Me Converti En El Hijo Omega Del Emperador Tirano

El emperador tirano me miró y con la voz temblorosa dijo:

-no puede ser, se supone que quien me salvó cuando era joven fue Adonis, no puso ser tu madre, no, él era un Omega de la alta sociedad, jamás se hubiese apiadado de un limosnero como yo, no, no.

Mientras estaba en negación me acerque a él y le dije:

-aun viendo la verdad sigue negando la, que idiota, sabe, creo que mi madre fue un idiota al querer a un bastardo que lo humilló y lo mato, usted es una mierda, usted debió morir en lugar de mi madre.

-MENTIRA, ESTO ES UNA MENTIRA, ESE MALDITO OMEGA ERA MALVADO, EL MATO A MIS HERMANOS CON LOS QUE VIVÍA EN LA CALLE.

-creo que él verdadero asesino fue su amado Adonis, ese hombre que usted protegió fue su verdugo, el lo traicionó y le mintió, usted tomó bajo su protección a una serpiente venenosa, mientras que maltrataba y dejaba morir a quien lo salvó y lo amo genuinamente.

-MIENTES, CARAJO, ESO ES MENTIRA.

-no tiene sentido hablar con usted, así que si tanto se niega a creerlo, venga en una hora a la celda de su amado, escóndase, no deje que se vea su rostro, podrá escuchar la verdad de la boca de su amado.

En cuanto termine de hablar me marché del lugar, fui a mi habitación, saque mis cuchillos, investigue el paradero de Adonis y me dirigí a su celda, en cuanto llegue me enoje al ver lo como que estaba ese desgraciado, en su celda había una cama y hasta una mesa, el lugar estaba limpio y era muy luminoso como para parecer una mazmorra, mi ira creció al ver que uno de los soldados que lo resguardaba se dirigía a él como su majestad y lo trataba con decoro.

Me enfurecí ya que yo vi como trataron el cuerpo de la legítima emperatriz (mi madre) luego de morir, los sirvientes jamás trataron su cuerpo con respecto, cuando se lo llevaron lo pusieron en una sábana sucia y lo arrastraron por el suelo a no sé dónde mientras que a ese imbécil que había hecho tanto mal lo trataban bien, luego de unos minutos dejé de esperar más y entre a la celda, el guardia se enojó y trato de sacarme, él pensó que al tratarse de un niño sería fácil, pero yo lo noquee en segundos, el tal Adonis se asustó y empezó a gritar, mientras yo sacaba al guardia, Adonis intento escapar, pero lo amenace con uno de mis cuchillos, luego lo amarre de pies y manos y al asegurarme de que no escaparía, me lleve al guardia, lo ate y lo encerré en una celda junto a los demás, luego regrese a la celda de Adonis y cerré la puerta poniendo el candado adentro, tomando las llaves y poniéndolas en mi pantalón, luego me quite la capa que llevaba puesta, dejando ver mi rostro, en cuanto Adonis me vio grito aún más fuerte:

-auxilio, auxilio, hay un asesino.

Al escucharlo comencé a reírme y luego le dije:

-nadie te ayudará, los que te resguardaban han sido noqueados y atados de pies y manos, además les he puesto una mordaza, así que estamos solos.

Adonis comenzó a temblar lo cual me hizo feliz, ya que de solo imaginar a mi madre asustado por ese tirano temblando de miedo por culpa de este imbécil era horrible, ahora este al fin sentiría lo mismo que mi madre.

Adonis al ver que me acercaba a él me dijo:

-te daré lo que quieras, solo no me mates, te lo pido.

-tranquilo, no te voy a matar.

-en serio?

-si, pero haré que quieras morir.

Me acerqué más a él y asustado dijo:

-no te acerques monstruo.

-entre monstruos nos entendemos, ¿no crees?

-maldito, largo, largo.

Luego de que dijo escuché pasos fuera de la celda, así que dije en voz alta:

-sabes, hoy pagarás por todo lo que le hiciste a mi madre.

-estoy embarazado.

-y eso a mí que me importa, a ti no te importo envenenar a mi madre mientras me tenía en su vientre, así que por que tengo que apiadarme de ti.

-yo no sabía que estaba embarazado cuando puse veneno en su comida.

¿-es imposible que no lo supieras, a caso no escuchaste lo que los sirvientes decian sobre él?

-pensé que era mentira.

-ja, ja, ja, quiere que crea eso, usted siempre supo que él estaba embarazado y aun así lo en veneno, ¿NO ES ASÍ MALDITO ASESINO?

-no lo sabía, estoy diciendo la verdad.

-vamos a ver si es verdad.

Saque un hacha de la bolsa que llevaba y sin previo aviso le corté uno de sus dedos de la mano derecha, el grito de dolor, yo amarre su dedo para evitar la hemorragia y luego con una sonrisa le dije:

-cada vez que mientas cortaré un dedo o tal vez dos

Adonis, aquel tipo temblaba de rabia mientras decía:

-sí, es cierto, lo sabía, por eso lo envenené, pero el maldito no murió hasta después de darte a luz, yo deseaba que los dos murieran pero aun así, tu maldito monstruo sobreviviente.

-casi muero, pero desgraciadamente para ti no lo hice.

-maldito, por que no te mueres de una vez.

-moriré cuando tenga que morir, pero antes de hacerlo te haré pagar.

Adonis sonrió y luego dijo:

-puede que mueras más pronto de lo que piensas bastardo.

¿-ja, tal vez lo digas por el veneno en mi comida?

-co..como lo sabes.

-de verdad creer que comería todo lo que me dan este lugar sin desconfiar?, ja, que idiota eres para ser un asesino.

-MALDITA CUCARACHA.

-tengo otra pregunta, porque te hiciste pasar por el salvador de ese imbécil del emperador?

-yo vi cuando el estúpido de tu madre ayudó a un pordiosero, ese mismo día le robe todo a ese idiota, gracias a lo que le robe pude comprar ropa decente y me hice de un nombre en la ciudad, unos años después vi al emperador en la ciudad, lo reconocí de inmediato, ya que uno de mis amigos me había llevado a un baile donde él estaba, aquel día lo presentaron como el tercer príncipe, luego de cerciorarme de que era él yo lo seguí y me di cuenta de que estaba buscando a ese niño que supuestamente lo había mudado, en ese momento le dije que había sido yo.

-como lo convenciste de que su salvador eras tú?

-fue fácil, ya que yo había visto lo que pasó aquel día, fue fácil engañarlo, gracias a eso pude convertirme en su amante, pero luego de la nada llegó ese estúpido y ayudó al príncipe a convertirse en emperador, mientras él hacía el trabajo difícil yo tomé el crédito y cuando el emperador se vio obligado a casarse con él aproveche para aumentar el rencor del emperador hacia ese imbécil, así que le hice creer al emperador que ese idiota había hecho un trato con los funcionarios para ser la emperatriz así quien se casara con él sería el emperador.

-así que ese tirano estúpido se vio obligado a casarse con él para ser el emperador.

-exacto, además le dije que tu madre estaba enamorado de él y por eso había hecho aquel trato para obligarlo a casarse y así lo odiaría aún más.

-además de eso que más has hecho?

-nada más.

-MIENTES, dime la verdad o perderás otro dedo.

-digo la verdad.

-Bien.

Le corté otro dedo y en ese momento hablo:

-yo envenene la comida que envió tu madre a los pordioseros de la ciudad, gracias a mi esa inmundicia desapareció de las calles e inculpe a ese idiota crédulo.

-sabía que esas personas eran amigos del emperador?

-no lo sabía y tampoco me importaba, esa era mi venganza, ya que uno de ellos ensució mi traje con sus asquerosas manos.

-solo los mato por eso?

-si, como se atreven a tocarme.

-usted también fue un limosnero y pordiosero.

-yo jamás fui un pordiosero, yo tenía una habitación y una cama para dormir a diferencia de esas cosas.

-algo más?

-mate a tu amado niñero, lo enterré cerca a la cabaña donde vivían, el muy imbécil intento defenderse, pero no pudo, mientras agonizaba mencionaba tu nombre y el de ese idiota que tenías por madre y pedía perdón, ja, que perro más desleal.

-tu maldito bastardo.

Saque uno de mis cuchillos y apuñalale su brazo cortando los músculos y tendones dejándolo inmovilizado y lo mismo hice con sus piernas, le quite pedazos de músculo para que no se regenera y quedará lisiado de por vida, luego grite:

-YA HE TERMINADO, AHORA ES SU TURNO, ESPERO HAYA ESCUCHADO BIEN LO QUE DIJO E HIZO SU TAN AMADO CONSORTE.

Después de decir eso solté a Adonis, tome mis cuchillos y mi hacha, abrí el candado y salí, luego entro un hombre con capa a la celda y luego mientras caminaba hacia la salida escuché un grito ahogado que decía:

-su majestad, tenga piedad, no es cierto, nada de eso es cierto, solo mentí para que ese monstruo no me hiciera daño.

Luego de escuchar aquello salí de aquel apestoso y oscuro lugar.