Mientras andaba por el camino la oscuridad de la noche era lo único que sus ojos podían contemplar en el vasto cielo, su curiosidad fue interrumpida por un galopar provenientes de los trotes de un caballo que paseaba cerca de ahí, pero el caballo no estaba solo, pues inmediatamente noto que el caballo solo era alguien que estaba tirando una especie de carreta, la cual tenía en su interior varios tipos de alimentos entre ellos tenían vegetales, legumbres, entre otras cosas su mente deseo saber más por lo que decidió preguntar.
Aldrin:
"Disculpe Señor... ¿Cree usted que me pueda ayudar a llegar al reino?"
El semblante de una persona adulta con una cicatriz en el rostro, orejas puntiagudas y un cabello azul marino complementaban el semblante de una figura que sembraba el miedo y respeto, aun así él decidió ayudar al Joven viajero a llegar a su destino, pues él en su mente reconocía la energía y las vibras que emanaban de este joven, girando la cabeza a su derecha con un gesto para indicar que podía subirse al vehículo, Aldrin aunque con incertidumbre decidió subirse, pues su cuerpo se sentía como si cada parte de él se fuera a deshacer como si fuera de porcelana, el chofer de la carreta noto esto, pero antes de realizar cualquier pregunta tiro de la carretilla jalando de forma suave los cordones que estaban amarrados al cuello del corcel, el cual relinchando continuo por el camino que su amo le dicto. El jinete mirando, que el cuerpo de su acompañante venía empapado en sudor decidió abrir una bolsa que tenía en su lado izquierdo para proporcionarle a aquel Joven una jarra de agua fría, Aldrin la tomo de la parte superior con su mano izquierda llevándose la jarra hacia la boca logrando así saciar su sed esparciendo un poco de agua por su boca usando su lengua, colocando la jarra en un estuche que estaba cerca de ahí, decidió seguir observando el viaje posando su codo en la ventana de la carreta y apoyando su mano en su cabeza después de eso, el viento acariciaba el rostro de Aldrin como si fuera la mano de un bebe tocando con dulzura la mano de su madre, después de un largo rato escuchando nada más que el galopar y como la madera que tiraba del vehículo es decir de la carretilla se sacudía por las piedras, el chofer se bajó del vehículo pidiendo a Aldrin que se bajara, con el rostro lleno de confusión Aldrin accede a la petición del señor defiende de su asiento rodeando al corcel que tiraba de la carreta este relincha antes de que Aldrin siquiera pueda continuar con su camino, recordando a su corcel Aldrin regresa el relinchar mostrándole la lengua al caballo y sacando el dedo de en medio.
Aldrin:
"La tuya por si acaso." El chofer observó toda la escena gozando con desprecio como Aldrin lucia como un animal discutiendo con otro, Aldrin notando el desprecio solo pudo apretar los puños crujiendo los dientes con rabia contenida, cada paso que daba se sentía pesado, Aldrin miro fijamente al sujeto su mente se sacudió, pues su cerebro noto como si otra presencia estuviera en él acompañando a su memoria, viendo como en su mente planeaba hacer algo terrible decidió desconectarse literal y metafóricamente, el hombre con armadura color rojo oscuro y cicatriz en el ojo abrió la mano a Aldrin invitando a su invitado a cruzar el umbral de la puerta dando pasos para entrar aunque consternado Aldrin cedió ante la orden de su acompañante, viendo como el se sentaba en una silla de madera y colocaba un espejo frente a el miro confundido como un espejo sala de debajo de su posible captor colocando el objeto sobre la mesa rompiendo el espejo con un golpe en seco en el centro esparciendo los cristales rotos por toda la mesa, Aldrin respira agitado sintiendo una premonición de lo que va a venir arrastra hacia atrás la silla con cuidado, mirando fijamente a su huésped Kaelen por fin pronuncia palabras.
Kaelen:
"Se quien eres Aldrin Veylenor todo el mundo lo sabe, después de todo eres prácticamente una celebridad como los que salen en la casa de los famosos."
Aldrin:
"¿Fuera de Adrián Marcelo y Yeri Mua conoces a alguien?"
Kaelen:
"¡Oh! Ehh..." Tose para aclarar su garganta.
"Debemos de seguir con lo que nos dictan hacer, seguir nuestro papel asi que dime Aldrin, ¿Quieres jugar un juego conmigo?."
Aldrin quedo perplejo ante la propuesta de su huésped, pues sintió en su corazón como una catástrofe que sacudiría su interior y su pureza se avecina.
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