Capitulo 1 4ta Parte

-Majestad, por ahora no se puede hacer más, necesitamos tiempo para armar el regreso de Shiu de la manera más segura para ella. -

-Entiendo lo que dice...es solo. -

Solamente que Amaru llevaba demasiado tiempo cargando una idea deprimente ¿y si él era el último? Una profecía que existe desde que el Reino se fue establecido por sus antepasados, lo atormentaba. Aquel emperador que no contará con el lazo que une a ambas casas sería el responsable de hacer caer al imperio... y aunque la gente a su alrededor no se lo decía de frente, ya tuvo oportunidad ,muchas veces realmente, mas de las que hubiese querido, de escuchar esa sentencia de las bocas que ruedan murmullos. El miedo era algo vago aún, pero se expresaba informe en los ojos que día a día lo contemplaban, como si él fuese el responsable de la situación en la cual se encontraba. Como si al nacer ya estuviese condenado. No quería esa responsabilidad. Apretó sus puños. Rezo y rogó tantas veces a los Dioses nuevos y antiguos, rogó con todas fuerzas, al fin sentía que una de sus plegarias había sido respondida... pero aún faltaba un largo camino. Suspiro.

-Regresaré antes que mis padres se enteren. - se puso de pie y con sus manos unidas en un arco hizo una profunda reverencia a su mayor.- Lamento mucho los problemas que le he causado esta noche y mi falta de respeto. Aceptaré cualquier castigo que desee imponerme. -

Gian sonrió abiertamente. Este niño será un gran gobernante, se dijo a sí mismo, muy pocos hombres tienen el valor sé aceptar sin excusas que se equivocaron, mucho menos el valor de enfrentar las consecuencias.

- Majestad, no se preocupe. -agito su mano, una sonrisa burlona se dibujó en su rostro- ¿Ud. y el pequeño marqués desean utilizar el portal de mi propiedad para regresar? -

- No... sí lo hago regresaré a sus dominios y todos lo sabrán... usaremos el que configuramos en un parque cercano. -

-Debe tener cuidado su majestad. - Las precauciones que debían tomarse para cruzar entre ambos mundos no eran pocas. Debido a que, aunque era posible utilizar los portales de trasportación para cruzar de un lugar a otro, más rápidamente que por otros medios, estos aún insumían un tiempo en ser cruzados; era necesario que se calculase cuidadosamente para emerger de ellos, ya que, si era en una zona abierta, solo podían utilizarse de noche. Hoy en día, las malditas cámaras humanas eran capaces de captar muchas deformaciones del espacio-tiempo entre ambos mundos y exponer un secreto guardado durante siglos.

Los portales consumían mucho poder así que no podían ser conjurados a antojo tampoco; sitio, hora, orientación, todo debida tenerse en cuenta a la hora de configurar un portal móvil. Contrario a los portales fijos, abiertos una sola vez y para siempre, que eran protegidos adecuadamente dentro de estructuras escogidas con mucho cuidado o incluso construidas especialmente para albergarlos, asi mismo, eran sostenidos por una fuente de energía permanente y por ende, más seguros y confiables, los portales móviles constituían solo un recurso auxiliar, usados muchas veces en caso de emergencia, o cómo en esta oportunidad, a escondida.

Gian despidió a ambos jóvenes en la puerta. Cerro detrás de sí y se detuvo un momento. Ahora debía explicar a una impaciente Shiu la situación. Pero ¿Cómo? Suspiro pesadamente antes de erguir la cabeza con determinación.

-Al mal paso, darle prisa.- se consoló a sí mismo y decidió enfrentar la charla lo más pronto posible.

Ambos jóvenes se vieron en la obligación de caminar hasta el parque bajo la fría lluvia otoñal. Louis no estaba muy contento y lo único que quería era marcharse. además, era mejor dejar al gran general hablar a solas con Shiu y calmarla.

Louis había ocultado el portal con un conjuro de obstrucción. Nadie más que él podría encontrarlo. En el momento que el portal de forma ovalada se abrió ante los adolescentes, Shiu, quien seguía a los muchachos, se sorprendió y pensó que si lo atravesaban no podría descubrir la verdad, decidida corrió sorprendiendo a los jóvenes y choco con Amaru en un intento de detenerlo, pero el impulso termino empujándolos hacia el Portal cayendo juntos dentro del mismo.

-¡¡¡Pero que!!!. - Louis atravesó apresuradamente el conducto que lo comunicaba con su hogar, para encontrar al Príncipe y a Shiu siendo ayudados por otros jovencitos en medio de un alboroto de voces.

-¡Alteza!

- ¿Qué diablos?,¿quién es él? -Maldijo Beret en un tono agrio.

-¡Suéltenme! ¡Suéltenme! - Grito mientras forcejeaba con los 4 brazos que la sostenían.

Dos muchachos con los rostros pálidos por el miedo sostenían a Shiu, quien empapada y helada hasta los huesos tenía una cara terrible de pocos amigos y una mirada feroz que lograba amedrentar a los muchachos, aun cuando era una cabeza más baja que ellos.

-DEJEN...LO- termino diciendo en un susurro Amaru, pálido del susto y con los ojos muy abiertos por la sorpresa.

Louis se volvió hacia Amaru que acababa de pronunciar aquella confusa palabra. Los muchachos obedecieron dejando caer a Shui al suelo con un sonido hueco, el desparramo de barro, agua y miradas desconcertadas abarcaba la pequeña sala del portal.

- ¿Estas bien? -trato de ayudarla a ponerse de pie, pero Shiu le alejo la mano con una palmada dura.

-No necesito tu ayuda. -

-Majestad ¿quién es?

-Es el pupilo de la espada inquebrantable de mi padre. - Dijo sin parpadear, técnicamente no era una mentira.

-¿Pupilo? -Todos miraron confundidos al niño con cara de pocos amigos que,mojado como un gato ,apareció enredado al príncipe heredero a través del portal.

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