Capítulo 4 niña tonta

Javier:no creo que solo sea eso, estás como si tuvieras una culpa única, no, no me digas que te la llevaste a la cama a la hermosura.

Juan Pablo:deja de joder quieres, a que has venido en realidad.

Javier:en vista de que no quieres confiar en mí tu mejor amigo, paso a retirarme.

Juan Pablo:ya en serio que sucede.

Javier:conocí a una hermosura y quisiera salir con ella en la tarde, si me dejo entender.

Juan Pablo:quieres que te reemplace en el trabajo.

Javier:tú sí que eres inteligente.

Juan Pablo:por allí hubieras empezado, está bien no hay problema.

Javier:si gustas yo voy en tu lugar en la noche.

Juan Pablo:no, no hace falta necesito trabajar.

Javier:que aburrido eres no sé cómo te aguantan.

Juan Pablo:ese no es asunto tuyo ya vete, a la 1 estoy allá en tu lugar

Javier:de acuerdo nos vemos.

-Daniella salió de la uni y se fue directo al hospedaje a ver si Juan Pablo le había dejado mensaje y nada, se duchó se cambió y fue a cambiar estuvo un largo rato mirando el chat y de allí le llamo a su amiga para ir de compras.

Daniella:Anaís estás lista.

Anaís:nos vemos en "shilo".

Daniella:está bien.

-al llegar al lugar Daniella buscaba a Anaís sin darse cuenta de que al momento de retroceder se chocó con alguien.

Hombre:porque no te fijas por donde caminas niña tonta.

Daniella:esa voz, no, no puede ser que hasta aquí tenga que encontrarlo.

Hombre:aparte de ciega sorda, niñita tonta.

Daniella:no soy niñita, tampoco ciega ni sorda, es una lástima chocar contigo.

Hombre:ah era eso buscas un pretexto para estar cerca de mí.

Daniella:no seas arrogante, tú le gustará a muchas, pero a mí no dejame decirte que, no eres mi tipo.

Hombre:si engáñame para que te quedes tranquila te puedo dar un beso.

Daniella:no, no ni se te ocurra, sí que eres detestable.

Hombre:sabes por alguna razón no olvido lo que me dijiste en el hospital y sabes que eso me la vas a pagar, eso tenlo por seguro.

Daniella:tus amenazas me tienen sin cuidado, no te tengo miedo engreído y poco hombre.

-esa palabra encendió a aquel hombre que tomó de la muñeca a Daniella y la hizo girar atrayendo la aún más cerca a su rostro y mirándola a los ojos con una furia.

Daniella:suéltame estúpido.

Hombre:cuida tus palabras, no sabes con quién te estás enfrentando.

Daniella:ya te dije no te tengo miedo, ahora suéltame niño engreído.

- él la soltó, le dio la espalda y se alejó riendo a carcajadas. Anais se acercó presurosa junto a Daniella.

Anaís:amiga estás bien, te lastimo.

Daniella:no, es un estúpido engreído, que mal arruino mi día.

Anaís:no digas eso amiga, ven vamos a comprar, hoy iras al hospital.

Daniella:claro que si, me ayuda mucho ver a mis niños.

Anaís:que dices si les compras unos regalitos.

Daniella:que buena idea.

Anaís:ves ya cambio tus ánimos.

Daniella:si tienes razón.

Después de hacer las compras se fueron a tomar un café de allí en la noche Anaís la acompaño al hospital encontrándose como siempre en la entrada con Juanita.

Daniella:hola Juanita.

Juanita:hola señorita Daniella.

Daniella:mira te presento a mi amiga Anaís.

Juanita:hola, sea bienvenida.

Anaís:gracias vengo a conocer a los niños de quienes tanto me habla mi amiga.

Juanita:son unos lindos niños, son pocos los que lo notan.

Anais:si vamos, ya quiero conocerlos.

-cuando subieron al segundo piso en donde estaba los niños, también se encontraba el doctor Octavio conversando, con los niños, hasta que uno se dio cuenta de Daniella.

Omar:Daniella, llegó Daniella.

Daniella:hola mis peques, miren les presento a mi amiga su nombre es Anaís.

Anaís:hola niños, Daniella me hablo mucho de ustedes, es cierto cuando me dijo que ustedes son unos chicos muy lindos y valientes, de verdad que sí.

Daniella:oh disculpe doctor, que distraída por no saludarlo.

Octavio:no se preocupe señorita Daniella, entiendo su entusiasmo, y los regalos son para mí, como supieron que hoy es mi cumpleaños.

Daniella:de verdad hoy es su cumpleaños lo siento no lo sabía.

Octavio:no se preocupe solamente era una broma, lo que si no es una broma es que las invito a pasar un momento en mi cumpleaños espero no puedan negarse.

Daniella:lo siento le presento a mi amiga Anaís.

Octavio:hola Anaís, puedes venir a mi fiesta de cumpleaños junto a Daniella.

Anaís:hola, si sería un placer, verdad Dani.

Daniella:si, pero nos tenemos que ir a cambiar, no podemos ir así.

Octavio:si claro, Fabiola estará muy contenta de verte, que me dicen si pasamos a las 8 por ustedes.

Daniella:si está bien.

Octavio:bien a las 8 las recogemos de tu hospedaje, está bien.

Daniella:si, está bien solamente déjeme les doy los regalos a mis niños, venderemos mañana si mis pequeños preciosos que disfruten sus regalos.

-Daniella y Anaís salieron del hospital tomaron un taxi al centro compraron un regalo cada una, primero pasaron por la casa de Anais para sacar ropa de allí se fueron al hospedaje de Daniella para alistarse.

Anaís:tienes que ponerte.

Daniella:si tengo estos pantalones y esta blusa.

Anaís:estás loca, hace mucho que no sales y menos a un cumpleaños, mira te traje estos vestidos y zapatos tú elige.

Daniella:pero, Anaís estos vestidos cada uno es más atrevido que el anterior.

Anaís:claro que sí, tienes que mostrar tus atributos.

Daniella:no, no me voy a vestir así.

Anaís:ya me imaginaba, es por eso que te traje este no es tan recatado pero al menos se te verá bien.

Daniella:gracias por pensar en mí.

Se vistieron y se maquillaron, no paso mucho tiempo tocaron la puerta y un joven muy simpático estaba parado junto a la puerta.

Octavio:hola, Daniella que hermosa que estas.

Daniella:gracias, tú también te ves bien.

Fabiola:y yo.

Daniella:hola Fabiola te ves preciosa.

Fabiola:hola, Dani, gracias.

Octavio:tú te ves maravillosa mi reina.

Anaís:y yo que estoy pintada acaso.

Octavio:no disculpe usted señorita todas se ven espectacular, seré la envidia de todos cuando me vean llegar al lado de tres bellezas, nos vamos.

Daniella:si claro, voy por mi bolso.

- cuando llegaron al salón de recepción había muchos invitados, que entrando empezaron a saludar a Octavio, Fabiola, llevo a Daniella y Anaís al salón, también ingresaba Octavio, cuando vio a aquel hombre acercarse a Octavio y darle un abrazo.

Daniella:ay no, no puede ser.

Fabiola:que pasa Dani porque te pones así.

Anaís:por el tipo que está junto a tu hermano.

Fabiola:ah él es Francisco es nuestro hermano mayor.

- Daniella y Anaís, no podían creerlo las dos dijeron ¡que !.

Daniella:él es el hermano del que me hablabas sí.

Fabiola:él es bueno, iré por refresco desean.

Daniella:si gracias.

Anaís:sí.

- las dos se quedaron muy sorprendidas, cuando Francisco se dio cuenta de la presencia de Daniella.

Francisco:Octavio, quien es aquella mujer.

Octavio:a ella es la amiga de Fabiola, y de una vez te aviso que no está detrás de la fortuna, se ve que ella también es de buena posición económica.

Francisco:quien la invitó.

Octavio:Fabiola y yo.

Francisco:de acuerdo iré a presentarme.

-Daniella y Anaís estaban tan concentradas que no se dieron cuenta de que Francisco estaba detrás de ellas.

Anaís:y que tal es como persona.

Daniella:se cree mucho por su linda cara, se ve que no tiene buenos sentimientos, todo lo contrario de como es su hermano a Octavio si se le ve un buen chico.

Francisco:miren a quien tenemos aquí a la niña tonta, así que mi hermano es mejor que yo, él te gusta a caso o también es una mentira para acercarte a mi por qué ya es mucha coincidencia estar encontrándonos más seguido no te parece.

Daniella:no me importa lo que tú pienses, no vine por ti eso te lo puedo asegurar, además ya deja de ser tan engreído el mundo no gira al rededor tuyo, ya date cuenta.

Fabiola:hola hermano ellas son mis amigas.

Francisco:hola preciosa que te diviertas voy a tomar aire.

Fabiola:lo siento chicas.

Daniella:no te preocupes Fabiola.

Octavio:hola chicas se divierten.

Daniella:si, como estas tú en tu cumpleaños.

Fabiola:si hermano te estás divirtiendo.

Octavio:si el verte feliz me hace más feliz aun.

Anaís:ay lo amo sé tan lindo(mirando a Octavio).

Daniella:Anaís, que estás tomando.

Anaís:un refresco azul, está muy rico, al principio no me agradaba ahora sí.

Octavio:y cuantas copas tomaste de ese refresco.