Nadie nunca ha visto el verdadero rostro de la emperatriz. Nadie sabe la razon por la que la emperatriz no se ha dejado ver por su pueblo. Algunos dicen que tiene un rostro poco agraciado. Otros dicen que desconfía de todos a su alrededor. Las malas lenguas hablan sobre la guerra. Una mujer de tan solo 18 años que lidero la guerra mas larga de la historia de los 5 reinos. Solo 20 minutos le tomo acabar una guerra que habia durado mas de 40 años. La salvadora de la nacion. La emperatriz Suprema. Ishtar D'Labot.
Nadie conoce su verdadero rostro. Nadie recuerda su verdadero ser.
Excepto el. El recien nombrado Duque de Geronia ha vuelto al imperio. Con el unico deseo de recuperar el amor que ha perdido.
Pero se llevara una grande sorpresa. Porque la mujer de sus recuerdos ya no existe. Y en su lugar una mujer con multiples rostros lo recibe.
Dentro de ella residen muchas personalidades. ¿Podra el enamorar a todas ellas?
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Capitulo 14: Odió
La musica se detuvo y los dos se quedaron estaticos. Mirándose uno al otro con el corazon latiendo en su interior. Sus respiraciones aceleradas. Como si hubieran estado en una pelea reñida y no solo bailando musica de salón.
Pero asi se sentia. Como si estuvieran librando una batalla contra aquellos sentimientos que necesitaban dejar salir desesperadamente.
El duque se alejo de su cuerpo por obligacion. Le dedico una reverencia a la emperatriz y estiro su mano hacia a ella.
—Es un honor haber bailado con su Majestad. Permítame llevarla de vuelta a su trono.
Ishtar poso su mano temblorosa en la del Duque y lo siguió hasta llegar a su trono. Se sentó en silencio sintiendo su corazón latir con fuerza en su pecho.
¿Como era posible que un simple baile la habia hecho sentir de esa manera? ¿Que su cercania la hiciera fantasear como una jovencita ilusionada? Sus ojos se clavaron en el hombre a unos pasos de ella y su ceño se frunció.
El no podia tener aquel poder... No sobre ella.
—Me despido su majestad. Es hora de retirarme. Tengo algunos asuntos importantes para mañana. Pero sin falta vendre—el duque se inclino en una reverencia—Que siga disfrutando la velada. Larga Vida a su majestad la emperatriz Ishtar D'labot.
El duque Yoon-Ha salió por las puertas del palacio aun sintiendo su corazon palpitar descontrolado. Su mirada lo siguió hasta que desapareció de su vista. Quemando cada parte de el. Se estaba quemando por dentro. Y habia salido del palacio con miedo a cometer una locura. Porque nunca se habia sentido tan ansioso por algo como en ese momento. En el pasado eran solo jóvenes enamorados. Pero en este presente. Los dos eran adultos.
Adultos completamente consientes de lo que el otro provocaba en ellos. De la manera en que sus cuerpos se exigían. Eran consientes del deseo que bullía en su interior. Imposible de frenar.
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El duque llego en la tarde siguiente al palacio. Camino por los pasillos del Ala este hasta que el estruendo de algo caer llamo su atención. Entonces miro a una de esas tantas puertas del largo pasillo. Una puerta maltratada. Pintada en un marron caoba. Se acerco a ella escuchando los gritos dentro de la habitación. Corrió abriendo la puerta con fuerza. Con la preocupación vibrando dentro de el.
Y ahi dentro el lugar era un completo desastre. Fue incapaz de decir ninguna palabra porque de repente fue derribado. La mano que apretaba su cuello lo dejo sin respiracion por un segundo.
—Pero... Que crees que haces?!—
Lord Raktar grito corriendo hacia ellos.
La pequeña y escurridiza mujer que por un momento lo miro a los ojos lo dejo paralizado. El aire no le faltaba. Pero no era solo por el agarre en su cuello. Si no por lo que sus ojos veían. La mujer que lo estaba ahorcando sin piedad. Era ella. Se veia igual que Ishtar. Su cabello dorado caia sobre su rostro. Su sonrisa sadica. Sus ojos enrojecidos.
—A ti te queria ver bastardo!!—el tono de voz asesino que salio de sus labios lo desperto.
La tomo de las manos que lo apretaban intentando alejarla de el. Pero no cedia. La mujer seguia aferrada a el apretándolo con fuerza.
—Mierda!! ¿Que crees que haces Ishtar? Alejate de el!!— Raktar la tomo de la cintura jalándola lejos del duque.
Yoon-Ha se sento en su lugar. Intentado recuperar el aire. Se tomaba del cuello nervioso.
La mujer delante de el se movia desesperada siendo contenida por Raktar. Aquellos ojos verdes que tanto amaba. Ya no estaban ahi. Ahora era dos posos oscuros inyectados en sangre. Completamente enloquecidos.
—To voy a matar maldito!! Acabare con tu insignificante vida!!...
—Ishtar...—el duque susurro confundido.
—No menciones mi nombre desgraciado!! Quien te crees?!! Voy a asesinarte con mis propias manos. Voy a triturar tus malditos huesos hasta que ya no quede nada de ti.
El duque la miraba confundido. ¿Que carajos estaba sucediendo?
—Pero... Que...—el duque se puso de pie como pudo. La miro sin saber que hacer—Por que?
—Por que?—Ishtar estallo en una carcajada incredula—Me abandonaste!! Tu dijiste que me amabas y nunca volviste por mi!!! Mentiroso!!! Voy a asesinarte desgraciado.
De repente el suelo debajo de sus pies temblo. Las paredes se estremecieron y todo a su alrededor comenzo a caerse. Lord Raktar lo miro preocupado.
—Salga de aqui ahora!!
Yoon-Ha miro hacia los lados. La habitacion se sacudía con fuerza. Sus ojos miraron a Ishtar con dolor. Confusión. Abandono la habitacion sin saber que hacer.
Y cuando la puerta se cerro detras de el. Todo parecia normal. Todo estaba en su lugar. Como si nada hubiera sucedido adentro de aquellas cuatro paredes. Yoon-Ha camino en circulos preocupado. Su mente estaba vuelta un lio. ¿Que carajos habia sucedido alla adentro?
Minutos despues la puerta se abrio y Lord Raktar salio suspirando. Yoon-Ha se le acerco rápidamente.
—Como esta ella?... ¿Que sucedio alla adentro?
Lord Raktar suspiro cansado.
—Su majestad se desperto hoy bastante encendida. Supongo que el baile de ayer desperto algo en ella.
Yoon-Ha despeino su cabello ofuscado.
—Ella... Ella me...
Lord Raktar lo miro con los ojos caidos.
—Duque Yoon-Ha... Asi como existe la Ishtar que lo adora como al centro de su universo. Una parte de ella lo resiente. Existe una parte de ella que lo odia con todo su ser... Y para serle sincero... No estoy seguro si algun dia deje de hacerlo.