Brayden.
Desde niño crecí bajo la atenta mirada de una niñera. A mis padres los veía una vez a la semana sino estaban
muy ocupados. Mi única compañía era mi abuelo Gerónimo, me encantaba quedarme en su casa para escuchar sus historias. A ellos le daba igual sí yo estaba en casa o la de él.
Incluso hasta navidad pase en la modesta casa de Amanda, la encargada de cuidarme. La consideró mucho más que una simple sirvienta, diría que es como la madre que no tuve. Ni hablar de mí poco cariñoso padre.
Así he vivido mi niñez y parte de mi adolescencia, sufriendo por la falta de cariño que ellos no proporcionaban, el cual delegaban en una persona ajena a mí. Pero más humana que cualquiera en el
planeta tierra.
Hoy se puede decir que mí independencia me ha costado horrores sostenerla, trabajando lejos de mi
"querido" padre. Cuando cumplí los 18, él quería que yo lo sustituyera en la empresa, pero eso no era lo que deseaba. Me opuse a su decisión dejándome sin un centavo porque no cedí a su capricho. Ser el presidente de C.A.R.Z. (compañía automovilística Roma-Zaragoza) no estaba en mis planes. Con el apoyo de mí abuelo estudie en la universidad de Oxford, la carrera de Economía y Gestión, lo que me sirvió después para crear mi propia empresa. Fue algo que a papá lo enfureció, aunque sus fundamentos no eran válidos para no
hacerlo.
Cree una cadena hotelera llamada "Chocolate Blanco", que con el tiempo fuimos brindando asesoramiento
en lo que se refiere al turismo. El gerente a cargo de todo es Maximiliano Rocha, mi mejor amigo que conocí gracias a la universidad.
El problema en este momento es la estafa que sufrí por el contador, que resultó ser un estafador profesional. Se llevó todo el dinero, lo que nos hizo buscar un préstamo en el banco para pagar a los empleados. Las ganancias disminuyeron considerablemente que prácticamente estamos en la quiebra.
Lo único que pasa por mi cabeza es "que voy a hacer" con esta situación.
Salgo de mi departamento a correr para pensar con más tranquilidad respeto a lo que está pasando con mi empresa. Llegó y ya se siente el olor a comida. Es Amanda preparando salsa con fideos caseros, yo y ella somos los únicos habitantes en esta casa. La traje a vivir conmigo porque no tiene a nadie más que yo, y que mejor manera de retribuirle su cariño por mí, que tenerla para que no esté sola. Ella nunca me dejaba solo.
Entro, se escuchan ruidos de platos, voy directo a la cocina y ya tiene lista la mesa. Intento escabullirme para
meter un pedazo de pan en la salsa, pero Ame es más rápida así que me quedo con las ganas.
-Solo falta el fideo para servir la comida - dice sonriente.
-Está bien. Me voy a dar un baño y vuelvo - y subo las escaleras.
Después de un relajante baño, me siento en la punta de la mesa. Amanda trae dos platos humeantes parecen
deliciosos sólo por el olor que despiden. El departamento es más que amplio, dos recamaras con baño propio, una cocina en el centro una mesa con 6 sillas, una sala con sillones en color gris, una alfombra debajo de la mesa, la biblioteca que está en el mismo lugar que el estudio, y, por último, un gimnasio.
Cuando terminamos de cenar, me dirijo a mí recámara para cambiarme e ir a la reunión con el señor Marc Michelin, Max me dijo que es un empresario importante que se dedica a la construcción. Necesito refaccionar uno de los hoteles para ponerlo de nuevo en funcionamiento, lo que no sé cuánto me va a costar, ya que no contamos con mucho capital para invertir. Cuando recuerdo a ese imbécil que nos estafo me pongo de muy mal humor.
Bajo al estacionamiento, busco mí auto un Ferrari 2020 azul marino, me encanta el sonido que produce al encenderlo. Salgo a la autopista, demoró como unos 25 minutos en llegar a destino, estacionó e ingreso al restaurante "San Jorge". Tomó asiento en la mesa reservada, todavía no han llegado los anfitriones. En unos breves segundos llega Max, me saluda y se sienta a la par mía. Ya comenzaba a impacientarme al ver que no llegaban los de la constructora.
Paso media hora hasta que llegan. Se disculpan por la tardanza, se hacen las presentaciones correspondientes, pero el señor Michelin no está entre los presentes.
Conversamos del trabajo que realizan como empresa. El sujeto llamado Luke, me hace entrega de una carpeta con información, lo primero que veo es el presupuesto que voy a gastar en este hotel, es mucho dinero para lo que pensaba. No me queda de otra, me tengo que arriesgar para salir a flote.
Antes de que se vayan, uno habla dándome un recado del señor Michelin.
-El señor Christopher Michelin me pidió que le dijera que lo espera el día miércoles en su oficina – da el recado
y no sé porque quiere hablar conmigo.
- ¿De qué quiere hablar conmigo? Pensé que está reunión era suficiente.
-No lo sé. Yo sólo cumplo con lo que me pidieron que diga - contesta un poco molesto.
-Está bien, ahí estaré el miércoles. Gracias por venir - le doy la mano para despedirlos.
Cuál será el asunto que quiere hablar conmigo el señor Michelin. Quedo intrigado por un buen rato. Vuelvo a
casa, ya comienza a oscurecer por lo que me duermo temprano.
Tenía un viaje que realizar pero que se canceló a último momento está mañana.
Desayuno antes de salir porque no me gusta el café de la oficina, prefiero el de Amanda, que está hecho por sus propias manos. El trayecto que hago hasta el hotel es corto. En mi cabeza pasan miles de preguntas, pero lo que más me preocupa es sino puedo resolver esta situación tendré que pedirle ayuda a mi abuelo o darme a la quiebra. Es algo sumamente triste, sin embargo, no tengo otra opción.
Alguien llama en la puerta, por su gentileza al tocar sé que es Maxi.
-Sí, adelante - digo. Él entra con su ejemplar sonrisa de que no pasa nada.
-Buenos día – dice -, el miércoles voy a reunirme con las personas de la constructora para ver qué es lo que van a hacer, y que no. Ósea mañana; ¿Qué no tenías un viaje hoy?
-Sé suspendió a última hora ¿Por qué? – contestó y preguntó.
-Solo preguntaba. Vamos por un café, yo invito ¿Quieres?
-No me viene mal para despejar la cabeza.
Yo me levanto en dirección a la puerta, él me sigue. Nos vamos a una cafetería no muy lejos del hotel, que se
llama "Un café para dos", entramos buscando nuestra mesa habitual junto a la ventana. La camarera nos toma el pedido y se va. Maxi saca su celular, lo único que hace es mirar la pantalla, cosa que me fastidia porque para eso me quedaba firmando papeles en la oficina.
- ¿Con quién estás charlando? - levanta su mirada viendo mi cara de enojo.
-Con una amiga ¿Por qué?
-Porque si no me voy. Vinimos a tomar un café, los dos, no yo solo. No sé si recuerdas tú invitación - sus ojos
parecen dos huevos fritos por mi actitud.
-Sí está bien no es para tanto, ¿No crees?
-También lo creo, pero me fastidia que estés metido en tú conversación. Eso es lo que me molesta, lo sabes ¿Verdad?
Mueve su cabeza en señal de afirmación. Nos traen los cafés, ahora se hace presente el silencio.
- ¿Por qué estás tan molesto? ¿Qué te irrita? Porque sé que no es mi conversación en el celular - sabe que eso no es.
-Todos los problemas que tenemos. Es lo que ocupa mi cabeza en este momento.
-Bueno, pero no puedes tomarte todo tan personal, si bien los problemas existen ya vamos a salir adelante. No te agobies tanto.
-No es tan fácil. Sólo pienso como resolver está desesperante situación. No sé en qué más ocuparme, de hecho, no tengo nada para hacer.
-Vamos de fiesta, el viernes ¿Te animas? - no creo que sea mi solución, pero es buena la idea.
-Me gusta tú idea - mí ánimo va mejorando - ¿Quién es tú nueva amiga? - su sonrisa lo dice todo. Creo que le
gusta su nueva compañía.
-Se llama Luz, no la conoces, pero es muy simpática y bonita.
Y con eso lo dice todo. Después de terminar regresamos al hotel. Yo continúo trabajando en los nuevos contractos para este mes. Recibo una llamada, el número que aparece en la pantalla no figura agendado, lo que espero es que no sea el gerente del banco. Cosa que no creo porque Max me hubiera avisado de algún inconveniente. Descuelgo la llamada para contestar:
-Hola - respondo un poco desconcertado.
-Hola, habló ¿Con el señor Brayden Roma? - pregunta el hombre del otro lado.
-Sí, soy yo usted ¿Quién es?
-Soy Christopher Michelin, no se sí Luke le dio mi mensaje ¿sí? - ahora si entiendo todo, pero porque querrá hablar conmigo este hombre.
-Me dijo que usted quiere hablar conmigo ¿Eso es verdad? - escucho atentamente lo que tiene para decir al
respeto.
-Es verdad - respira porque le cuesta hablar -, tengo una propuesta que hacerle señor Roma.
- ¿De qué se trata?
-Es mejor que me visite en mí oficina mañana. Es un tema que no se puede tratar por teléfono. Lo espero antes del mediodía, por favor, venga le aseguró que no se va a arrepentir - ¿Cuál será su propuesta? Sus palabras me dejan sin repuesta.
-Está bien, ahí estaré mañana. ¡Que tenga buen día señor Michelin! - cuelgo, más desconcertado que un pájaro que está aprendiendo a volar.
Me quedo pensando en esa llamada rara del señor Michelin. Es algo que me da escalofríos, presiento que esto no va a ser algo bueno.
Antes de retirarme a mí dulce hogar, paso por la oficina de Max, al ver que no se encuentra me voy. Me despido de Laura, nuestra secretaria yendo al estacionamiento en busca de mi auto.
Ya estoy en casa cuando Maxi llega con una pizza y un par de cervezas. Toma asiento en el sillón, enciende la tele para entonces ya comenzó el partido del Inter de Miami, el campeonato de la MLS. Es fanático del fútbol, no recuerdo la cantidad de veces que me llevo a verlos jugar. Había olvidado por completo este evento tan particular para él.
-Dime ¿Quién va a ganar? - sus cejas se empiezan a ceñir pasando a una media sonrisa.
-Cómo preguntas eso. ¡Cuando sabes cuál es mi equipo favorito! – exclama y mi diversión por su enojo puede más - Además va a ganar el mejor.
-Sí, sí, si, como tú digas.
Llevo la pizza para calentarla en el microondas. Vuelvo y mi amigo tiene los ojos pegados en la televisión. Si no
hacen un gol pronto le va a dar un ataque al corazón por como grita. Voy al baño cuando escucho un grito de Maxi <NO PUEDE SER COMO SE PERDIERON ESE GOLLL>, recalcando la "L". Eso afirma mi teoría sobre este partido.
Después dos horas de partido, el resultado no fue para ninguno de los dos, él se va un poco triste porque su
equipo no ganó como quería. Le doy un apretón de mano, una palmadita en la espalda antes que se va. Ya era hora. Hay que descansar para recargar energías. Subo a la habitación, lleno la bañera con agua, metiéndome relajando los músculos de todo el cuerpo. Hoy fue un día con mucha tensión, necesitaba algo que me ayude a dormir.
+++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Al día siguiente, antes de bajar me visto en un traje gris para la reunión del señor Michelin, Maxi me llama para saber mi paradero como el dueño que soy.
-Hola Maxi ¿Cómo estás? - pregunto, ya se encuentra más contento, que ayer.
-Hola, bien ¿Y vos? ¿Vas a venir para la junta con el arquitecto?
-No encárgate tú. Yo tengo una reunión con el señor Christopher Michelin - ni sé que es, si una reunión o una
junta, solo quiero que sea de negocios.
-Ok. ¿Para qué te reúnes con él? - no puede evitar su curiosidad.
-No lo sé, solo me dijo que lo visite hoy - cuando me entere de que se trata, se lo contare. Por el momento no
voy a decir nada.
-Está bien. Te veo después - y cuelga.
Termino con mi vestuario. Amanda ya me espera con su delicioso café. Lo tomó con tranquilidad porque tengo tiempo de sobra para llegar a destino.
Media hora antes de lo pautado con Michelín, salgo para su empresa, que va a ser el punto de encuentro. Aún no logro entender cuál será su propuesta. Divago entre miles de posibilidades de está junta, para mí un poco preocupante, pero para él algo serio.
Llegó con el tiempo justo, en la entrada la secretaria me dice que suba al último piso, el guardia de seguridad
me coloca un broche con un cartel de "visita". Como si no supiera cual es mí lugar en este sitio. Me presento ante otra secretaria, muy bonita con sonrisa picarona, que le avisa a su jefe. Ella pide que pase.
Antes de entrar, tocó la puerta, cuando escucho "pase" ingreso. Está sentado en su silla con la cabeza
para tras, es un hombre canoso de unos 55 a 65 años, es lo que cálculo yo. Sé para, me estira su mano y tiene una modesta sonrisa.
-Hola señor Roma ¿Cómo está? - ojalá sea breve con lo que tiene que decir.
-Hola señor Michelín - uso la misma formalidad que él - muy bien por suerte. Usted ¿Cómo se encuentra?
-Todo bien - contesta - seré lo más breve posible, también le explicaré con mucha claridad mi oferta. Es lo
siguiente se trata de mi preciada hija - esto se pone muy interesante -, a lo que quiero llegar es a "un contrato matrimonial". Quiero que usted se casé con mi hija, pero primero tendrá que seducirla, como todo caballero que es, - yo trago saliva - a cambio yo le daré el dinero para que pagué sus deudas. ¿Entiende lo que digo?
-Usted me está ofreciendo a su hija - mis ojos están puesto en él - a cambio de pagar mi deuda. ¿Cuál es el motivo para hacer esto? Usted no me conoce para pedirme semejante barbaridad, además su hija sabe de lo que usted ¿Me propone?
-Es verdad no lo conozco lo suficiente como para semejante sacrificio. Mi hija no sabe nada de esto, es
más, encarecidamente le pido que no hable de este tema con nadie. Sus deudas no se van a pagar sola. El motivo no lo tiene que saber hasta que haya aceptado.
La frialdad con la que se expresa es desgarradora. Que le hace pensar que voy a aceptar.
-La verdad que no sé qué decir - su cuerpo está sobre el escritorio - ¿Y sí no quiero?
-Sufrirá las consecuencias - vuelve a levantarse -. Si decide aceptar debe casarse con ella. Tiene 24 horas para
responder.
Salgo sin palabras, este hombre quiere que acepte como sea. Espero el ascensor, por estar distraído chocó a una hermosa señorita, le doy la mano para levantarla. Se sacude la ropa molesta.
-Hola soy Brayden Roma - digo con mi mano hacia ella.
-Minufer.
Que nombre extraño. Nunca lo escuche.
Subo a mi coche rumbo a ver a Maxi. Tengo mucho que pensar.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 42 Episodes
Comments
Maru
Es confuso! Subrayando lo que dijo Bryden es verdad Cristopher no lo conoce lo suficiente como para ofrecerle o mejor inducirlo a un contrato matrimonial
2024-11-17
0
Elvira Fretes
será que el padre está enfermo y no quiere dejar a su hija sola con todo🤷🏻♀️
2023-06-10
0
Hilda Dinora Perez Nolasco
ya va a emprzar li bueno de ña trama, estoy intrigada porque el papá la quiere casar?
2023-05-17
0