Capítulo 5

Henry

Espero la opinión del abogado mientras mi hermana pequeña, abrumada por la tristeza y el cansancio, duerme.

No sé cuál será el futuro sin la presencia de mis padres.

Con una mente muy abierta a ciertas situaciones y revelaciones, me apoyaron cuando revelé que era homosexual.

Recuerdo lo difícil que fue, porque un día fui atrapado por un colega besando a un chico en la escuela.

Y lo difundió a todo el mundo.

Mi clase quería agredirme cuando supe de mi verdadero género, simplemente no me golpearon, porque el director intervino y reveló a toda la escuela en una conferencia su condición de homosexual.

Recuerdo lo difícil que fue, porque un día fui atrapado por un colega besando a un chico en la escuela.

Y lo difundió a todo el mundo.

Mi clase quería agredirme cuando supe de mi verdadero género, simplemente no me golpearon, porque el director intervino y reveló a toda la escuela en una conferencia su condición de homosexual.

A partir de ese día, mis compañeros de clase comenzaron a verme con nuevos ojos y me preguntaron cómo me sentía por no gustarme las mujeres.

Sonreí corrigiéndolos diciendo que amaba, sí, a las mujeres, el tema correcto es que no me atraía sexualmente una.

— Las mujeres son seres divinos y pueden generar una nueva vida, y las admiro, admiro la belleza, el caminar, cada mujer es hermosa, simplemente no me siento cachonda, digamos que soy espiritualmente una mujer.

Comencé a dar consejos a mis compañeros de clase sobre maquillaje y a los chicos valiosos consejos sobre cómo ganarse a una chica, ya que pensaba como una.

Mis días se han vuelto más fáciles, solo que llega un momento en que tenemos que revelar la verdad a nuestros padres y ha llegado el momento en que mi madre iba a traer a una prima de otra ciudad con la intención de cortejarla y salir con ella algún día, quién sabe.

Ese día reuní en la mesa a mi padre y a mi hermana que en ese momento tenía solo siete años.

- Mamá, lo siento por no cumplir con tus expectativas y tal vez las de mi padre - No traigas a mi prima a casa, para que no frustres sus expectativas.

— ¡Hijo no entiendo!

- Es difícil para mí revelarlo, aunque sé que eres de mente abierta, no sé si aceptarás mi condición.

Mi padre cuando dijo estas palabras me miró y se puso de pie, por un momento pensé que se iba a retirar de la mesa, porque entendió lo que estoy tratando de decir, pero no se paró a mi lado y puso su mano sobre mi hombro.

— Hijo, estoy aquí para apoyarte, vamos a revelar tu secreto a tu madre.

Apoyado por mi padre me sentí más fuerte y valiente mirando profundamente a los ojos de mi madre que revelo:

— Madre soy homosexual.

Empiezo a llorar porque creía que esta noticia sería una decepción para mis padres.

-Hermanito, no llore, ser homosexual no es una enfermedad, que debe ser tratada con jarabe.

"Mi hermana se levanta y viene a abrazarme.

Siento sus manitas envolverse alrededor de mi cuello y la escucho hablar en mis oídos.

- Te quiero mucho Henry.

Pero mi madre guarda silencio y espero a que ruga.

Se levanta y camina hacia mí, me acaricia el pelo y habla.

— Eres mi hijo, te amo como eres, lo que más quiero mi pequeño es que sea feliz.

Allí, sintiendo el apoyo de mi familia, me deshice de un peso en la espalda, ya que vivía con miedo de que alguien revelara mi secreto a mis padres por mí. Pero está bien y me entendieron y aceptaron que me gustan los hombres, no las mujeres.

Después de que me calmé, mi padre le preguntó a Nayara cómo sabía lo que era un hombre homosexual.

Explicó que en su escuela tuvo una conferencia al respecto después de que un maestro fue agredido por dos estudiantes.

- Hermanito, ten mucho cuidado de que haya mucha gente mala en este mundo, pero voy a pedirle a papá desde el cielo que te proteja.

Y ese día mi hermanita prometió que le rezaría a papá en el cielo todos los días para que me cuidara y ha tenido un efecto, nunca he sido agredida ni física ni emocionalmente.

Pero ahora siento un vacío en mi corazón, mis padres se han ido y tengo que luchar por mi hermana y ni siquiera sé por dónde empezar.

Me acosté junto a él y acaricié su largo cabello.

"Voy a protegerte hermanita, cueste lo que cueste, no voy a dejar que te separen de mí".

- Te amo hermano, siempre le voy a pedir a papá del cielo que te proteja.

Nayara dice esas palabras dormida y yo beso su mejilla.

Arlete entra en la habitación y por el brillo en su mirada noto que las noticias que tiene que darme deben ser buenas.

Le pido que guarde silencio y que no diga nada.

- Porque Henry es una gran noticia.

— Conozco mi flor de loto, pero quiero que Nayara esté despierta cuando lo digas.

— Eres un gran hermano Henry.

Arlete me abraza y me susurra al oído:

- Tu nueva vida comienza ahora.