El Amor De Sofía Y Pedro

Después de que Catalina se fue de la habitación de Sofía. La chica se levantó de la cama, deslizó la gabardina que llevaba en su cuerpo, hasta dejarla caer al suelo.

Sofía fue quitándose la ropa de cuero, hasta quedar solo en ropa interior, tomó una bata de seda, y se la colocó en su cuerpo. También agarró un sujetador de cabello, para atar su cabello y no le estorbe.

La chica se acercó a closet, para escoger un traje adecuado para ir a la empresa. Miró cuidadosamente cada prenda al interior.

No solo tenía que verse muy hermosa, sino que también lo más profesional posible. Miró varios diseños diferentes de trajes, de los cuales, había usado solo diez.

Luego de examinarlos con cuidado, Sofía escogió un traje con pantalón, de color azul marino. Una blusa de tirantes delgados de color blanca.

El traje no solo era hermoso, sino que tan bien muy sexy. Sin duda, la chica se iba a mirar muy hermosa.

Lo tomó y lo llevó a su cama, se dio la vuelta, para ir a darse una ducha rápida. A causa de haber perdido tanto tiempo al lado de Samuel, Sofía tenía muy poco tiempo; para disfrutar de un baño de tina, relajante.

Luego de una hora, Sofía ya estaba lista para salir a su empresa. Se miró por última vez al espejo, mirando cuidadosamente su apariencia...

Al verificar que todo estuviera en su lugar, y que ni un solo pequeño mechón de cabello estuviera fuera de su lugar, Sofía se apresuró a salir de su habitación.

____ Buenos días, señorita Montenegro.____ Una de las empleadas saludo a Sofía al verla salir de su habitación.

_____ Buenos días, mi padre, ¿Se encuentra en el jardín?... ____ Respondió Sofía.

____ No, señorita. Su padre fue a la empresa muy temprano. ____ Mencionó la empleada.

Sofía se quedó callada, no esperaba que su padre saliera de la mansión tan temprano. Debe haber algo muy importante, por el cual, su padre fue a la empresa a esa hora.

Por lo regular, Ernesto salió a la empresa luego de haber desayunado con Catalina, y de haber hablado por teléfono con Natalia y sus hijos.

Sin embargo, lo más extraño era que sabiendo que Natalia y sus hijos, iban a ir a visitarlo y no los espero.

_____ Más tarde, tendré que ir a la empresa y saber que es lo que está pasando. ____ Pensó Sofía.

_____ ¿El desayuno está listo?... ____ Le preguntó Sofía a la empleada.

_____ Sí, señorita. ¿Desea que se lo lleve al comedor?...

_____ No, es necesario, comeré en la cocina. ___ Respondió Sofía.

La chica se apresuró a bajar las escaleras y dirigirse a la cocina. Se detuvo en la puerta, había solamente dos empleadas ahí, y eran las que se encargaban de cocinar, al ver a Sofía parada, una de ella se acercó a la chica.

____ Señorita, el desayuno ya está. ____ Mencionó la mujer.

Sofía continuó caminando al interior, hasta sentarse en la mesa, cerca de la ventana. No sabía por qué continuaba teniendo esa misma costumbre desde que era una niña.

Cada vez, que su madre la enviaba a la cocina para quedar a solas con Marcelo, ella se iba a sentar a ese lugar, para quedar sola con sus pensamientos, y no desobedecer a su madre.

Sofía llevó sus manos a su rostro. No podía comprender, el porqué, aún no se podía despegar por completo de varias cosas que marcaron su vida.

La empleada llevó un plato de comida a la mesa, lo dejó a un lado de Sofía. También llevó jugo de Naranja, y dos rebanadas de pan suave con mermelada.

_____ Se mira delicioso, gracias. ____ Mencionó Sofía, llevando el plato de comida a hacia delante, tomó los cubiertos para comenzar a comer.

Al terminar de desayunar, Sofía se levantó de la mesa, al ver la hora en su reloj. Eran casi las doce del medio día, y, la junta sería a las doce y media.

Tenía muy poco tiempo, para llegar, revisar todo. Si no lo hacía algo podía salir mal, y todos sus esfuerzos, se irían a la basura.

La chica salió casi corriendo de la mansión Montenegro, cuando iba saliendo se percató del auto de su hermana, y sus sobrinos. Sofía lamentó mucho no poder quedarse más tiempo, y saludar a su hermana.

La chica agitó su mano; para saludar a sus sobrinos y a su hermana. Después, solo desapareció de la mansión Montenegro...

Usando todas sus agilidades de manejo, Sofía llegó a la empresa, en poco tiempo, bajo del auto, y subió a su oficina.

Al ver a Sofía llegar, la chica que trabajaba para ella, se limpió el sudor que caía por su frente.

_____ Creí que no iba a llegar.

____ Tan solo hace unos minutos, la secretaria del nuevo socio, llamó para informar que el señor Méndez, venía para acá... _____ La chica habló agitada, a causa de los nervios.

_____ No, debes preocuparte. Lleva ahora mismo, todos los papeles, los revisaré antes de que la junta comience.

____ También, reúne a todos los diseñadores. Ellos son los más importantes de esta empresa, sin ellos nada de esto sería posible. ____ Después de decir eso, Sofía entró a su oficina, dejando su bolso encima del escritorio.

La chica no tardó mucho tiempo en cumplir al pie de la letra, cada orden de Sofía, al entrar a la oficina, llevó los papeles en sus manos.

_____ Señorita Montenegro, aquí tiene los diseños, para esta nueva colección de otoño e invierno. _____ Dijo la chica, dejando todo encima del escritorio.

_____ Muy bien, ahora déjame a solas. Y cuando llegue el señor Méndez, me lo haces saber de inmediato. ____ Ordenó Sofía.

El tiempo comenzó a transcurrir muy rápida. La chica volvió a entrar, llamando toda la atención de Sofía, cuando iba a informarle que el señor Méndez, estaba ahí, una figura masculina entró a la oficina.

Era un hombre, alto, de piel clara, color de ojos azul, sus labios delgados, un físico increíble, que se podía ver por encima de la ropa...

La mirada del hombre se clavó en Sofía. Algo que molestó mucho a la chica.