Episode 4

—Mierda— En su oficina, Derek maldice. ¿Por qué carajos su hermano se comportó así con Freiya? ¿Acaso ellos están en una relación? ¿Ya lo hicieron? Si es así, Derek no puede desear a la mujer de su hermano —Respira, quizás no es así— Intentó convencerse de que nada sucedía entre ellos —No sabes nada y ya te estás montando una película— Joder, ¿Qué le estaba pasando?

Encendió el intercomunicador —Señorita Harald, venga a mi oficina— Estas  dudas las iba a aclarar él personalmente. Tocan la puerta y después de permitirle el paso, Freiya entra

—Señor Wilson, ¿Necesita algo? — Con su melodiosa voz, Freiya le pregunta a Derek. Siempre que ella estaba presente, sus aires se calmaban, era muy pacífico, la habitación se llenaba con su aroma, olía a avellana

—Acérquese— Ordena de manera autoritaria. Freiya se acerca y queda de pie justo en frente del escritorio de su jefe. Derek se pierde e su mirada, lo hace siempre

—Dígame, señor Wilson

— ¿Conoce usted a mi hermano? — Aun celoso, pregunta Derek, ansioso por obtener una respuesta

—Sí, él es su hermano— Sin saber mucho a lo que se refería, Freiya se hace la tonta —O bueno, eso fue lo que escuché

Derek suelta un suspiro de alivio, parece ser que no hay nada entre Freiya y su hermano. Pero, ¿Qué pasa si se conocen y se terminan gustando? Tenía que asegurarse de que eso jamás pasara, Freiya debía ser suya, si él la quería, él la tenía —Y, ¿No hay… nada más?

—No sé a qué se refiere, al igual que usted, él es mi jefe— Derek se tensó al oír eso —Yo no podría estar con mi jefe— Casi se le salen los ojos al oírla decir eso —Estoy aquí para trabajar, no busco un novio o alguien con quién pasar el rato— Lo decía en un tono firme, pero a Derek le parecía que solo quería hacerse la inocente, sí, eso debía ser, tarde o temprano, Freiya caería a sus pies —Me gustaría más concentrarme en mi carrera— Bueno, quizás y solo quizás, ella querría concentrarse en su carrera profesional. Pero eso no significa que no quiera sexo o dinero. O al menos  eso piensa Derek — ¿Hay algo más?

—No, ya casi es la hora del almuerzo, retírate— Ordena sin mirarla, mostrando frialdad

—Sí señor Wilson— Hizo una reverencia, se dio la vuelta y caminó hasta la puerta. Derek la miraba, no lo podía negar, la chica realmente era hermosa. Diferente.

Katherine se reunió con Freiya y Lauren en la cafetería, al principio Lauren no entendía el porqué de la presencia de Katherine pero Freiya se lo explicó todo.

—Y, ¿Qué tal te va con el presidente Wilson? — Pregunta Katherine antes de meterse un bocado de comida a la boca

—Muy bien, me sorprende, apenas es mi primer día y estoy oficialmente contratada— Freiya tiene los codos apoyados sobre la mesa y las manos juntas, sonríe

—Sí, solo no te dejes manipular por el puesto— Le advierte Lauren, Katherine hace una mueca apoyando la idea de Lauren y asiente en silencio mientras saborea la comida

—No entiendo, ¿A qué te refieres? — Freiya jamás ha visto algún comportamiento inapropiado de parte de su jefe, aunque apenas es el primer día, no cree que el presidente sea una mala persona o capaz de chantajear a alguien, de seguro que no

Katherine traga la comida y toma un poco de jugo antes de hablar —El señor Wilson es un mujeriego, todos en la empresa lo saben, pero tiene su puesto de presidente bien ganado, es muy inteligente y tiene un gran ojo para los negocios igual que su padre. Pero se acuesta con todas. Es una pena— Su nueva amiga Lauren la respalda en su relato, Freiya tiene dudas pero no quiere crear conflictos así que solo se queda callada —Pero en cambio su hermano menor, el vicepresidente Markus es muy amable, y menos bailarín que su hermano. Él es un buen tipo

—Lo es, por eso Lauren se enamoró de él— Freiya señala a Lauren, quien enrojece de la vergüenza

—No te culpo, es un papi— Acerca su cabeza al centro de la mesa y se cubre la boca, es muy cómica

—No, no, cállense, cállense— Susurra para que nadie oiga sobre su amor secreto por su jefe —Me daría mucha vergüenza si alguien escuchara

Katherine se aleja y se limpia con una servilleta de papel —Eres muy linda, ya debería haber algo entre ustedes

—Lo mismo le dije— Freiya se queja de la cobardía de Lauren —Si sientes que no eres muy bonita es porque no estás explotando tu potencial

—No sé de qué hablas, yo no tengo ningún potencial, no soy pelirroja ni tengo ojos azules, mi piel no es morena y no soy naturalmente delgada, tengo que hacer ejercicio constantemente, no soy nada bonita como ustedes— La pobre de Lauren mira abajo con una carita triste

—Mira— Freiya se baja un poco la camiseta y deja ver una extraña marca en la parte de atrás de su hombro

— ¿Qué es eso? — Pregunta Lauren, Katherine también está intrigada

—No soy estadounidense, soy europea, después les cuento, la cosa es que en mi pueblo, a los 16, nos hacemos un tatuaje. Miren bien— Retira el cabello que cae sobre su hombro

—Es un animal— Dice Katherine viendo el tatuaje de su amiga

Lauren lo acaricia con la yema de los dedos — ¿Qué significa?

—Esta es la marca de mi pueblo, los que la llevan, se convierten en parte de la ‘Manada’ y los demás hermanos los protegerán a muerte. Somos familia, somos iguales, y jamás escogeremos a alguien sobre la familia. Para las mujeres, el tatuaje representa su pureza y están listas para casarse, para los hombres, significa que ya llegaron a su grado más alto de madurez y están listos para pedir la mano de una mujer

Lauren y Katherine regresan a ver a Freiya, antes de hablar, un sonido las interrumpe — ¿Qué es eso?

—Es mi alarma de las 2:20 para llegar a las 2:30 a mi escritorio— Lauren pone los ojos en blanco

—Estás siendo exagerada, además, no te toma 10 minutos llegar al piso de arriba— Su amiga la reprende

—Está emocionada por su nuevo trabajo— Katherine la excusa

—La entiendo, pero ni siquiera comió— Lauren señala la bandeja vacía de Freiya, no se sirvió nada

—Tranquilas, desayuné muy bien esta mañana y casi no tengo hambre, gracias de todos modos— Freiya se levanta a toda prisa y va directo al último piso, en donde se encuentra su puesto de trabajo. Al llegar, una rubia con un vestido muy provocativo se acerca al escritorio de Freiya, ignorando completamente a la recepcionista.

—Buenas tardes, ¿En qué le puedo ayudar? — De manera muy cordial y mostrando una amable sonrisa, Freiya atiende a la mujer que aparece frente a ella

La mujer planta sus manos sobre el escritorio de Freiya, incomodándola —Quiero ver a Derek— Dice finalmente, Freiya, alejándose un poco, pone distanci

—Por supuesto, su nombre por favor— Pide Freiya amablemente

La mira de arriba abajo indiscretamente, sus celos saltan a la vista al notar la belleza natural de Freiya —No necesito que me anuncies— Pasa de largo y se acerca a la puerta

—Señorita, no puede entrar ahí sin la autorización del presidente— Freiya le impide la entrada a la mujer

— ¡Quítate! ¿Crees que lo puedes seducir con esos atuendos tan horrendos? — Forcejea la mujer

—No sé de qué me está hablando, si va a seguir con ese comportamiento, tendré que pedirle que se retire— Freiya no se deja provocar por la rubia y se para firme frente a la puerta

—No puedes, ¿Sabes quién soy yo? — Amenaza la rubia

—No me dijo su nombre, ¿Cómo puedo yo saberlo? — Aun en un tono amigable, Freiya intenta alejar a la mujer de la puerta de la oficina del jefe

De repente, una fragancia espectacular, inunda el olfato de Freiya, la puerta a sus espaldas se abre, el señor Wilson está justo detrás de ella

— ¿Qué ocurre? — En un tono molesto y frío, Derek habla detrás de Freiya

—Señor, la señorita se negó a presentarse y me impidió que la anunciará, intenté detenerla, pero insistió en entrar— Con respeto y sinceridad, Freiya le cuenta su versión al magnate frente a ella

—No le hagas caso Derek, ella me tomó de la muñeca, me duele mucho, despídela— Actuando como una niña, la vulgar rubia inventa que Freiya le agredió, se para junto al magnate y pone sus manos sobre el pecho del magnate seductoramente

— ¡Señorita Harald! — Derek reprende a Freiya y la mira con frialdad, de manera intimidante se para justo en frente de ella, pero ella ni siquiera se tensa

—Con todo respeto señor Wilson, yo ya le he dicho la verdad, depende de usted creerme o no— En un tono seco, Freiya se dirige hacia el magnate sin ser intimidada por su imponente presencia

La rubia se altera y comienza a pegar gritos — ¡Mentiras! ¡Ella me agredió! ¡Tienes que despedirla!

—Señor Wilson, con el respeto que usted se merece, si va a despedirme que sea por incumplir mi deber y no por tratar de cumplirlo. Ya le he dicho la verdad, si no me cree, la recepcionista es testigo, además de las cámaras de seguridad— Freiya se defiende, al oírla hablar sobre las cámaras de seguridad, la rubia se altera. Derek lo nota

Muy molesto, Derek llama a la recepcionista — ¡Catalina! — Ella acude a toda prisa, llega y tartamudeando pregunta la recepcionista a que se debe su molestia —Dime la verdad, ¿Qué fue lo que pasó? — Espeta furioso

—S-Señor, la señorita Ferris salió del ascensor ignorándome completamente— Dijo únicamente eso

— ¡Dímelo todo! ¡Ahora! — Espetó furioso, la recepcionista comenzó a temblar, incapaz de ver los furiosos ojos del CEO, solo podía mirar sus pies

—Todo es como dice la señorita Harald, la señorita Ferris miente, la señorita Harald jamás tocó a la señorita Ferris, al contrario, ella amenazó a la señorita Harald— Dijo finalmente para calmar los aires del intimidante hombre que podía ser el mismo diablo. Pero esto no lo calmó, lo enfureció más, ¿Cómo se atreve ella a venir a su empresa, a maltratar a su asistente personal y a mentirle en su propia cara? Si hay algo que Derek Wilson odia, son las mentiras

Conteniendo su ira, el magnate tomó una decisión —Señorita Harald…— En un tono que Freiya entendió perfectamente, Freiya tomó cartas en el asunto

—Seguridad— Llamó Freiya a través de su Auricular - Manos libres que se le fue asignado por la empresa. No tardó mucho en llegar el guardia de seguridad, era uno robusto pero de tanto músculo, era casi tan alto como Derek, llevaba un traje negro, gafas negras y un Auricular - Manos libres en su oído izquierdo. Se acercó hacia ellos —Sáquela de aquí cuanto antes— Ordenó Freiya, su jefe la respaldaba con tan solo su presencia y su fría mirada

— ¡No! ¡No me toques! ¡Derek! ¡No puedes hacer esto! ¡Mi papá es el socio de la empresa! ¡No sobrevivirán sin la empresa de mi papá! — Gritaba la rubia. Freiya puso una mano entre el guardaespaldas y ellos, este se detuvo y se paró a un metro detrás de la mujer rubia

Freiya cerró los ojos y sin ganas de mostrarse amable —Bueno…— En un tono seco y realmente indiferente a las palabras de la mujer que yacía frente a ella, habló. A Derek le intrigaba escuchar las siguientes palabras de la hermosa mujer a un costado de él —Ahora ya sé quién eres. ¿Puedo decirte quién soy? — Se inclina hacia la mujer que tira odio por sus ojos —Mi nombre es Freiya Harald, vengo de Aalborg de Dinamarca, mi tribu es una de las pocas tribus vikingas aun existentes—  Derek no tenía conocimiento sobre ello, era sorprendente para él—. Ella siguió hablando —Y más que eso, somos aliados de Europa, ahora, estoy en territorio americano, viajo con protección federal. Si la prensa se entera de esto, tú serás criticada por racismo, quedará en evidencia tu prepotencia y birria. Y algo con lo que tu papi no puede, es definitivamente con el gobierno. Y aun si fuera tan poderoso como para mover algunas cuerdas en el gobierno, definitivamente no pueden con el gobierno danés. — Acercó su mano derecha y con el dorso de esta, acarició la mejilla derecha de la mujer frente a ella —Porque yo…soy el lobo, y tú, querida mía…eres el cordero— La abofeteó con mucha fuerza, la rubia cayó al suelo. Derek abrió sus ojos, sorprendido por la rudeza de quien parecía ser una delicada mujer —Esto…es compasión, es necesario que lo entiendas. Así que dime, ¿lo entiendes? — Preguntó fríamente, su amiga Lauren iba saliendo del ascensor. Contempló la escena, la frialdad en sus ojos y en su acción —Pero esto no es todo, la verdadera compasión…es la muerte— Los presentes se espantaron al oír tal osadía —Llévatela— Le ordenó al personal de seguridad, los ojos de la rubia se cristalizaron por el dolor y la humillación. No se defendió, no chilló ni pataleó, salió completamente derrotada por la nórdica. La recepcionista y su amiga la miraron con miedo, ella no tuvo escrúpulos. A Derek le sorprendió su comportamiento, nadie jamás se habría imaginado que esa era Freiya Harald, parecía una chica sensible, delicada…resultó ser un vikingo, ¿Quién lo diría?

—Señorita Harald— Habló el magnate, ella pareció volver a sí misma

Volteó quedado frente a frente con el CEO—Señor Wilson, me disculpo por los inconvenientes causados debidos a mi incompetencia, no volverá a pasar— Hizo una reverencia. Derek no lo podía creer, a pesar de la manera en la que enfrentó a su amante, ella cree que no fue suficiente. La rudeza, indiferencia, frialdad, su mismísima compostura, ¿no fueron suficientes? Sin duda, ella era algo

Se quedó sin palabras, tenía que decir algo —Ella era la hija de uno de nuestros proveedores de materiales más grandes que esta empresa ha tenido— En un intento por reprender, manifestó

—Jefe, no se preocupe por eso, yo puedo encargarme— Aun realizando la reverencia, Freiya expresa la indiferencia de aquella cuestión

— ¿Cómo planeas manejarlo? — Habla en un tono que muestra su irritación e inconformidad.

Pero nuestra protagonista tiene todo calculado —Mi gente tiene acceso a la mar del río, sin mencionar las minas en nuestro territorio que pueden proporcionarle hierro. Nosotros forjamos hierro. Las piedras del monte son resistentes y está bajo nuestro comando. Ellos accederán. Créame que lo harán— Derek se da la vuelta y entra a la oficina tirando la puerta

Aún sorprendido por todos los acontecimientos, Derek se deja caer sobre su gran sofá de cuero acolchonado clásico que está contra la pared, entre su dedo índice y su pulgar, sostiene el puente de su nariz, suspiró contrariado y se levantó para servirse un vaso de whisky

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***