Capítulo 2: ¡Escapa otra vez !

Lil,que no sabía que se llamaría así, despertó con un olor a carne asada. Se sentó en el cuero y miró la cueva. Era una perforación en la roca y tenía una sola salida. Era de noche oscura y ella tenía hambre. El guerrero del sol con una roca afilada cortó una parte del animal asado y le pasó. Ella tenía las manos desatadas pero los pies no. Él le había atado muy bien con tientos y los pies le dolían y sangraban.

Aparentemente él aún no la mataría , quizás porque aún tenía carne de liebre. Decidió comer bastante para tener fuerzas para correr. El también comió y luego fue al fondo de la caverna y orinó. La hembra se dio cuenta porque esa cueva hedia muy fuerte.

Estiércol humano y orin era la causa del hedor.

Luego el guerrero se levantó y se acercó a ella. No traía nada en las manos por lo que Lil estaba segura que la mataría con las manos. El agarró sus dos manos de golpe. Lil comenzó a recitar nuevamente en silencio :" Madre luna , padre sol."...Pero el empezó a olfatearla.

Empezó con sus cabellos :

--Lil --dijo--Lil .Luego siguió con su cara , le olfateaba y aparentemente no encontraba el olor que buscaba.

Lil pensó que el macho era idiota.

Los escrementos estaban al fondo de la cueva y no sobre ella.

Luego empezó a olerle las ubres ,ella tenía un zurrón de cuero de lobo , allí no encontraría nada. Luego le olió el vientre. Allí se quedó un rato olfateando cómo si pudiera sentir algo de lo que buscaba.

Lil se dió cuenta ahora que el buscaba el olor a hembra, pero sus piernas estaban cerradas. Comenzó el guerrero a lamer su estómago y en eso estaba cuando se olvidó de la presión en las manos. Lil pudo safar un brazo y con toda su fuerza le golpeó un ojo.

El guerrero se separó y gruño. Se tocaba el ojo dolorido que pronto quedó enrojecido. Ella esperaba que le pegue pero el se recostó en la roca y se dispuso a dormir.

Al amanecer el guerrero se levantó. Salió afuera y de algún lugar trajo agua y le dió.

Lil tomo el agua. Era fresca y limpia. El solo la miraba y comenzó a afilar su roca de corte de carne. Ella necesitaba que él le desate las piernas. Cada vez que ella llevaba el brazo hacia abajo el se ponía alerta. De noche antes de dormir ella intentó desatar los tientos pero era muy difícil y ella estaba cansada.

El guerrero parecía querer conservarla cómo esclava para que tenga sus crías como madre y ella no le permitiría .

El sol ya estaba más alto y empezó a hacer calor. El calor trajo el olor apestoso de la cueva. Una idea surgió de la cabeza de Lil.

El buscaba ese olor y ella se lo daría. Sabía que los machos parecía gustarle el olor salobre de las hembras. Padre siempre olía a madre. Le separaba las piernas y la olia. Este estúpido no sentía el olor porque le tenía amarrada.

Gritó unas palabras en su dialecto pero el no entendía. Ella entonces hizo el sonido del orín cayendo y señaló la parte de la cueva donde se defecaba.

El iba a llevarle con las piernas atadas y ella con gestos le pedía que le saque para orinar.

El desató sus ligaduras del complejo nudo que había hecho. Ella se cuidó de seguir con las piernas juntas hasta agacharse a orinar. .

El guerrero no la perdía de vista. Ella dejo su trasero hacia su visión y después de orinar , con una mano frego bastante entre sus piernas . Luego se levantó y se sentó más cerca de él. Encontró una roca cerca de donde estaba sentada. Abrió su boca y le mostró sus dientes. Ese amago de sonrisa era efectivo con los machos . Él de golpe también sonrió.

Su cara aunque muy sucia y llena de pelos se veía agradable cuando mostraba sus dientes Ella sonriendo apoyo su mano con su olor, justo debajo de su nariz.

El guerrero de inmediato reaccionó con ese gesto y ese olor. Tomó su mano y empezó a oler y a lamer.

Ella retiró su mano y le mostró el lugar entre sus piernas.

El guerrero se levantó de inmediato y toda su cabeza fue hacia el lugar del olor que deseaba. Lil levantó la piedra y con todas sus fuerzas le pegó en el cráneo.

El guerrero cayó dormido. De su cabeza caía sangre. Ella tomó su morral y la piedra de corte del guerrero y estuvo a punto de cortar su cuello justo en la yugular.

Luego lo miró un poco y escapó corriendo de ese lugar.

A partir de ese día lo llamo Rok que significaba roca. Cubrió sus pies con cueros , se revolcó en excrementos y comenzó a correr.

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