MI LOBINO AMOR

#ALEX

El tiempo pasa lento, no sé si escuché mal o bien, me quedé perpleja mirando si era una broma o si era su manera de llamar a su hijo por no comportarse como ella quería, no entendía lo que me quería decir con exactitud. Evalúe cada frase, cada palabra, mirándola detenidamente, cómo comía sin ningúna expresión exagerada, note nervioso a Héctor, como que se le pasó el hambre, soltó el tenedor, no siguió con ningún bocado más, como que retuvo el aire en sus pulmones, por lo que me limité a callar, a no decir nada, solo asenti, como si fuera que lo comprendía, pero no era así no lo entendía.

-VAS A TENER QUE TENER MUCHA PACIENCIA. Prosiguió ella como si nada.

No podía entender su actitud, pero cada familia tiene sus rollos, en la mía me trataban de manera indiferente, mal a peor. Por decirlo de algún modo y podría entenderlo, justificarlo, porque no era mi madre verdadera, no era mi hermana verdadera, solo se convirtieron en familia porque mi padre las trajo, pero la miraba a ella, siendo la madre biológica de Héctor, que habla así de su propio hijo, eso no podía entender.

-CON AMOR TODO ES POSIBLE. Le respondí.

Héctor me miro sorprendido, su madre me miro sorprendida y a él también.

-SABES BAILAR. QUIERO QUE BAILES. A LOS HOMBRES COMO A ÉL SE LOS ENTUSIASMA BAILANDO. Me dijo severa.

-NO NECESITE HACERLO. Le respondí.

Ella abrió la boca ante mi expresión.

-BAILA. Me ordenó.

-MADRE ES SUFICIENTE. Por fin hablo Héctor.

Ella se me aproximó estirándome para que me incorpore y en el zamarreo mi medalla se hizo visible. Su mirada cambió, lo tomo con la mano temblorosa.

-TU NO ESTABAS DESTINADA A EXISTIR, SI NO FUERA POR MI ESPOSO. Exclamó.

-¡¿QUÉ?! Pregunté sin entender.

-REGRÉSALA A SU CASA. Le ordenó a Héctor.

Él asintió sin emitir un sonido, tomo un abrigo suyo y me lo coloco, agarro mi bolso. Me llevo apresurado afuera, donde estaba un auto, que al parecer era en el que vino su madre.

-¿QUÉ QUISO DECIR? Le pregunté a Héctor.

-LLÉVELA A ESTA DIRECCIÓN. Le indico Héctor a un señor que era el chófer.

-¿NO VENDRÁS CONMIGO?. Le consulte preocupada.

-NO TE PREOCUPES, TERMINARE CON MIS OCUPACIONES AQUI Y TE VERE PRONTO. Me dijo posando un beso en mis labios.

Antes que le diga algo más cerró la puerta, el señor comenzó a manejar, tenía una expresión sería, su mirada por el espejo retrovisor era fría y penetrante de un azul oscuro profundo.

Él conduce hasta salir a una carretera, no era por donde vine con Héctor.

-DISCULPE, NO RECUERDO QUE ESTE SEA EL CAMINO. Le dije nerviosa.

Me señalo el mapa que le marcaba el GPS y era por donde ir hasta la ciudad.

- AH, YA VEO. Le dije.

Este chófer como el de la grúa no era de muchas palabras. Me acomode más el abrigo de Héctor, sentir su aroma me relajo de algún modo y mire el paisaje hasta que los ojos me pesaron.

Sentí que no cerré mucho tiempo los ojos, y al parecer por la carretera fue más rápido el viaje, porque el auto paró y abrí los ojos, ya estaba ante el edificio donde me mudé con Héctor.

Suspiré hondo y al bajar soy recibida por Dante.

-BUENOS DIAS. Me dijo.

- ¿BUENOS DIAS? Indague.

- ESTABA PREOCUPADO QUE HACE DOS DIAS NO SABIA NADA DE TI. Me dice.

- Lo siento, mi celular había quedado sin batería. Le respondí.

-NO TE PREOCUPES. ME TOME LA LIBERTAD DE PRESENTAR UN CERTIFICADO EN TU TRABAJO. Me dijo.

Lo mire extrañada, para mí no había pasado tanto tiempo.

"ALEX" Aparecieron mis amigas y al rato veo que sale Sam.

-VAMOS A IR A COMER. VEN CON NOSOTROS. Me invitan.

-Claro. Les respondí confundida.

Al llegar al restaurante leí que decía "Especial del día Martes".

¿Me perdí el domingo y el lunes?

Me sentí tan cómoda con Héctor, sin mi celular, que no me percate que pase el tiempo tan rápido.

Tomamos asiento y nos trajeron la carta.

-Puedes poner a cargar aquí. Me señala Dante para que cargue mi celular.

-Aha. Le respondí, estaba tratando de hacer memoria de cada paso que hice.

-¿Dónde estabas? Me preguntó Débora.

-Con Héctor. Le respondí.

-¿Dónde? Pregunto Dante.

-En su casa. Le dije pensativa.

Él me miro sorprendido y al mismo tiempo Sam.

-¿En la casa de mi padrino? Indagó Sam.

-Uyuy... Así que pasaste un fin de semana con Héctor. Me dice Jime haciendo un bailecito de triunfo.

-¿En su casa, casa? Repite Dante sin salir de la sorpresa.

-Si en su casa, en el campo, y es muy bello, me agrado tanto que no me di cuenta que me perdí el domingo y el lunes. Le respondí.

-QUE ENVIDIA, TE HIZO PERDER LA NOCION DEL TIEMPO. Dijo Débora exhalando pesadamente y mordiéndose el labio.

Dante suspiro hondo como reponiéndose, poso su mano sobre la mía.

-Estuvieron los dos nada más. Me preguntó.

-Si y conocí a la madre. Le dije.

-A mi madrina. Dijo sorprendido Sam.

-ASI QUE YA CONOCES A TU SUEGRA Y ¿QUÉ TAL ES? Me preguntó entusiasmada Jime.

- Muy bella y elegante. Le contaba cuando siento que me tocan el hombro, me giro viendo a Daniel.

-ALEX. Me saludo.

-DANIEL, ELLOS SON MIS AMIGOS. Los quise presentar a Dante y Sam.

-YA NOS CONOCIMOS. Respondió serio.

-AH. Le respondo sorprendida, sentía que me perdí de algo.

-QUE GUSTO VERTE, ESTABA PREOCUPADO, HABLEMOS EN ESA MESA. Me invita Daniel.

-ELLA NO VA CONTIGO A NINGUN LADO. Escucho que le dice Dante.

-HABIAS ASEGURADO, ESA VEZ EN EL BOLICHE, QUE JIME ERA TU PAREJA O QUIERES ACAPARAR A TODAS LAS CHICAS. Le dijo molesto Daniel, se ve que cuando me fui esa vez del boliche habrá aparecido Dante junto a Sam.

ES LA PAREJA DE MI AMIGO. Le aclaró serio Dante.

-ESO ME TIENE SIN CUIDADO. Le dijo Daniel.

Dante se paró de su silla, sentí que el ambiente se puso tenso.

-DEBES MEDIR LO QUE DICES. Le dijo Dante.

-¿DÓNDE ESTA TU AMIGO QUE NO CUIDA LO SUYO? Le pregunto con los dientes apretados Daniel.

-ESE NO ES TU ASUNTO. Le respondió Dante con un tono pesado.

-DANTE, NO TE PREOCUPES, SOLO VOY A HABLAR UN MOMENTO CON ÉL. Le dije para que se tranquilice, se ve que Héctor le dijo que me cuide.

-SI QUIERE PASARSE DE LISTO LO DARE VUELTA COMO MEDIA. Dijo serio Dante.

-ESTARE EN ESA MESA. Le señale, no entendía porque se puso tan molesto.

-Son muy sobreprotectores tus amigos. Me dijo Daniel.

-No debías provocarlos así, no había razón. Le aclare.

-Él fue quien inició todo con su tono pesado y ese aire de luchador. Me dice Daniel.

-Ya dime de qué querías hablar. Le pido.

-Solo quería tu ayuda con unos puntos de mi tesis, tal vez con tus conocimientos, logré dar el impacto que quiero. Me pide.

-Entiendo. Te ayudaré. Le dije.

-Genial, podemos reunirnos...

-No tengo tiempo para reunirnos, trabajo, lo haremos por videollamada, me leerás que tema quieres apuntar. Le dije.

Note que suspiro pesado.

-No va a funcionar. Expresa pensativo.

-Entonces, debes tener algo en tus documentos, muéstramelo ahora. Le digo al señalar su celular.

-Aqui hay mucho ruido. Respondió.

-En la biblioteca. Le propuse.

-No soy de ir. Dijo.

-No te puedo ayudar. Le dije.

-Me concentro más en mi casa. Me dice.

-Estudia en tu casa, y si tienes dudas me llamas. Le dije concluyendo al ver que traían la comida en la mesa donde estaban mis amigas.

-Dame tu número. Me pidió al ver que no me convencería para que vaya a su casa.

Se lo anoté en su celular.

-Puedes llamarme de nueve a diez de la mañana o de 19 a 20 horas. Le indique.

-Solo en eso horarios. Me dijo.

-Solo puedo darte una hora de mi tiempo, también tengo mis ocupaciones y agradece que no te cobro. Le digo.

-Y si pago tu tiempo me darías más. Me dice.

Sonreí sorprendida negando.

-No. Le respondí y me fui a la mesa.

-¿QUÉ QUERIA? Indagó Jime.

-Que le ayude con su tesis. Le respondí.

-Como yo lo veo te quiere mojar el biscocho. Me dice Jime y le pegó en el brazo.

-Siempre piensas mal. Le susurro.

-Yo conozco bien a los hombres, si te dicen, vamos a estudiar y en mi casa, el solo quiere sacar el corcho de la botella. Me susurra, al insinuar que solo busca sex@.

-No iré a su casa, solo me llamara. Le respondí.

-Eres muy inocente, si te llega a decir que vaya por cualquier cosa pídeme que te acompañe o mejor a Héctor cuando esté, sola jamás lo hagas. Me aconseja.

-Lo tendré en cuenta. Le digo.

Comi ese tallarín con albóndigas, lo hice de manera mecánica, aún retumban en mi cabeza las palabras que dijo la madre de Héctor, miro mi plato pensativa, siento la mirada de Dante, lo miro y esquivo la mirada.

Al terminar de cargar mi celular ví un montón de mensajes que me envió mi madrastra y llamadas.

#NO HICISTE EL DEPOSITO.

#DEBES DEPOSITAR ANTES DEL LUNES PARA LA FIESTA DE TU HERMANA.

#CONTESTA LAS LLAMADAS.

Fueron algunos de los mensajes, sonreí a mis adentros, eran muy caraduras, mi madrastra esperaba que yo ponga para la graduación de Reina.

¿Quién se cree? Pienso molesta.

Termine de comer, quería ir a descansar por lo que me despido de todos.

-Gracias por la comida. Les dije.

Además deben querer estar solos, yo estaba de más en esa reunión, por lo que me di cuenta, mis amigas tenían una cita con Dante y Sam, solo me invitaron por compromiso.

-QUEDATE PARA EL POSTRE. Me dice Jime.

-Estoy muy cansada. Les dije dejándolos.

Al salir choco con mi madrastra y con Reina que estaban por ingresar a comer en ese lugar, cargaban muchos bolsos de compras de boutique,

"Derrochando de nuevo el dinero en frivolidades" pienso molesta.

-MIRA NADA MAS, LA SEÑORITA QUE NO CONTESTA LAS LLAMADAS. Expreso mi madrastra.

-NO HICISTE EL DEPOSITO. Me grito Reina.

-TUVIMOS QUE SACAR UN PRESTAMO POR TU CULPA. Agrega mi madrastra con severidad.

-Pudieron solucionar. Les respondí con una sonrisa sarcástica, esquivando las para irme y siento que me sujeta mi madrastra del brazo.

-DEBES PAGAR LO DEL PRESTAMO. Me ordenó, sonreí con ironía, no podía creerlo.

-IMPOSIBLE. Le dije.

-¡¿CÓMO QUE IMPOSIBLE?! Indagó histérica mi madrastra.

-TENGO GASTOS. Les dije.

Estaba cansada y estás me hacían doler la cabeza con su ataque hacia mi bolsillo.

-¿QUÉ TANTO PUEDES GASTAR? ERES SOLTERA, NI MASCOTAS TIENES. Comenta entre risas mi madrastra.

-SEGURO LE SALIO CARO EL QUE FINGIO SER SU NOVIO POR UNA HORA. Se burla Reina.

-DEJA DE SER TAN PATÉTICA Y ASUME LA REALIDAD, JAMÁS NADIE TE VA A ELEGIR, ERES COMO UN POLLO MOJADO. DEDÍCATE A SOLO SACAR PROVECHO A TU INTELIGENCIA Y BUSCA UN MEJOR EMPLEO DEL QUE TIENES. ASI NOS DAS LO QUE NOS CORRESPONDE. Me dice mi madrastra.

La quedé mirando con los ojos muy abiertos, al no poder creer lo que decía.

¿QUÉ DICE?

¿DEBO PAGAR SU BUENA VIDA?

Me preguntó incrédula.

-¿POR QUÉ HE DE DARLE ALGO? ¿CÓMO QUE, LO QUE LES CORRESPONDE? Le pregunto con indignación.

-NOS DEBES MUCHO POR LO QUE INVERTIMOS PARA TU EDUCACIÓN. Soltó mi madrastra.

-JA. Me rio sarcástica al no poder creer que diga eso, siempre trabajé y me pague todo yo.

-¿QUÉ TE CAUSA RISA? Pregunta Reina.

-ESTO ES EL COLMO. SIEMPRE TRABAJE Y ME PAGUE MIS ESTUDIOS. JAMÁS ME DIERON NADA. SOLO GASTAN EN SUS FRIVOLIDADES. Les digo señalando los bolsos que llevaban.

-QUE MAL AGRADECIDA, MIENTRAS ESTUDIABAS DANZA SE TE PAGO LAS CLASES PARTICULARES, LAS CLASES DE GIMNASIA, DE NATACION Y NO SE CUANTAS EXTRACURRICULARES MIENTRAS ESTABAS EN EL SECUNDARIO. NOS PROHIBIMOS DE IR DE VIAJE SOLO POR PAGAR TUS FRIVOLIDADES, SI SE LE PUEDE DECIR DE ALGUN MODO, PORQUE AL FINAL NO HICISTE NADA DE DANZA. Grito mi madrastra.

-NO SEGUI PORQUE LE PAGARON A REINA PARA EL INTERNADO DE DANZA. DONDE NO ESTUDIO, GASTO EN PASEOS, ROPA, Y JAMÁS SE INTERESÓ EN DANZA. Le solté molesta.

-TE SALE LA ENVIDIA POR LOS POROS, SIEMPRE TIRANDO AGRAVIOS CONTRA TU HERMANA MENOR. NO ES SU CULPA SER MÁS BELLA QUE TU. Me dijo con desprecio mi madrastra.

La bronca y la impotencia que siento de no tener las fuerzas de golpearlas me invade, me alejo de ellas corriendo. Deseo poder liberarme de ellas y jamás verlas.