Juan Pablo Torres y Charlotte del Rio se conocen en la empresa de Arsenio del Rio, magnate más poderoso del país y padre de Charlotte, ella caprichosa y altiva, Juan Pablo hombre humilde y constante en sus metas, quien comienza trabajando como vigilante en las empresas del Rio y poco a poco va escalando posición hasta convertirse en el Ceo de la empresa.
ambos tienen que superar muchas pruebas y trabajar el uno por el otro, después que el odio los une y los lleva a creer que el amor duele, les demuestra que las almas que nacen para estar juntas nunca serán separadas
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Día de compras cap 19
Este fue el viaje mas incómodo y largo en la vida de Juan Pablo , mientras Charlotte miraba las redes en su iPhone última gama y contestaba una que otra llamada de sus amigos, el tenía que escuchar cada palabra vacía de ella, le parecía que a pesar de ser tan hermosa no tenía nada en la cabeza, aquellos temas de los que hablaba con sus amigos le eran tan insignificante a el, "como era posible que existieran personas tan vacías en este mundo? Un perrito es más humano que está gente" se decía en sus adentros, "tantas cosas importantes que estaban pasando en la vida real y ellos solo vivían dentro de una burbuja de fantasía"- meneo su cabeza y continuo mirando por la ventana del auto.
Por fin el chófer les indicó que habían llegado, ambos se bajaron del auto, nuevamente Juan Pablo quedó preso de aquella belleza, era una muñeca en todos los sentidos, quizás la mas cara que hubiera imaginado en su vida, entonces reaccionó cuando ella le habló y lo miró con sus ojos de fuego
- escúchame, yo estoy tan indignada como tú, mi vida es mas interesante que esto de venir a comprarle ropa a un vigilante, estoy obligada a hacerlo, así que tú necesitas tu empleo y yo mis tarjetas, así que colaboremos el uno con el otro y resuelto el problema
-Usted cree que estoy a gusto con esto? Además usted no pagará mi ropa, yo le pagaré a la empresa esto- ella soltó una risa burlona
-Acaso crees que la pagarás? Tendrías que trabajar por el resto de tu vida!- Juan Pablo se enfureció tanto que perdió la paciencia y la agarró con fuerza de la mano, acercó su cara a la de ella y le dijo con fuerza mirándola a los ojos
-te estoy diciendo niñita caprichosa que lo voy a pagar! No soy como los niñitos esos con los que andas, que están acostumbrados a que los padres les paguen todo, yo soy un hombre de verdad, verdad- ella quedó muda, esa mirada de hombre agresivo, aquella fuerza con que le tomó la mano y la seguridad de aquella voz la dejaron temblando, era ese dominio que el tenía sobre ella lo que le excitaba, lo acababa de entender, este al contrario de los demás no la adulaba ni le demostraba interés, cuando la soltó ella pudo recapacitar más tranquila, aunque esto tampoco fue que la sencibilizo, por el contrario la hizo reaccionar con agresividad
- que te pasa?
- si quiere vaya y póngale las quejas a su padre, si me botan consigo otro empleo- ella sabía que no podía hacerlo, necesitaba que su padre desbloqueara sus tarjetas así que eso sí le hizo bajar la guardia, calmada le dijo
- por favor, calmemonos, vamos a lo que vinimos- Juan Pablo le habló con firmeza
-esta bien, entonces comportese! - Charlotte tomó la delantera, después de un rato entraron a un almacén de ropa para caballeros Charlotte iba eligiendo cada pieza, las observaba detenidamente y luego las seleccionaba, Juan Pablo la seguía con la mirada, por momentos se perdía en aquella belleza, cada gesto delicado de la mujer lo hacían sentir una sensación que antes no había sentido, ella se le acercaba comprometiendo mas sus sentimientos , sentimientos que ni el mismo conocia.
Ella notó que el estaba actuando diferente, y supo de inmediato que el también había caído rendido ante su belleza, entonces comenzó a coquetear con disimulo, sin que el apenas lo notase, en sus adentros se burlaba de el " no hay nada que una mujer bella no logre con un hombre, es que son tan básicos"- pensó en sus adentros
El solo esquivaba la mirada cuando ella lo miraba fijamente, todo para disimular lo que le estaba pasando.
