Renací Para Salvarte

Cuando Kayla llegó a la mansión Ward, la estaban esperando tres personas quienes la recibieron en la entrada.

- bienvenida señorita Ward

Kayla, los miró sorprendida, pero después saludo sonriendo

Kayla: buenos días, soy Kayla… Kayla Ward

Estaba presente una cocinera llamada Isolda, una mucama llamada Ana y el cochero llamado James… ellos se presentaron y saludaron.

Señora Isolda: señorita, la duquesa Scott mando a llenar todas las despensas, tenemos comida para varias temporadas.

Señora Ana: desde el palacio enviaron ropa de cama y mandaron nuevos cristales de luz, además, que mandaron a reparar las chimeneas…

Señor James: la duquesa compró un nuevo carruaje y varios caballos y desde el palacio están habilitando una habitación para que la use para tratar las piedras

[mis amigas son las mejores del mundo]

Kayla agradeció a las personas que trabajan en la mansión Ward.

[desde ahora seré Kayla Ward, la prima lejana de la duquesa Hanna Scott y mi bebé será en un futuro un conde… no es la vida que esperaba… pero, con la ayuda de Dios y de mis amigas, siento que podré con todo… quizás… en algun momento, mi hijo pueda tener una relación cordial con su padre… pero antes, debo ser capaz de verlo, sin que me duela tanto, quiero que mi hijo conozca a su padre, pero quiero que crezca en un hogar rodeado de cariño, no que vea a sus padres gritándose en un callejon]

Una semana habia pasado, y el conde habia intentado conseguir información de Kayla… pero, solo habia escuchado que se había ido… intentó sobornar a los caballeros, al cochero e incluso a Rosa.

Conde: te doy cien monedas de oro, si me dices donde esta Kayla

Rosa: jamás, le diré señor conde… la vi dormirse llorando por su culpa, discúlpeme señor, pero por favor no me vuelva a hablar asi, y menos intentar comprar mi lealtad… jamás traicionaría a la duquesa Hanna

Conde: no tienes que traicionarla a ella, quiero información de Kayla

Rosa: señor conde, mi señora considera a Kayla como parte de su familia, decirle la ubicación sería una falta a su confianza.

El conde comenzó a desesperarse hasta ofreció dinero en posadas cercanas, pero no tenía respuestas…

[te voy a encontrar Kayla, me tienes que escuchar… yo no quería que esto pasara… yo no estaba seguro de mis sentimientos … nunca entendí como me podías amar tan sinceramente, sin yo merecerlo… fui un idiota… solo quiero que me escuches… por favor… ya descubri que Catarina no significa nada para mi… cuando ella me beso, me di cuenta… que no eres tú… que solo eres tú Kayla… y ahora estas sola… esperando a mi hijo… porque me comporté como un imbécil… dioses… ojala pudiera devolver un tiempo]

Un mes pasó y el conde no habia conseguido mucha información… estaba completamente desesperado y el señor Ansel, estaba preocupado por él…

Señor Ansel: Conde Saul, no quiero verlo nuevamente sumido en el alcohol

Conde: no puedo hacer eso… desde que estuve con Kayla no he vuelto a beber, y ahora no puedo hacerlo, antes lo hacía para olvidar el dolor, ahora… no puedo… la debo encontrar… es imposible que haya desaparecido… mi búsqueda será hasta la muerte de ser necesario.

Señor Ansel: entiendo… intentare buscar mas información, pero es difícil, la duquesa ha logrado anticipar todos nuestros movimientos.

Conde: lo sé, esa mujer me odia, pero debo reconocer que es muy inteligente, seguramente por eso, logró hacer que un hombre frío como Jasper llegue a sacar su espada contra mi, solo porque le respondí mal.

Señor Ansel: es que al duque se le nota que esta muy enamorado de su esposa, yo por nuestros negocios en los viñedos, he compartido bastante con él… y puedo dar fé… que es un matrimonio que se demuestra bastante su amor.

Conde: mmmm necesito hablar con Jasper… quizás… logré algo más…

Otro mes pasó y el Conde, caminaba en circulo en su habitación…

[no puede ser… ¿Cómo no puedo ser capaz de encontrarla? he contratado investigadores e incluso a mercenarios, solo para que me den su ubicación, pero la duquesa siempre evita, que yo pueda obtener alguna información… estoy seguro… que ella se debe comunicar con Kayla… eso… es… las cartas…]

Una semana estuvo el conde, cerca de la mansión esperando robar alguna carta, pero en todo ese tiempo, no descubrió nada… a la semana siguiente, comenzó a investigar las propiedades del duque…

[Kayla no tiene a nadie aquí, debe estar en una de las casas Scott]

se demoró un mes, en el cual casi no durmió, entre viajes recorriendo casi toda la zona sur del reino.

Cuando volvía cansado, hambriento y somnoliento, se encontró con un grupo de caballeros del ducado Scott, de inmediato reconoció a Carlos, sin embargo otros caballeros fueron quienes le hablaron.

- ¿no era este el hombre que acechaba la mansión?

- seguramente, se dio cuenta que no podía con nosotros

- Carlos, no te ibas a ir tu con la señorita Thatcher al quien él buscaba

Carlos sonrió por la pregunta y el conde vio esa expresión

Conde: ¿de que te ries niño?

Carlos: de nada señor

Conde: ¿es que acaso estabas intentando algo con mi mujer?

Carlos: ¿con su mujer?, disculpe Conde, pero quien a mi me gusta es la señorita Kayla, no su mujer, no conozco a la señorita Catarina

El conde no aguanto mas y se enfrentaron en una pelea cuerpo a cuerpo... ninguno de los caballeros intervino, fue una pelea limpia y en casi igualdad de condiciones.

Duque: ¡suficiente! Llévense a Carlos.

El duque ayudo al conde y lo subió a su carruaje.

Duque: Saul te llevare a tu casa

Conde: Jasper, ya no puedo más... no encuentro a Kayla y a ese hombre le gusta mi esposa

Duque: no recuerdo que me hayas invitado a tu boda

Conde: no quería que me pasara como la última vez... yo quería conocerla primero, pero, firmamos un acuerdo, un contrato... yo... con el tiempo... la reconocería como la condesa... yo...

Duque: ¿en ese tiempo en el que metiste a Catarina a tu casa?

Conde: Catarina es solo una amiga de la infancia, tu sabes que... ya no hay nada entre ella y yo...

Duque: eso tendrías que habérselo dicho a ella

Conde: pero... no lo hice... Catarina me dijo que estaba enferma y después se desmayó y solo llame al doctor... yo...

Duque: y así dejaste que se fuera...

Conde: necesito que ella me gusta, tengo que recuperarla... por favor, Jasper ayúdame

Duque: amigo... solo te puedo decir que... ella está bien...

Conde: sabes que no me daré por vencido

Duque: te odiaría si así fuese