Los 15 años de Ana y Sofía

Llegó el mes de Marzo y con él la algarabía de las fiestas de 15 años, casi todos los estudiantes tendrían los deseados 15.

Ana y Sofía cumplían año el 12 y 14 de marzo, cómo sus familias eran tan unidas decidieron celebrarlos cumpleaños en una sola fiesta, los regalos debían entregarse al llegar a club, así que aproveché para preguntar por mis queridas amigas.

En el loving me informaron que estaban en ese momento maquillándose, pero tenían orden de los familiares de no dejar pasar a nadie.

Hablé con la chica encargada de la seguridad y le dije que ambas eran mis mejores amigas y quería ser la primera en felicitarlas.

Coloqué una cara como si quisieras llorar y de tanto insistir la encargada me dejó pasar.

Ahora iniciaba mi venganza contra Sofía, subí a la habitación donde se iban a vestir y corté su vestido.

Sin embargo, las cosas no pudieron salir mejor, cuando Sofia entró a su cuarto y vió su vestido destruido, corrió a la habitación de Ana, observando que el de ésta estaba intacto, su molestia fue tal que culpó a su amiga de haber destrozado su vestido por envidia.

Ana intentó defenderse pero la rabia de Sofía era tan grande que no entendía razones, Asus ojos los únicos que podían acceder a las habitaciones eran ellas y su familia.

La fiesta de 15 años fue suspendida y las familias quedaron enemistadas.

Creo que las cosas no pudieron salir mejor, cómo quién dice dos pájaros de un solo tiro.

Tan solo me faltan Luis y la coordinadora para culminar mi ciclo de venganza.

Ese día de la fiesta de 15 años de "mis amigas", Luis se encontraba allí, yo me había vestido de gala y me había maquillado un poquito.

Antes de que mis padres hubiesen tenido problemas, "mis amigas" me decían que Luis estaba enamorado de mi, por eso siempre buscaba sentarse a mi lado y me defendía al momento que me hicieran una broma pesada.

Allí residía mi enojo con él, pues en el momento que mis amigos dejaron de hablarme y comenzaron a hacerme cosas pesadas, Luis no lo impidió y eso lo convierte en complice.

Así que ese día inició mi venganza.

Comencé por coquetearle, justo antes de que se suspendiera la fiesta, le hice saber lo guapo que estaba eso ayudaría a alimentar su ego, igualmente le ayudé a arreglar su camisa y corbata para estar más cerca de él.

Sentí como sudaba, por fuera disimulaba y controlaba mis emociones pero por dentro estaba que rebosaba de gozo.

Cuando nos notificaron que la fiesta se había suspendido, coloqué mi mejor cara de drama, haciendo creer que estaba triste por lo sucedido, incluso intenté mediar entre ambas amigas para que no se pelearan.

Trataba de que Sofia viera la posibilidad de que alguien más pudo cortar el vestido, sin embargo, Sofia seguía ciega del odio, fue tal mi actuación que hasta ofrecí prestar mi vestido para que celebrara su fiesta (cosa que no iba a pasar).