Samira, una joven y apasionada estudiante de literatura, nunca imaginó que su vida cambiaría drásticamente en un instante. Un viaje a las Vegas y una traición amorosa, la lleva a casarse con Frederick, un poderoso abogado y jefe de la mafia, conocido por su frialdad y determinación.
Al principio, Samira se resiste a aceptar su nueva realidad, pero a medida que conoce a Frederick, descubre un lado oculto de él que la hace cuestionar todo. A pesar de los peligros que conlleva estar cerca de él, Samira comienza a sentir una atracción irresistible hacia Frederick.
Sin embargo, su amor no será fácil. Terceros en discordia, incluyendo rivales de la mafia y personas del pasado de Frederick, intentarán separarlos por todos los medios. ¿Podrá Samira superar sus miedos y confiar en Frederick lo suficiente como para estar juntos? ¿O la oscuridad que rodea su mundo los separará para siempre?
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Cap 15 - Debo estar a su altura
Samira …
Después de despedir a mí padre en el aeropuerto, me sentía triste, sabía que no lo volvería a ver por un tiempo, al igual que a mí familia
Sabía que no les había agradado la noticia de que me quedaría con Frederick y pude ver en sus caras que no estuvieron muy convencidos cuando les dije que estaba bien y que estaba acá por mí propia voluntad, solo viéndome en persona estarían más tranquilos, pero por el momento tendrían que quedarse con esa incertidumbre, ya que no podíamos volver por un tiempo .
De camino al centro comercial, iba sumida en mis pensamientos, cuando de repente se comenzaron a oír disparos contra el auto
Mí corazón comenzó a acelerarse por el miedo y me costaba respirar, íbamos a morir, nos iban a matar ahí mismo y no pude evitar llorar, era tanto el miedo que tenía, que sentía que mí corazón se detendría en cualquier momento
Frederick me hizo agachar para que no me hirieran, pero aún así no me sentía tranquila, el auto zigzagueaba de un lado a otro esquivando los disparos y afuera se escuchaba una batalla campal
¿Qué íbamos a hacer? ¿Y si no salíamos con vida? ¿Y si mí vida se acabara hoy acá? Eran tantas las preguntas que me hacía a mí misma que no sabía que pasaría
Después de unos minutos los disparos dejaron de oírse y el auto seguía en marcha, pero era tanto el miedo que sentía que no me animaba a levantarme, hasta que el auto se detuvo y Frederick me habló
Yo no podía dejar de llorar, era tanto el miedo que sentía, que aún me temblaba el cuerpo
Cuando Frederick me dijo que ya estábamos a salvo y en la mansión, rápidamente me levanté y me subí a horcajadas sobre él y lo abracé con fuerza
No entendía por que me sentía así, yo era una persona fuerte, me gustaba la acción y la adrenalina, pero hoy me había tomado por sorpresa esto
Sabía que ésto pasaría en algún momento cuando decidí darle una oportunidad a Frederick, pero no creí que sería tan pronto.
Después de entrar a la casa, la señora Paola que había sabido por las noticias lo que había pasado, se nos acercó de inmediato para ver cómo estábamos y al ver qué estábamos bien, se tranquilizó
— Ven mí niña, te contaré una historia — me dice haciendome sentar a su lado en el sofá, Frederick se había ido dejándonos solas — Se que ahora tienes miedo. Yo cuando era joven, más joven que tu de hecho, por qué cuando conocí al papá de Freddy, yo tenía 17 años y a mis 18 nos casamos. Al igual que tu tuve mucho miedo la primera vez que intentaron matarnos, fue un ultimátum para mí, era tanto el miedo que sentí que a escondidas de él me fui y lo abandoné. Sabía qué eso lo destrozaria, al igual que a mí, ya que ambos nos amábamos, pero en ese momento me ganó el miedo.
Un mes estuve escondida para que él no me encontrara y lo extrañaba demasiado, quería volver con él, estar a su lado. Así que tomé la decisión de dejar el miedo de lado y estar a su altura, hablé con un amigo que era mercenario y le pedí que me entrenara. Quería aprender a defenderme y a defenderlo a él también si así fuese necesario, así que comencé a entrenar todos los días, mañana, tarde y noche, mí amigo no me daba respiro, decía que mientras más tiempo entrenara, menos tiempo me iba a tomar volver con él.
Y así fue, seis meses después volví junto al padre de Freddy como una mujer diferente a la que se fue, ya no le temía a nada y estaba dispuesta a luchar y defender lo que tanto amaba. — me cuenta Paola y yo me quedé en silencio, ella tenía razón, si quería permanecer al lado de Frederick debía estar a su altura. Por lo que tomé la decisión de también entrenar
— Yo quiero aprender a defenderme Pao, pero no quiero que Fred se entere o no me lo permitirá — le digo yo
— Tu déjamelo a mí, yo conozco a la persona indicada que te entrenara, y lo haremos cuando Freddy esté en el trabajo — me dice Paola tomando mis manos
— Muchas gracias, sinceramente hasta yo me sorprendo de mí, hace solo una semana que lo conocí a Fred y ya estoy dispuesta a hacer mucho por él, pero es que siempre me gustaron los chicos malos, como dicen mis amigas y la adrenalina me fascina, aunque hoy el miedo me tomó por sorpresa — le cuento yo riendo
— Mí niña, ustedes dos hacen la pareja perfecta, fuiste la mejor decisión de mí hijo — me dice y yo le sonrío
Después de estar un poco más con Paola en la sala, decidí ir al despacho de Fred, para ver cómo estaba después de lo que había pasado, pero terminar teniendo sexo ahí dentro me encantó
Fred tenía algo especial, algo que me atraía demasiado desde el primer día que lo vi, no sabía que era, pero esas ganas de estar a su lado me hacían perderme
— Ten — me dice caminando hasta su escritorio y abriendo un cajón, lo veo sacar algo y volver hasta mí — Tu celular, pensé que me ibas a dar más pelea cuando supiste que te había traído a la fuerza por eso lo escondí, te iba a mantener secuestrada hasta que cedieras — me dice riendo
— Si te iba a dar pelea, pero hay algo en ti que me atrae demasiado y además soy una chica rebelde, me gusta la adrenalina y los desafíos — le digo abrazándolo por el cuello
— Oh mí amor, no sabes cómo me encantas que digas eso. Me enciendes aún más — me dice acariciando nuevamente mí cuerpo y volvió a besarme
El beso era demandante, era pasional, otra vez se estaba saliendo de control, pero en ese momento comienza a sonar el celular de él
Al principio no le dio importancia y continuamos besándonos, pero nuevamente el teléfono comenzó a sonar y a Fred no le quedó más que atender
— Lo siento mí amor, dame unos segundos — me dice tomando su teléfono del escritorio y atendiendo
Lo vi muy serio y solo respondió con un “ok”, “esta bien” y “voy para allá”
Después de colgar la llamada, se vuelve a acercar a mí y me vuelve a tomar de la cintura
— ¿Te tienes que ir? — le pregunto abrazándolo
— Si, debo solucionar un problema, pero volveré en un rato ¿de acuerdo? — me dice dándome un suave beso en los labios
— Está bien, cuídate — le digo yo y dándome un último beso, sale del despacho dejándome sola
Yo miré mí teléfono, se encontraba apagado, así que lo encendí y comenzaron a llegarme notificaciones de muchos mensajes y llamadas perdidas
Salgo del despacho y subo a la habitación para poder ver todos esos mensajes
Tenía mensajes de mis padres, de mis hermanos y de mis amigas, pero hubo un chat que me llamó la atención, ese era de Ian, había más de 100 mensajes en el chat
Comencé a leer uno por uno de sus mensajes, en ellos me decía que me amaba, que lo perdonara y que volviera. Que me extrañaba y que no podía vivir sin mí
Yo comencé a reírme, ahora se arrepentía, si tan solo no me hubiese ignorado desde que salimos de las Vegas, tal vez las cosas habrían sido diferentes
De repente comencé a recordar parte de la noche en el casino, estábamos festejando y riendo descontroladamente, hasta que lo vi a Ian besándose con una mujer, eso me rompió el corazón y amargó mí noche, me levanté de donde estaba sentada y comencé a caminar hasta que me choque con Frederick, y fui yo misma quien le suplicó que se casara conmigo
Quería vengarme de Ian por estar apretando con otra mujer frente a mí, pero en mí estado de ebriedad, terminé cometiendo una locura
Aunque ahora no me arrepiento, ahora tomé la decisión de estar con Frederick, yo lo había metido en mí vida sin darme cuenta y ahora solo quería estar con él.
Decidí eliminar todos los mensajes de Ian, y bloquear su número, ya no tenía interés de saber sobre él
Continúe viendo los otros mensajes, todos los de mí familia eran de preocupación, y los de mis amigas también, así que decidí llamarlas
Acá eran las 4 pm, con Argentina nos llevábamos 4 horas de diferencia, por lo que allá serían las 8 pm. Aún no dormian, así que les hice una video llamada
📱 — Sami al fin te comunicas con nosotras, ¿estás bien? ¿Qué te pasó? ¿Estás en peligro? ¿Necesitas ayuda? — me dice Camil preocupada
📱 — Hola chicas, estoy bien, y no, no estoy en peligro, ni necesito ayuda. Estoy bien, estoy con Fred — les respondo yo
📱 — ¿Qué? ¿Al final decidiste darle una oportunidad al bomboncito ese? — me pregunta Julieta
📱 — Si, me gusta y mucho, por eso decidí quedarme con él — les digo yo
📱 — Amiga, ¿Por qué no nos dijiste que te ibas con él? Nos tenías con el jesús en la boca — me dice Camil reprendiendome
📱 — No estaba en mis planes venirme para las Vegas, Frederick me secuestró y me trajo de prepo, aunque al principio no estaba de acuerdo, luego decidí darle una oportunidad, me gusta y quiero estar con él — les cuento yo
📱 — Hay que felicidad amiga, pero te extrañamos mucho, ¿ahora que estás allá, ya no nos volveremos a ver? — me dice Julieta con tristeza
📱 — Si nos veremos chicas, yo iré de visita y ustedes pueden venir cuando quieran para acá — les digo para que no se pongan tristes
📱 — Hay que felicidad, dime, ¿cómo es su casa? ¿Es grande? ¿O vive en un departamento? ¿Te trata bien? — me pregunta Camil
📱 — Es grande, y si me trata muy bien chicas, no se preocupen por eso — le digo yo para que no se preocupen demás
📱 — Está bien, pero sabes que puedes contar con nosotras para lo que sea ¿ok? — vuelve a decir Camil
📱 — Lo sé, gracias por preocuparse por mí chicas — le digo sonriendo y es que estaba tan agradecida de tener tan buenas amigas
Continuamos hablando con las chicas por mucho tiempo más, hasta que decidimos terminar la llamada, ya que ellas al día siguiente tenían colegio y debían descansar temprano.