capitulo 4

Con mis hermanos, ellos no sé, según los recuerdos de la antigua Ariana (osea yo), son muy reservados digo nunca me han tratado mal pero tampoco me han dado mi lugar, mi padre... bueno el siempre estuvo pendiente a mi, no voy a decir que es el padre más amoroso que digamos que bruto como me quiere nooo verdad, pero siempre estuvo pendiente a su manera....

Mi madre bueno ella... ella es ella no es la madre más amorosa pero siempre estuvo ahi al igual que mis hermanos.

¿cómo paré en esta choza?, bueno hace una semana estaba en un festival con mis disque "amigas" disfrutando un poco,

(dónde por cierto, conocí a un joven muy guapo un poco mayor que yo, como cuatro y cinco años ni idea, se acercó a mi y platicamos un rato pero no le pregunté ni el nombre, ¡¡p*ndeja yo algo tan esencial!! pense) prosigo, entre ellas me llevaron engañada a un callejón donde me esperaban unos hombres a los cuáles había contratado para secuestrarme...

¿porque? jajajaja jajajaja bueno pos porque el segundo príncipe Alex dijo en voz alta que yo le parecía hermosa y para ellas eso era lo peor ¿pueden creerlo?...

niñas estúpidas esas, malp*rid*s me las van a pagar.

Pero por ahora a regresar a casa...

cuando me dispongo a volver a casa escucho voces que se dirigen a la choza, como puedo me salgo lo más silenciosa posible y me oculto entre los arbustos de fresas y solo escucho como empieza a romper lo poco o más bien nada que hay en la choza y salen como locos a buscarme supongo, mientras uno de ellos se queda para vigilar hasta que los otros regresen...

espero hasta el anochecer cuando siento que ya no hay nadie por los alrededores y agarro uno de los caballos que traían los hombres que me buscan y cuando intento montarlo siento como si mi cuerpo se parte en dos...

Haaaa fue un grito ahogado el que di para no ser escuchada, trate y trate de subir pero mis fuerzas no eran muchas.

m*ldit* sea hasta yo misma que no sirvo ni pa' m*erda esos hiju*p*tas ahora verán.

Del cabello saque como un tipo de antorcha hecha de un trapo viejo metido en un frasco de vidrio en el cual al parecer había gas, me dirijo a la choza y de un ataque de irá por el dolor que sentía en ese momento abri la puerta y lancé el frasco a los pies de los de los bandidos y con el fuego que tenían al entrar de la puerta se los lancé, solo veía con enojó a esos tipos como se quemaban vivos, lo más satisfactorio eran sus gritos de auxilio.

jajajaja haa jajajajaja era lo único que hacía reírme, de un momento a otro un de los hombres prendido en fuego corre en dirección a la represa pero yo de un solo movimiento agarro una piedra del suelo y se la lanzó acertado en la cabeza, la tomo nuevamente y le sigo dando hasta que ya veo que no se mueve.