Reencarne En La Bruja Blanca

Dayana: (Mari huyo como la gran gallina que es y me dejo ahí con ese hombre que se ve enojadísimo) ¿Por qué gritas?

Draco: te voy a enseñar quien es tu hombre y que nadie en este mundo más que yo tiene el derecho de tocarte (la arrinconé contra el escritorio que estaba detrás de ella, la subí allí y le abrí las piernas, escuchar esa locura hace que mi sangre hierva, es que no la puedo imaginar si quiera cerca de otro hombre, ella solo es mía y se lo voy a dejar bien claro)

Dayana: (asustada no estaba, excitada si y mucho, este hombre no sabe lo sexy que se ve enojado, se ve jodidamente sensual con esas venas todas marcadas, Dios santo desgarro mi vestido) mi vestido, me gustaba

Draco: te comprare diez más si quieres, ahora calladita y cooperando

Dayana: (esto me recuerda un drama coreano, solo que la escena es diferente, sus besos los sentía tan bien en mi cuello, iba descendiendo poco a poco hasta llegar a mi intimidad me dio una mirada rápida y sus preciosos ojos estaban totalmente dilatados, se ven tan sexy, termino de abrir más mis piernas si es que eso se podía más, y puso su exquisita boca allí, el muy desgraciado a aprendido a tocarme, demasiado bien diría yo, sus succiones me estaban haciendo delirar de placer hasta que llegue a mi delicioso orgasmo gritando su bello nombre) DRACO

Draco: así es mi hada, ese es el único nombre que puedes pronunciar (la embestí de una sola, al principio estaba enojado, pero eso no duro ni 10 segundos, esta mujer sabe cómo prenderme)

Dayana: (sus embestidas son exquisitas al igual que él, me tiene totalmente sometida, una mano la tenía en mi cuello mientras se enterraba en mi interior, hoy estaba sin control, y me estaba encantando verlo perder el control conmigo, saber que yo lo ponía de esa forma me hacía sentir poderosa, así que sin más lo ayude un poco con mis movimientos y ambos terminamos gimiendo nuestros nombres)

Draco: (ella cree que le voy a dar tregua, la baje y le di la vuelta la puse contra el escritorio, le di una sonora nalgada) esto es solo mío, ¿sabes que esto me tiene loco no?

Dayana: (claro que le iba a responder, pero no me dio tiempo) ahhhh (mis gemidos retumbaban en las pobres paredes de esa biblioteca, espero que Mari haya huido bien lejos para que no escuche el escándalo que tenemos aquí, llegamos nuevamente al clímax, me dio la vuelta y me cargo en dirección a una silla que estaba al fondo de la biblioteca)

Draco: aun quiero más de ti, así que espero que estés lista

Dayana: ando en modo calladita y cooperando

Draco: no te quiero callada totalmente, quiero que grites mi nombre cuantas veces quieras

Dayana: (mi mañana tarde fue bastante entretenida, no Salí de esa biblioteca hasta que mi flamante esposo no quedara totalmente satisfecho, jamás imagine que él tuviera ese tipo de personalidad obsesiva, pero simplemente me encanta y ahora más que nunca lo quiero solo para mí, ese papucho sí que sabe cómo hacerme ver estrellas, es más con lo de hoy creo que vi hasta la constelación completa, conste que no es ni reclamo ni queja, solo estoy totalmente satisfecha con el resultado de hoy, luego me tocara darle un premio a él)

Draco: espero que no se te ocurra mencionar lo del tema del divorcio y mucho menos pensar en tener otro hombre en tu vida ¿entendiste?

Dayana: más claro que el agua no puede ser

Draco: ahora descansa mi hada, te lo mereces

Dayana: (soñolienta) eres un descarado pervertido