Maldita fiesta, estupido amigo

Luego de que entramos al bar, Matias se encontró alguno de sus conocidos en la fiesta me dejó completamente sola yo estuve un rato allí me tomé dos tragos y luego me dirigí a la puerta de salida, pero antes de que pudiese irme de lugar Matías me truncó el paso y me dijo:

- no te vayas aún, mi amigo dice que puede presentarnos a los amigos de la persona que está cumpliendo años hoy.

- estoy un poco cansado y ya estoy un buen rato en el bar además tú me trajiste para ser tu compañía pero me dejaste solo en cuanto entramos así que no veo la necesidad de quedarme.

- Ay no seas agua fiestas si ya quédate un rato más te prometo que no te dejaré solo de nuevo.

- de verdad quiero irme a casa ya disfruta de la fiesta.

No estamos por el brazo y me llevo casi arrastras mientras me decía:

- Ay no seas tonto vas a conocer a una persona muy adinerada Y seguramente si le pides trabajo él te ayudará y podrás ganar hasta el triple de lo que estás ganando ahora así que vamos.

- luego de unos cuantos minutos él dejó de jalarme y se quedó quieto yo me iría al frente y vi a tres hombres enormes yo no era muy bajo, ya que medía 1.79, sin embargo, estos hombres parecían medir al menos 2 metros, cuando los vi me intimidé y retrocedí un poco, pero Matías me jaló y luego dijo:

- Hola chicos nos gustaría hablar un rato con ustedes y saludar al cumpleañero.

Esos que ignoraron por completo y le dieron la espalda, yo ya lo voy a venir, ya que nosotros no éramos importantes ni reconocidos; sin embargo, Matías no se rindió y siguió intentando hablar con ellos, pero cada uno de estos intentos fue fallido, luego de un rato logré soltarme de su agarre y me fui, pero Matías me alcanzó y me llevó a lavar al parecer estaba muy deprimido por el hecho de haber sido ignorado comenzó a tomar y me ofreció varios tragos yo solo tomé uno pero luego de ese me sentí bastante mal así que tuve que ir al baño y vomitar luego mi vista se tornó borrosa y de un momento a otro todo a mi alrededor fue completa oscuridad.

Luego desperté mi cintura dolía como el demonio, ni siquiera podía moverme, sin embargo, hice mi mejor esfuerzo para en aquella cama en donde estaba, cuando finalmente pude sentarme mi mano derecha tocó algo suave así que volteé mi mirada hacia ese lugar y vi que había un bulto así que levanté la sábana y vi que había un hombre gigantesco en aquella cama, yo no podía creer como diablos había pasado eso así que luego de meditarle unos cuantos segundos decidí marcharme el lugar así que como pude me levanté de la cama puse mis pies en el suelo caminé un poco encontré mis pantalones y mi ropa interior y mientras me estaba vistiendo vi un papel sobre la mesa que estaba junto a la cama mi curiosidad hizo que me acercara a él y en cuanto lo leí quedé horrorizado, maldito papel decía que era un acta de matrimonio que al parecer era totalmente legal en la parte de abajo estaba mi firma y mi nombre y junto a él un hombre bastante extraño (lucifer), cuando vi eso me llene de ira y lo primero que pensé fue.

<< ¿qué diablos pasó anoche?, ¿por qué demonios estoy junto a un hombre desconocido?, ¿por qué me duele la cintura? y por qué rayos hay un acta de matrimonio con mi nombre?>>

luego de pensar y sobre pensar en ese asunto mi ira fue creciendo y el único objetivo que tenía esta era que el hombre echado en la cama Así que tomé una almohada y comencé a golpearlo pero ya que no se despertaba con mis manos comencé a palmearle la espalda con fuerza una y otra vez hasta que este finalmente se despertó, él estaba iracundo y sus ojos parecía que tenían fuego, luego de verme dijo:

- qué rayos estás haciendo?

- Quiero que me digas qué pasó anoche.

- Pues no recuerdo mucho pero al parecer me drogaron, luego de eso el fragmento de memoria y en uno de esos apareces tú rogándome por algo pero no recuerdo qué.