Entre Sombras Y Traiciones.

—Buenas noches, señores, Valeria Ferrara, mi prometida —anuncia con una sonrisa en sus labios Alphonso.

La cara de los hombres y mujeres que están en la mesa es de asombro y la de Navila es de rabia.

—Es muy hermosa su prometida, Sotto capo —dice uno de los hombres y ella sonríe. La sala está llena de una mezcla de asombro y tensión.

Valeria, con su porte elegante y su vestido que resalta su figura, se convierte en el centro de atención. Las miradas de los presentes oscilan entre la admiración y la sorpresa, mientras que Navila no puede ocultar su rabia, sus ojos lanzando dagas hacia Valeria.

El padre de Alphonso, el capo di tutti capi, observa la escena con una expresión inescrutable. Su mirada se fija en su hijo, Alphonso, quien mantiene una sonrisa tranquila pero firme. El capo, un hombre de presencia imponente y autoridad indiscutible, se inclina ligeramente hacia adelante, sus dedos tamborileando suavemente sobre la mesa de caoba.

—Alphonso, ¿por qué no sabía nada de esta relación?— pregunta con una voz grave y controlada, aunque una chispa de curiosidad y descontento brilla en sus ojos.

Alphonso se endereza en su asiento, su mano buscando la de Valeria en un gesto de apoyo y posesión.

—Padre, Valeria y yo hemos mantenido nuestra relación en privado por razones de seguridad y estrategia. —Sabíamos que este momento llegaría, pero queríamos asegurarnos de que todo estuviera en su lugar antes de hacerlo público— explica Alphonso con calma, su voz firme y demandante.

Valeria, sintiendo el peso de las miradas y la importancia del momento, asiente ligeramente, mostrando su apoyo a las palabras de Alphonso. La tensión en la sala es palpable, y todos los presentes esperan la reacción del capo.

El capo observa a su hijo por un largo momento, evaluando sus palabras y la situación. Finalmente, asiente lentamente, aunque su expresión sigue siendo seria.

—Espero que sepas lo que estás haciendo, Alphonso. —Esta relación tiene implicaciones que van más allá de lo personal— dice el capo, su voz cargada de advertencia y expectativa.

—Lo sé perfectamente, padre, Valeria es fuerte, inteligente y muy importante para la organización, aparte de que se robó mi corazón — sonríe mirando hacia ella.

Valeria le devuelve la sonrisa y eso la hace ver hermosa.

ganándose miradas de muchos.

La atmósfera en la sala sigue cargada de tensión. Navila, la ahijada del capo di tutti capi, se levanta de su asiento y se acerca a su padrino con disimulo. Su rostro refleja una mezcla de preocupación y descontento. El capo la mira con una sonrisa tranquilizadora, asintiendo ligeramente para calmarla. Navila respira hondo y regresa a su lugar, aunque su mirada sigue fija en Valeria.

Momentos después todos vuelven a reunirse entre tragos y sonrisas falsas; el padre de Alphonso se pone de pie, llamando la atención de todos los presentes. Su voz resuena con autoridad mientras anuncia:

—Señores, mi ahora futura hija, Valeria.— Sonríe la piovra mirando a Valeria.

—Se irá en una misión especial. Su tarea será infiltrarse en la OMSG y descubrir la ubicación de su sede, así como obtener información sobre sus misiones.

Un murmullo de sorpresa recorre la sala. Valeria mantiene su compostura, aunque internamente siente la magnitud de la misión que le han asignado. Alphonso aprieta su mano con fuerza, mostrando su apoyo incondicional.

El padre de Navila observa a su compadre y sonríe.

Navila, aún inquieta, lanza una mirada desafiante hacia Valeria, pero el capo la detiene con un gesto de su mano y sigue hablando.

—Confío en que Valeria cumplirá con esta misión con éxito— añade el capo, su voz firme y segura.

—Me parece muy bien; si alguien es capaz de envolverlos y asesinarlos, es la señorita Ferrara —dice uno de los hombres.

—Amor, necesitas...— intenta decir Alphonso, pero su padre lo observa; sabe muy bien que él no puede ir.

—Tranquilo,amor, yo soy la indicada para traer la cabeza de los líderes de la OMSG aquí. Te dije que te protegería y a esta, mi familia. Alphonso le sonríe y besa su mano; aunque no está nada contento con esta decisión, el pecho se le oprime de saberla con esa gente.

—Felicitaciones por su prometida, sotto capo, usted tomó la mejor decisión.— Alphonso asiente y la ve delante de todos; Navila trata de irse, pero la piovra la detiene.

—Paciencia... —Le susurra solo para ellos.

La reunión continúa, pero la declaración del capo ha dejado a todos con una sensación de incertidumbre y expectativa. Valeria sabe que esta misión será crucial no solo para su futuro, sino también para la relación con Alphonso y su posición dentro de la organización.

Valeria solo sonríe con educación y, al final de la noche, se dirige a su habitación, cosa que no logra hacer.

—¡Amor! —grita cuando la levanta y la lleva a su habitación.

—Usted viene a su nueva habitación,mía, Regina — se besan y así entran a la habitación de Alphonso, ahora de ambos, y allí se desata una batalla con besos y caricias; los gemidos de ella lo enloquecen y sus gritos.

Alphonso la toma toda la noche, queriendo que todos se enteren de que la reina tiene rey y no está disponible para nada.

Una vez están agotados, ella observa las sábanas de su cuarto manchadas con su sangre; ahora están en un marco como un lienzo.

—Eso... Eso es lo que yo creo. —Él sonríe.

—Te gusta, lo mandé a enmarcar, no tardaron nada y tranquila fue una mujer, nadie verá tus fluidos más que yo. Ella lo besa y otra batalla de pasión se desata.