Cautiva

Eileen.

Han pasado casi tres días desde que estoy encerrada en este sito, No tengo noción de que hora será, pero aún es temprano... Me aterra pensar que ese hombre pueda entrar en cualquier momento y matarme o abusar de mí...no sé si podre salir con vida de esto o si saldré de este lugar algún día... Tal vez si salga, pero no con vida, talvez después de abusar de mí, me mate, coloque mi cadáver en una mortaja y lo tire en el mar... Supongo que nadie lloraría por mí... Aunque supongo que morir no sería tan malo después de todo, ya que así podre estar junto a mi madre, al fin podría reunirme con ella ... Ya no sé que es lo que va a pasar conmigo... ¡Pero qué carajos estás suponiendo Eileen Greco!!! ¡Tú saldrás con vida de este sitio cueste lo que cueste y así podrás cumplir tu sueño de ser Cirujana!! ¡¡¡Deja de ser tan pesimista mujer!!! Mi parte valiente me dice que no me dé por vencida todavía, que no es el fin para mí... Pero, mi parte cobarde suele pensar en las peores de las posibilidades

Luego de mi regaño mental y estar martirizando mi cabeza, escucho a alguien tocar la puerta, quien... no sé... pero no soy una invitada en esta casa como para que toquen la puerta al entrar, estoy aquí contra mi voluntad, no por gusto. Luego veo ingresar a Rosa con una bandeja de comida.

Rosa- Buenos días, querida.(Dice acercándose y dejando la bandeja en la mesita que está junto a la cama)

Eileen- ¿Buenos Días? ¿Acaso es una broma señora? Serán buenos para usted que no está encerrada en una mansión contra su voluntad!!. ¡Y no está encerrada en estas 4 paredes suponiendo las peores cosas!!... No pude dormir ni siquiera un poco al creer que en cualquier momento puedo morir!! ¡O ese hombre pueda entrar en esta habitación y abusar de mí!!

Tal vez exageré al gritarle a la señora... Supongo que ella lo único que ha hecho es ser buena conmigo... Pero de tanto pánico que algo pueda sucederme y coraje por lo que hizo mi padre... ya no doy más...

Eileen- Yo... lo lamento mucho... No debí desahogarme con usted que no tiene la culpa de lo que hizo mi padre Ni de que yo esté encerrada en estas 4 paredes.

Rosa- Tranquila querida (sonríe con amabilidad) acá nadie te hará daño, sé que tienes miedo por pensar que en cualquier momento puede ser tu fin, pero Lorenzo no es capaz de matar a una mujer ... No abusa de ellas ni nada por el estilo. Él puede parecer aterrador, pero solo ha sufrido mucho en esta vida... Él en el fondo, es una buena persona. No tienes por qué temer, sé que puede sonar tonto, pero no debes tener miedo. Bueno toma tu desayuno y luego de ello podremos salir de estas 4 paredes, te llevaré al patio a respirar aire libre.

Escuchar esas palabras fueron una alegría enorme para mí, al menos podré conocer la casa y buscar una manera de huir de este infierno.

Eileen- ¿En verdad?

Rosa- Así es, mi niño Lorenzo me dio permiso de sacarte de esta habitación y así puedas salir al patio, pero no puedes irte de la casa.

Escuchar que aquel hombre llamado Lorenzo, el mismo que me secuestró me dejo salir de la habitación fue una sorpresa, tal vez Rosa tenga razón y él no sea tan cruel después de todo.

PERO QUE CARAJOS ESTAS PENSANDO EILEEN!!! ESTAS EN ESTE LUGAR POR SU CULPA!!! YA REACCIONA MUJER!!

Luego de darme cachetadas mentales vuelvo en mí. Y luego recuerdo lo que dijo Rosa, de que no podría salir del patio de la mansión, aunque era obvio, seguramente tendrá muchos custodios, por lo que pude notar a través de la ventana este lugar es como una fortaleza, pero al menos podré salir de este lugar a respirar aire fresco.

Eileen - Se lo agradezco mucho señora, al fin podré salir de estas 4 paredes.

Rosa- No hay de qué. Bien, toma tu desayuno que yo iré a pedir que vayan a comprar algo de ropa para que puedas tomar un baño y así poder salir al patio.

Eileen- Está bien.

Luego de que ella salga, comienzo a tomar el café y cornetto relleno de crema pastelera y otro de Nutella que me trajo para desayunar, son como unos croissants, pero no son croissants, son bastantes dulces y muy ricos, son mis favoritas.Las cosas dulces son algo que me encanta.

Luego de terminar mi desayuno, me acerco a la ventana y afuera está hermoso. Media hora después regresa Rosa con unas cuantas bolsas de compras.

Rosa- Mira, te traje algunas prendas y algunos zapatos para que puedas vestir y así salir al patio.

Eileen- se lo agradezco señora.

Rosa- No te preocupes, yo encantada. Y ya no me digas señora, Dime Rosa. Bien ve a darte un baño.

Sin perder más tiempo, me dirijo hacia el baño y tomó una larga ducha, Salgo media hora después ya vestida.

Me pongo un vestido blanco con corte corazón en el pecho y otra tela del mismo color más transparente un poco más bajo de los hombros, con Mangas largas con unos voladitos que me pareció hermoso y unas zapatillas del mismo color

Rosa- Estás hermosa.

Eileen - Muchas gracias señ... Rosa.

Rosa- Bien, pues sin seguir perdiendo el tiempo salgamos de aquí.

Eileen- Si, por favor.

Estoy tan emocionada por salir a respirar Aire fresco y puro, que parezco una niña a la cual le han dado una nueva muñeca de Barbie, aunque las niñas de ahora ya casi no las utilizan. Rosa abre la puerta y sale hacia el pasillo y yo detrás de ella. Miro para todos lados dándome cuenta de que casi todo el lugar es de un color obscuro, esta casa no tiene vida, es igual de aterradora que el dueño.

Nos dirigimos hacia la salida de la puerta trasera y quedo maravillada por lo bonito del lugar, todo es tan hermoso y tan verde.

Rosa- ¿Y qué te parece?

Eileen- Es... hermoso.

Rosa- si, lo es. Puedes salir cuando gustes, y para que no te pierdas en esta enorme casa le pediré a Esmeralda que te haga compañía, ella es una joven de 20 años, es muy cariñosa, estoy segura de que ambas se llevarán muy bien.

Eileen- Está bien.

Saber que hay una muchacha de mi misma edad es un alivio, tal vez pueda hacer una amiga en ella. Comienzo a recorrer el sitio y cada vez me asombra más por su belleza. Luego tal vez una hora llega una muchacha de ojos verdes, de tez blanca y cabellos Castaño.

Esmeralda - Hola, tú debes ser Eileen.

Eileen- Así es, soy yo.

Esmeralda- Bien, Rosa me pidió que te acompañe, ya que la casa es bastante grande.

Eileen- Te lo agradezco.

Esmeralda- No hay de que , es un placer para mí. Ven, te mostré el patio.

Luego de unos minutos me muestra un caminito de rosas que por cierto me dejó maravillada.

Las rosas son una de mis Favoritas al igual que la de mi madre. Un suspiro nostálgico sale desde lo más profundo de mi corazón al recordarla.

Luego Rosa nos trae el almuerzo acá, ya que no quería volver a esa habitación donde estuve encerrada por caso 3 días. No si quiera me había dado cuenta de que tan rápido paso la hora.

Seguimos caminando un rato más después del almuerzo hasta que escucho unos pasos, me detengo y miro hacia el lugar que lo escuché con una sonrisa en mi rostro pensando que era Rosa.

Pero en lugar de ella me encuentro a un hombre alto, tal vez de 1.80 mirándome fijamente con esos ojos que me daban miedo, pero por alguna extraña razón ya no sentía nada al mirarlo. El mismo hombre que me mantiene cautiva en este lugar