cap 2

Ryan

●mi vida es fácil en todo el sentido de la palabra, ninguno de mis hermanos, mi padre y yo hacemos nada en casa, todo lo hace mi madre sola, lidiando con nosotros, las palizas que le da mi padre sin razón aparente y haciendo los que aceres de una tremenda casa, y encima cuando él llega de noche de a donde vaya a saber dios tener la comida lista. Me gustaría ayudarle, pero ni mi padre y mis hermanos me deja, según ellos, nosotros los hombres no tenemos por qué tocar un plato, para eso está la mujer, siendo sincero no estoy de acuerdo con ese pensamiento, así que cuando ninguno de ellos esta, pongo mi granito de arena para ayudarla. Después me dedico a estudiar y los fines de semana juego fútbol, para llegar a tener un buen futuro y ser alguien en la vida y para eso se necesita mucho esfuerzo, tiempo y sacrificio, eso siempre nos dice mi padre a cada rato, ya que él con mucho esfuerzo y sacrificio logro inaugurar su propio club de fútbol en donde yo empecé desde muy chico a veces soy entrenado por él o mis hermanos mayores que también están dentro del club.

*Años después*

● ahora tengo 18 años y mi vida sigue relativamente igual, solamente con algunos cambios, deje la escuela de arte en donde hacia la secundaria y la carrera juntas, apenas se salía de la escuela ya enseñabas en las escuelas de la zona, no era lo que a mí me gustaba y tampoco le entendía, no era lo mío, en cambio, me gustaba la música tanto como me gustaba el fútbol, así que mucho antes de dejar la escuela en 4.º año, después de las clases me iba con el señor Roque a que me enseñe sobre la música, más en concreto el bajo, empezamos la notas, las cuales me costaron el 8, así sucesivamente, era re duro para aprender, pero le ponía esfuerzo y ganas, a la hora de empezar a tocar las cuerdas dos por tres me lastimaba los dedos con ellas, dolían como el demonio, aunque luego de un tiempo me entere de la existencia de la púa, por lo cual en mi mente lo quería matar al señor por no decirme eso desde antes, por lo tanto, al día siguiente que fui con él le reclame al respecto, a lo que él me dijo o más bien se excusó en mi opinión, que era para que tenga la piel más dura en los dedos y sobre todo soltura. Cuando ya me aprendí todo lo que necesitaba saber deje de ir con el señor Roque, desde luego le agradecí lo que me enseño sin cobrarme un centavo, no te digo que soy cra, pero por lo menos tengo oído para la música, en cambio, mi hermano Mateo ya nació con talento para este rubro. Cuando tenía 16 arme mi banda junto a mis amigos y todos con nuestra correspondiente mesada pudimos comprar nuestros instrumentos, sonido, potencia, consola y cables todo en un gran combo, luego practicamos ese año y otro más entero para estar totalmente listos para salir a tocar a eventos, Hoy por fin es nuestro debut en un baile bastante concurrido por mucha gente de todas las zonas, de los alrededores y de lejos.

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