaras. La nobleza era como una obra de teatro, mientras le muestras a la audiencia bajo la luz de los reflectores lo mejor, detrás del telón, en las sombras se escondía la verdad.

—No podía hacerle esto a mi familia, mi matrimonio es la única opción para mejorar las finanzas de nuestra familia. —Al final la joven Amelia se rompe a llorar, mientras se cubre los ojos con los puños de sus manos.

Me daba tanta pena por ella, sé que la mayoría de las jóvenes están siendo influenciadas por sus familias y su sentido de responsabilidad.

Era tan injusto.

—La señorita Madeline ha sido una inspiración para mí, espero algún día lograr ser tan valiente como para gritarle al mundo completo como me siento.

—Señorita Amelia... —Las palabras estaban atascadas en mi garganta, no sabía mucho que decir, a pesar de que yo también fui una "marioneta" de mi familia, yo tengo la facilidad de que mi familia no me odiaría por ser como soy. —Espero de todo corazón que las cosas mejoren para usted.

Terminamos nuestras tazas y con ello nuestra pequeña reunión.

Viendo desde otra perspectiva y opinión, me di cuenta que no estaba haciendo las cosas tan mal.

Y al ver al hombre que me esperaba en la puerta al salir del salón, supe que estaba haciendo las cosas correctas para el futuro que estaba trabajando.

Esa tarde estábamos planeando salir a buscar un regalo para el joven segundo príncipe, que en una semana entrará a la academia del imperio, como muestra de nuestra amistad le conseguiremos algún detalle.

Al ver esos ojos azules que me miraban con mucho cariño, me hizo ver que a pesar de lo que pasé anteriormente, valió la pena.

—¿Lista? —Me pregunta con una media sonrisa. Yo al igual le sonreí y entrelazamos nuestras manos.

—Si, vamos. —Aunque sabía que su pregunta no tenía un profundo trasfondo, para mí, era una pregunta con más significado que nunca.

Estaba lista, para dar el siguiente paso y esperar que lo que nos traiga el futuro sea solo felicidad.