Melisa es una agente secreta muy poderosa, desafortunadamente, muere a manos de su amado por órdenes del jefe de la agencia.
Sin embargo, se le da una segunda oportunidad de vivir en el cuerpo de una mujer débil que murió después de caerse de las escaleras.
Es en esta segunda oportunidad donde ella busca vengarse de su amante y del jefe de la agencia secreta, así como de aquellos que torturaron a la dueña del cuerpo en el que ahora reside.
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Capítulo 19
"No solo eso, soy más de lo que crees," respondió el hombre.
"Oh, ¿y por qué me llamaste aquí?" preguntó Grameisya.
"Quiero darte una muestra de agradecimiento por haber atrapado al ladrón," respondió el hombre.
"¿Para qué me das algo si ya lo liberaste? No sé qué estás pensando," dijo Grameisya cruzando los brazos con cara de puchero.
"Lo liberé para que busque a sus compañeros, después de que se reúnan los atraparemos de nuevo. Si atrapamos a uno, los demás huirán lejos, si se juntan los atraparemos a todos de una vez para no tener que andar atrapando a los demás, después de eso les daremos un ultimátum," respondió el hombre sonriendo.
"Oohh, pensé que realmente ibas a dejarlos ir," dijo Grameisya entendiendo el significado del hombre.
"Bien, como fuiste muy amable al atraparlos, te daré esto," dijo el hombre sonriendo.
Le entregó una caja de joyería roja.
"Tómalo," dijo el hombre al ver que Grameisya lo miraba atónita.
Grameisya tomó la caja roja y la abrió.
"¿Un collar?" Grameisya arqueó las cejas.
"Sí."
"Esto es incluso más caro de lo que robaron, no puedo aceptarlo," dijo Grameisya volviendo a colocar el collar en la caja.
Luego le devolvió la caja al hombre y salió de la habitación.
El hombre sonrió levantando las comisuras de sus labios.
"¿Lo rechazó? ¿Es que este collar no es lo suficientemente caro?" preguntó el hombre mirando la caja que tenía en la mano.
Grameisya, que antes no había tenido tiempo de elegir ropa, volvió a comprar ropa.
"Tengo que comprar ropa rápido y volver pronto," dijo Grameisya.
Después de comprar ropa, Grameisya se subió al coche y se lanzó a la calle.
En un viaje no tan largo, llegó a casa. Llevó muchas bolsas de papel y entró en la casa.
"Vaya, vaya, vaya, no me imaginaba que nuestra Grameisya ya sabía comprar sola, normalmente pide que la acompañen," dijo Mia, su prima número 4.
Esta mañana llegó tarde al desayuno, por eso no conocía a la Grameisya de ahora.
"¿Quién es esta que me bloquea el camino? ¿No tienes trabajo?" preguntó Grameisya, que no conocía a Mia.
"¡Qué dijiste! ¡Oye, te das cuenta de que he sido yo quien te ha acompañado de compras durante todo este tiempo, he sido amable contigo todo este tiempo! ¡Pero no te das cuenta!" dijo Mina con brusquedad.
"¡Heh! ¿Acompañarme de compras? Mira tu ropa, es muy buena, pero me acompañas de compras y compras ropa barata que ni siquiera una sirvienta merecería usar. Compras en el mercado de pulgas. ¿Qué clase de amabilidad es esa? A partir de ahora no acepto tu amabilidad, tu amabilidad no sirve para nada," dijo Grameisya dejando a Mia sola.
"¿Qué le pasa a esta? ¡Es tan molesta!" refunfuñó Mia molesta.
"¿No sabes que ella tiene amnesia?" dijo Gladis que llegó de repente.
"¿Qué? ¿Amnesia? ¿De quién lo sabes?" preguntó Mia sorprendida.
"Lo sé por Yessy, incluso ella no está segura. Al principio quería llevar a Grameisya al hospital para asegurarse de si realmente tiene amnesia o no, todavía no se sabe el resultado," dijo Gladis.
" ¡Qué desagradable eres!" gritó Yessy que acababa de bajar de un taxi.