CAPITULO 4

Apenas el doctor salió de la habitación de Melissa, Enzo se le atravesó llenándolo de preguntas.

Quería asegurarse que ella realmente no recordara nada y que no estuviera fingiendo para huir de él, sabía que no era lo suficientemente valiente como para denunciarlo, pero nunca estaba demás prevenir.

_Dígame por favor mi querida Melissa realmente no me recuerda?_cuestionó con fingido pesar al doctor.

_Le voy a pedir una consulta con un neurólogo y un psiquiatra para ver si es por el gran trauma que tuvo durante el ataque o si es alguna secuela de los golpes que recibió._

El doctor lo miraba intentando descifrar si el hombre que tenía en frente era sincero en su pesar, ya que solo se mostró preocupado el día que ingresaron a la paciente, pero hacía tiempo que no lo veía en el hospital y no preguntaba por ella.

_Está bien, será que puedo pasar tiempo con ella para ver si logro que me recuerde?_ cuestiono impaciente sabiendo que con solo una mirada sabría si mentía .

_Prefiero que hasta que no vea a los especialistas y se haga los estudios que le mande no reciba visitas que la alteren._ El doctor estaba preocupado por el ataque de pánico que había tenido solo con ver a su pareja por unos minutos.

_ Además me podría dar información de su familia o alguna amistad con quien ella se sintiera cómoda al hablar?_ lo que la policía le había dicho era que solo tenía a su pareja, pero él dudaba que alguien tan joven y bonita como lo era su paciente no tuviera a alguien más en su vida.

_No doctor ella no tiene familia, y desde que nos conocimos solo tiene ojos para mí._ intento disfrazar de broma la respuesta que dio al doctor con una mueca de sonrisa.

Al médico no le causo ninguna gracia su comentario, y algo le decía que no bromeaba realmente, por eso intentaría mantenerlo alejado de Melissa lo más que le fuera posible.

_Como ya le dije hasta que no le hagan las evaluaciones pertinentes preferiría que no la vea._ pudo ver la cara de disgusto mal disimulada de Enzo por no recibir la respuesta que esperaba, pero no le importo, después de tantos años su intuición no le fallaba y el presentía que algo escondía ese hombre.

_Esta bien doctor como usted ordene_ dijo con clara ironia_ despues de todo solo quiero lo mejor para mi mujer.

Estaré en la sala de espera por cualquier novedad.

Enzo no espero respuesta del médico se dio la vuelta y se fue furioso por no poder conseguir un momento a solas con Melissa.

El médico se dirigió al puesto de enfermeras para pedirles que llevaran a su paciente a realizarse el estudio que pidió, además que contactaran al detective que llevaba el caso de Melissa de manera urgente.

_y por nada del mundo dejen a ese hombre que dice ser su pareja entrar a la habitación de mi paciente, su estado mental no está para recibir visitas._ finalizo el doctor con una gran preocupación reflejada en el rostro.

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