"Encuentros en la penumbra"

(Parque Estrella, 9:20 p.m.)

Losert dejó de lamentarse después de unos minutos. Con un suspiro pesado, se sentó en el quiosco mientras sus pensamientos divagaban en el vacío que sentía.

Losert: (Mirándose las manos) —¿Pero qué demonios hago...?— dijo en voz baja. Tras un minuto de reflexión, sacudió la cabeza. —Supongo que dejaré de lado el misterio de mi amnesia...

Aunque trataba de convencerse de olvidar, su corazón se resistía. Había un eco persistente en su mente, una voz que lo atormentaba con recuerdos fragmentados.

(Recuerdo)

¿?: —Solo contigo puedo ser yo misma. No tengo que fingir ser la chica perfecta.

Losert: —En ese caso, puedes venir cuando quieras...

El recuerdo golpeó su pecho con la fuerza de una ola. Losert apretó los puños, sintiendo cómo el llanto regresaba a sus ojos.

Desde las sombras del parque, una figura observaba con atención cada uno de sus movimientos.

¿?: (Con una voz suave) —Disculpa... ¿te encuentras bien?

Losert se sobresaltó. Rápidamente se limpió las lágrimas antes de girar hacia la voz.

Losert: (Confundido) —¿Eh? Sí, estoy bien... —dijo, aunque su voz temblaba ligeramente. —¿Quién eres?

¿?: (Apenada) —Perdón si te molesto... Me llamo Lisha.

Losert: (Levantándose para presentarse) —Soy Losert, no te preocupes. Solo me sorprendiste un poco.

Lisha: (Sentándose frente a él) —No era mi intención... Solo me pareció curioso ver a alguien aquí a estas horas.

Losert: (Sonriendo ligeramente) —Jejeje, normalmente una chica suele hacer ejercicio por aquí a esta hora.

Lisha: (Sorprendida) —¿En serio?

Losert: —Podría jurarlo.

El silencio se instaló entre ellos, incómodo y denso. Finalmente, Losert reunió el valor para romperlo.

Losert: (Algo apenado) —Tú eres nueva por aquí, ¿verdad?

Lisha: (Avergonzada) —Sí, me acabo de mudar hoy.

Losert: (Sonriendo mientras le extiende la mano) —Bienvenida al vecindario.

Lisha: (Correspondiendo al gesto) —Muchas gracias.

Losert: (Levantándose) —Debo irme. Mañana tengo clases. ¿Quieres que te acompañe a tu casa?

Lisha: (Sonrojada) —No es necesario. Vivo cerca, pero gracias.

Losert: —Bueno, espero verte pronto. —Se marchó, dejando atrás el quiosco.

Lisha lo siguió con la mirada, una sonrisa misteriosa curvándose en sus labios.

Lisha: (Susurrando) —Sí... nos veremos pronto, Losert Vladis.

El peligro acechaba cada vez más cerca, aunque Losert, ignorante de ello, solo podía esperar a que lo peor sucediera.

A la mañana siguiente

El sol brillaba con intensidad mientras el viento jugueteaba entre las copas de los árboles. Desde su pupitre junto a la ventana, Losert observaba el paisaje con la mente completamente perdida.

Losert: (Pensando) —Qué hermosa vista... El sol, el viento... todo parece tan tranquilo.

Divagaba como siempre, sin prestar atención a la clase de Sociales, hasta que una mano le tocó el hombro, sacándolo bruscamente de su ensoñación.

Lisha: (Sacudiéndolo ligeramente) —Disculpa...

Losert: (Despertando de golpe) —¿Eh...? —La observó con más detenimiento. —Tú eres... ¿Lisha?

Lisha: (Sonriendo) —Sip. Hola, Losert. Qué coincidencia.

Losert: (Riendo suavemente) —Y que lo digas. ¿Qué pasa?

Lisha: (Sentándose frente a él) —Nada, solo quería saludarte.

Desde su asiento cercano, Ryujin observaba la interacción con ojos calculadores.

Ryujin: (Con tono neutral) —La compañera ya se presentó a la clase... pero, como siempre, tú no estabas prestando atención.

Losert: (Avergonzado) —Jejeje... lo siento. No puedo evitarlo.

Lisha: (Riendo mientras mira a Ryujin) —No pasa nada. Hola.

Ryujin: (Disimulando su análisis) —Lamento entrometerme. Soy Ryujin, amigo de Losert.