capitulo 4

Natalia se escapó de la casa alrededor de las 8:30 p. m.

Se aseguró de cerrar con llave la puerta de su habitación antes de hacerlo a pesar de que su hermano nunca se molestaba en entrar a su habitación y su madre siempre estaba demasiado cansada para prestarle atención.

Tomó un taxi hasta el Hotel W, el hotel más grande y lujoso de la ciudad.

Justo antes de salir del auto, sacó su máscara bucal con el tema de un oso.

En el contrato que firmó, RG le había pedido que siempre estuviera disfrazada cada vez que se encontraran en lugares sensibles.

Durante los primeros dos años, Natalia pensó que era porque quería proteger su reputación.

Sin embargo, cuando ella le habló de esto durante una de sus cenas de aniversario, se rió.

Ese tipo en realidad dijo, con nada menos que una barriga llena de arrogancia: "¿Quién se atreve a jugar con mi reputación? Te digo que hagas esto por tu propia seguridad".

Él le explicó pacientemente que con su estado, todos los que lo rodeaban podrían ser utilizados como objetivo para lastimarlo.

Ella y RG se reunían en el hotel con tanta frecuencia que la recepcionista y ella tenían una relación amistosa.

Fue directamente a la recepción y se bajó un poco la mascarilla antes de volver a subirla.

"Buenos días, K. ¿Cuál es el código de hoy?" la recepcionista, sonrió mientras miraba a Natalia . K representaba a Kara, que era su nombre en inglés y que solo usa RG.

"Príncipe Zuko".

k pasó el nombre por su sistema, "Ah. Una reserva para el Príncipe y la Princesa Zuko.

Natalia sonrió y le guiñó un ojo mientras agitaba la tarjeta dorada que acababa de entregarle, "Por supuesto. Nosotros, la realeza, no nos conformamos con menos que lo mejor".

"¿Necesitas que te lleve?"

"No, conozco el camino". Sacó $100 y le dio una propina a k: "Como de costumbre...". Se puso un dedo en los labios.

La inmigrante había estado trabajando como recepcionista durante los últimos 10 años y había visto a muchas jóvenes como la anterior que vendían sus cuerpos a hombres lujuriosos.

k nunca los juzgó. Dios sabe, su propio pasado estaba salpicado de oscuridad.

Tal vez esa fue también la razón por la que accedió fácilmente cuando el Gerente General le pidió que trabajara en los turnos de noche.

Había escuchado que algunos de sus colegas insultaban a los clientes a sus espaldas y sabía que algunos de ellos recopilaban fotos con la intención de vendérselas a los paparazzi.

Si bien estaba disgustada con sus acciones, entendió de dónde venían.

Todos tenían sus propios problemas y mientras no se pasaran, ella no los denunciaría.

Sin embargo, aunque no había dicho nada, todavía quería proteger a las chicas.

Entonces, a pesar de las horas de trabajo más largas, aceptó el turno de noche.

"Nadie oirá nada de mi boca".

Mientras observaba cómo la espalda de su invitada favorita se hacía cada vez más pequeña mientras caminaba hacia el ascensor, k se preguntó si era una novia en lugar de una sugar baby.

Por las breves interacciones que tuvo con el presidente Luque y Natalia por separado, y por los raros momentos en que se topó con ellos y vio la forma en que los dos interactuaban entre sí, sintió que los dos se trataban con respeto genuino, lo cual era raro. .

El presidente Luque siempre tenía una mirada suave cada vez que hablaba con ella.

k no podía decir esto cuando se trataba de los otros clientes del hotel.

Había visto salir a niñas con moretones en la cara para regresar al poco tiempo, y no quería que la amable mujer sufriera el mismo destino.

Natalia se dirigió directamente a la sala presidencial mientras tarareaba la melodía de Imagine , 'Not Today'.

Su máscara estaba puesta cuando vio a un par de "socios comerciales" caminando hacia ella.

Ella frunció el ceño al reconocer al hombre. Ella lo vio en las noticias antes.

RG le advirtió antes que este hombre era un bastardo de dos caras y que debía mantenerse alejada de él.

En la superficie, parecía ser un caballero, pero a puerta cerrada, a menudo abusaba físicamente de su legítima esposa.

Incluso hubo especulaciones de que ya podría estar lisiada o muerta.

El hombre estaba cantando en voz alta mientras se apoyaba en su compañera que luchaba por caminar con su peso sobre ella.

"¿Mantente alejado?" pensó Natalia con picardía.

Cuando se cruzaron, Natalia aprovechó el hecho de que estaba borracho para tropezarlo con el pie, lo que provocó que aterrizara en el suelo.

"Ups." jadeó Natalia antes de disculparse sin sinceridad.

Entonces, cuando él la maldijo, ella fingió tropezar y pisó su mano gorda, con fuerza.

Quería romperle un par de huesos, pero su grasa le proporcionaba demasiada amortiguación. "Torpe de mí".

El hombre aulló de dolor mientras maldecía al pequeño diablo.

Natalia salió corriendo rápidamente y, cuando pasó junto a un botones, le mostró su tarjeta dorada de la habitación antes de correr hacia el área restringida.

El hombre que trató de perseguirla fue retenido por el botones.

"¿SABES QUIÉN SOY? ¡APARTA DE MI CAMINO! ¡VOY A MATAR A ESA PERRA!" rugió el hombre mientras trataba de alejar al botones.

Sin embargo, a pesar de su complexión delgada, el botones era más fuerte de lo que parecía. Se las arregló para contener al hombre mientras decía con severidad:

"Sr. li, por favor, baje la voz. Esa área está restringida para todos, excepto para los huéspedes distinguidos del hotel".

"¡VI A ESA PERRA CORRER! ¿¡QUÉ CLASE DE INVITADO DISTINGUIDO ES ESE!?"

Agarró al botones por el cuello y le gritó:

"¡DÉJAME PASAR O ME VOY A ASEGURAR DE QUE TE QUEDES SIN TRABAJO MAÑANA POR LA MAÑANA!"

"Señor li".

Una voz tranquila sonó detrás de ellos.

El hombre se giró y estaba a punto de decirle a la persona que se fuera a la mierda cuando vio que era el Gerente Principal del Hotel W.

Inmediatamente controló su temperamento. El Gerente Principal perez no era alguien con quien pudiera tratar fácilmente.

Todos sabían que el muy buscado gerente en jefe perez fue designado personalmente por el presidente Luque y se le otorgó plena autoridad para tratar los asuntos relacionados con el Hotel W.

"¿Qué está pasando aquí? Recibí quejas de los otros huéspedes".

El gerente perez le preguntó al botones mientras cambiaba su mirada entre los dos hombres y la joven que estaba detrás del cliente.

"Este invitado intentó acceder al área restringida sin tener una tarjeta dorada".

Explicó el botones mientras miraba a la chica detrás del gordo. Él la conocía, pero decidió permanecer en silencio sobre esto.

Una sombra de dolor se reflejó en sus ojos cuando se dio cuenta de lo que estaba a punto de hacer, pero logró mantener la compostura profesional.

Su reacción, por leve que fuera, fue notada por el director general perez.

El hombre gordo comenzó a quejarse con el Gerente Principal mientras masajeaba su mano:

"Esa perra me pisó la mano y casi me rompe los huesos. Solo quería entrar y pedir una compensación. Honestamente, Gerente Principal perez, parece una ladrona". y no creo que ella pueda permitirse el lujo de quedarse en un lugar así o incluso afiliarse con alguien aquí. Tal vez deberías dejarme entrar y ayudarte a deshacerte de ella antes de que robe algo del hotel".

El Gerente Principal perez sonrió con calma al hombre mientras sus ojos no traicionaban nada.

A pesar de enfrentarse a un calmado Gerente en Jefe perez, el hombre no pudo evitar temblar levemente. Había escuchado rumores sobre lo que les había pasado a aquellos que lo irritaban.

El presidente Luque nunca mantendría a un tigre desdentado a su lado.

"Sr. li, nuestro hotel respeta la privacidad y la seguridad de nuestros huéspedes. No podemos permitir que nadie ingrese a lugares a los que no pertenece. Si ella logró ingresar allí, entonces es una de nuestras distinguidas invitadas y no cuestionaremos su derecho a estar aquí basado en su ropa".

"Pero-" El hombre dio un paso atrás cuando el gerente en jefe perez lo miró fijamente mientras mantenía una sonrisa, indicando que ya había tenido suficiente de la conversación.

"Sr. li, por favor regrese a su habitación".

Sin otra opción, el Sr. li solo pudo tragarse su ira.

Se dio la vuelta y arrastró a la chica, ignorando por completo su incomodidad. El botones los observó mientras regresaban a su habitación.

"¿Quién?"

El botones se volvió hacia su superior. Había trabajado aquí el tiempo suficiente para entender la pregunta de una sola palabra, "Presidente Luque ".

"Mantén este asunto para ti. Ve a la sala de seguridad y deshazte de todas las grabaciones".

"Sí, señor."

Justo antes de que se fuera el botones, el director perez gritó: "¿Pablo picaso ?".

"¿Sí, señor?"

"Lo hiciste bien."

Pablo picaso asintió y se fue sin decir nada más.

El gerente en jefe perez sabía que no era fácil para alguien tan joven como Pablo picaso trabajar aquí.

Nació en el pueblo y se crió aquí. No había duda de que se encontraría con alguien que conocía.

Sin embargo, así era la vida y si Pablo picaso no pudiera ser profesional al respecto,

El gerente perez suspiró con inquietud mientras miraba en dirección a la habitación del presidente Luque .

Esta no era la primera vez que Natalia intentaba causar problemas en este hotel.

La joven era un imán para los problemas, siempre metiendo las narices donde no debía.

Sin embargo, dado que el presidente Luque la trajo, eso significaba que mientras ella estuviera en el hotel, él era responsable de ella.

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