En mi vida pasada, mi nombre era sinónimo de vanidad y egoísmo. Fui un error para la corona, una arrogante que se ganó el odio de cada habitante de mi reino.
A los quince años, mi destino se selló con un compromiso político: la promesa de un matrimonio con el Príncipe Esteban del reino vecino, un pacto forzado para unir tierras y coronas. Él, sin embargo, ya había entregado su corazón a una joven del pueblo, una relación que sus padres se negaron a aceptar, condenándolo a un enlace conmigo.
Viví cinco años más bajo la sombra de ese odio. Cinco años hasta que mi vida llegó a su brutal final.
Fui sentenciada, y cuando me enviaron "al otro mundo", resultó ser una descripción terriblemente literal.
Ahora, mi alma ha sido transplantada. Desperté en el cuerpo de una tonta incapaz de defenderse de los maltratos de su propia familia. No tengo fácil este nuevo comienzo, pero hay una cosa que sí tengo clara: no importa el cuerpo ni la vida que me haya tocado, conseguiré que todos me odien.
NovelToon tiene autorización de Crisbella para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Enemigo al acecho
Punto de vista de Dante
El sol apenas se filtraba por las cortinas de cristal cuando el sonido de una notificación rompió la paz. No era mi teléfono; era la tableta de Katerine, la que contenía los archivos de la Abuela.
Ella se incorporó de golpe, la estratégia reemplazando a la amante en un instante.
—'Nido del Halcón' —dijo, leyendo el mensaje con alarma.
Me senté a su lado, la tregua terminada.
—¿Qué pasa?
—Un movimiento —dijo Katerine, su mirada se hizo aguda y fría como el hielo de un glaciar—. Acaban de forzar un pago inmediato de un préstamo. Es una cantidad pequeña, pero es un claro intento de probar si yo tengo el control real o si soy solo una figura decorativa.
Me levanté de la cama, la adrenalina reemplazando la calma.
—Se acabó la luna de miel, Reina. Ese fantasma nos ha encontrado. Es hora de darles un motivo real para lamentar haber picado el anzuelo.
Nos vestimos rápidamente empezando a planear nuestro próximo movimiento, teníamos que ser muy cuidadosos, ya que este nuevo enemigo estaba resultando ser más ágil de lo que esperábamos.
Punto de vista de Katerine
La paz se había esfumado. Pero en lugar de frustración, sentí una oleada de intensa concentración. El peligro era mi elemento natural. Vestirme y analizar la amenaza se sentían como volver a casa.
Nos dirigimos a la oficina del ala de invitados. Dante ya había desplegado diagramas y mapas.
—El movimiento es obvio —dije, señalando el mensaje en la tableta—. Es una prueba de resistencia. Están probando la solidez de la gestión y la velocidad de reacción. Si pagamos de inmediato, pensarán que somos ricos y cautelosos. Si nos retrasamos, pensarán que somos débiles y nos atacarán con una demanda mayor.
Dante se inclinó sobre la mesa. —Entonces, ¿cómo respondemos? Si actuamos demasiado rápido, el operador del 'Nido del Halcón' se volverá a esconder en las sombras.
—No vamos a pagar —declaré, tomando el bolígrafo rojo—. Y no vamos a retrasarnos. Vamos a reestructurar la respuesta.
Comencé a trazar líneas sobre el diagrama de la deuda de la Abuela.
—El 'Nido del Halcón' quiere probar nuestro control. Vamos a darle una prueba demasiado grande. Este préstamo forzado es pequeño, solo quiere su dinero. Pero el mayor patrimonio de los Borges sigue siendo el hotel boutique en la Riviera Francesa que aún figura a nombre de la Abuela. Está sobrevalorado, pero es visible.
Miré a Dante.
—Vamos a poner el hotel a la venta inmediata. Pero no lo haremos en el mercado abierto. Lo ofreceremos directamente a los inversores secundarios del 'Nido del Halcón', filtrando que lo hacemos para saldar deudas urgentes y liquidar los activos más rápidamente.
—¿Una venta relámpago? —preguntó Dante, siguiendo mi lógica con entusiasmo—. Eso les hará pensar que hemos entrado en pánico y estamos dividiendo la fortuna a toda prisa.
—Exacto. El operador de Esteban verá esto como su oportunidad de oro para obtener una propiedad clave con descuento. Cuando el 'Nido del Halcón' se mueva para comprar el hotel a través de una de sus sucursales tendremos que forzar un encuentro cara a cara para la firma.
“Necesitamos ver la cara de la persona que está usando la identidad corporativa de mi exesposo“, pensé.
Dante apoyó las manos en la mesa, su mirada de cazador encendida.
—Si logramos que el operador de 'Nido del Halcón' se exponga para asegurar esa propiedad, lo tendremos. Es un riesgo.
—El riesgo es mínimo comparado con dejar que este fantasma corporativo siga estrangulando nuestro capital desde la oscuridad —repliqué con firmeza—. Prepara la documentación de venta y la filtración. El cebo del hotel se lanza al anochecer.
Punto de Vista: El Operador de 'Nido del Halcón S.A.'
La oficina de Esteban era un santuario de mármol y silencio, en lo alto de la torre más exclusiva de la ciudad. El hombre que ocupaba el asiento principal, bajo la sombra de la lámpara de cristal, no era el antiguo esposo de Katherina, pero su mente estaba programada con la misma crueldad. Él era el fantasma, el ejecutor de una voluntad que trascendía la vida.
Una notificación luminosa parpadeó en su pantalla. Movimiento en el activo Borges.
Su asistente, un hombre rubio y nervioso, entró de inmediato.
—Señor, la nueva gerente de la fortuna Borges, Katerine Viteri, está liquidando el hotel boutique en la Riviera Francesa. Es una venta relámpago, dirigida a nuestros inversores secundarios. Parece que han entrado en pánico por la llamada de margen que usted forzó esta mañana.
El operador, un hombre joven y de rostro perfectamente inexpresivo, se recostó en su silla. Había estado esperando la reacción.
—Pánico —dijo, su voz tranquila y medida, sin ninguna prisa—. No. Eso no es pánico.
El asistente dudó. —Pero, señor, es una liquidación por debajo del valor de mercado. Un movimiento desesperado para saldar la deuda.
Una sombra de fascinación cruzó los ojos del hombre. Él no estaba viendo un movimiento financiero; estaba viendo la firma de una mujer muy inteligente. La Katerine original se habría rendido y llorado. Esta... esta mujer estaba contraatacando.
—No hay desesperación en esto —dictaminó, tecleando un comando en la pantalla que revelaba una foto de la joven Katerine, fría y perfecta, junto a Dante—. Esto es un cebo. Ella está sacrificando una pieza menor para forzarnos a salir de las sombras. Ella quiere verme, o al menos, quiere ver la mano que está moviendo el 'Nido del Halcón'.
El asistente tragó saliva. —¿Qué hacemos? ¿Ignoramos la venta?
El operador de "Esteban" sonrió, y fue la sonrisa más helada que el asistente había visto.
—Siempre habia dicho que a Katerine le gustaba sentirse el ratón en la trampa. Pero ella era el ratón que jugaba con el gato. Si me está ofreciendo su activo más preciado, es porque necesita una reunión.
Se puso de pie, su traje impecable. Su mirada se fijó en la foto de Katerine. Conocía su vanidad, su necesidad de control, y su profundo deseo de venganza. Si ella usaba un cebo, él debía asegurarse de que el anzuelo la atrapara a ella primero.
—Dile a los abogados que aceptamos la oferta por el hotel. Y exige una reunión para la firma en persona. Que sea en un territorio neutral, de aquí a dos días. Pero no iré yo. Enviaremos a alguien que conozca bien sus puntos ciegos, un peón lo suficientemente importante como para que ella baje la guardia, pero no tan importante como para que revele al verdadero cazador.
El asistente asintió, apresurándose a ejecutar la orden. El operador se quedó solo, tocando la foto de Katerine.
—Me encanta la Reina. Parece que la guillotina no te enseñó nada. Me pregunto si el fantasma corporativo te matará dos veces, querida Katherina.