CAPÍTULO 3

(Joshua)

Sin saber a dónde ir me dirijo a un bar necesitaba despejar mi mente y pensar mejor, apenas llegué me acerqué le pedí al bar tender una copa de wiski

Miraba a mi alrededor tratando de distraerme aunque no funcionará el bar ya lo conocía de memoria es a donde vengo desde que cumplí la mayoría de edad y se podía decir que seguía igual, las mismas personas borrachas queriendo olvidar sus penas o sus errores, mujeres ofreciendo sus servicios cambio de dinero.

Siempre me pareció un poco deprimente este lugar pero me gustaba que cuando quería estar solo y pensar la gente se daba cuenta y ni siquiera se acercaban.

Me dolía mucho lo que mi padre izo el es todo para mí y se que yo soy todo para el, aunque no lleve su sangre.

El siempre me brindo su amor, nunca dijo algo que me hiriera, siempre estaba al pendiente de mi felicidad por eso tenía tantas dudas por eso estaba confundido el dijo que lo hacía por la empresa pero el nunca ponía la empresa sobre mi…

Mientras pensaba seguía pidiendo que me sirvieran más wiski asta tener la botella conmigo quería pensar pero por más que le daba vueltas solo volvía al inicio a cuándo mi padre me adoptó.

Yo tenía 4 años vivía con mi madre una mujer alcohólica que tenía una relación con un hombre al que le gustaba maltratarla, ella me odiaba por qué los golpes eran por mi el ya no quería verme en esa casa y después de que la golpeaba y saliera a embriagarse ella me golpeaba a mí me corría y me serrada las puertas dejándome afuera

Yo era un niño no sabía que hacer así que solo me quedaba afuera a esperar a que estuviera sobria y me dejará entrar me abrazaba y pedía perdón me decía que ya no sería así que echaría de la casa a ese hombre y que todo sería mejor para nosotros dos

Siempre esperaba que ese día llegará pero no fue así, ese día mi madre no solo me golpeó me saco de la casa y me subió al carro yo iba llorando en el asiento de atrás le preguntaba cuándo sería el día especial ella me decía, pero ella no me respondía solo manejaba

No sabía a dónde íbamos, solo esperaba que si nos íbamos juntos fuera a un lugar lejos donde es día especial llegaría, el día en el que mamá ya no tomaría ni una sola gota de alcohol el día en que nuestras vidas cambiarían por qué mami volvería a ser una mami cariñosa y amorosa

Después de unas horas me quedé dormido mi madre seguía manejando y ya casi oscurecía.

Sentí que se detuvo el carro y desperté todo estaba completamente oscuro mi madre lloraba en el carro asta que bajo y abrió la puerta de atrás para que yo bajará veía las lágrimas en sus ojos pero por más que preguntaba por qué lloraba no me respondía

Me tomo de la mano y me guío a la puerta de una casa grande me daba miedo el lugar pero no dije nada no quería molestar a mamá estaba atento a mi alrededor y vi unos juegos dentro de la casa, eso me izo pensar que era un buen lugar si no para que tendrían juegos que son de niños mi madre se inclinó y me abrazo estaba empezando a sollozar, yo estaba confundido y no sabía por qué sentía que era una despedida

—mi bebé perdóname por favor prometo que vendré por ti mami irá a un lugar para curarse y regresará para estar contigo siempre tendremos una vida feliz solo los dos te lo prometo—

Solo era un niño pero ya no creía en esa promesa sabía que mi madre me abandonaría para siempre sabía que no me quería con ella y por eso me estaba abandonando

—por favor mi amor cuando me valla tocas el timbre de está casa y te esperas asta que salgan aquí te cuidarán asta que yo venga por ti. ¿Si puedes hacer eso?—

—si mami—

—bien, te prometo que regresaré por ti lo más pronto que pueda te amo mucho me bebé…—

Me dio un gran abrazo y beso mi frente antes de irse aunque me dolía que se fuera no llore no se por qué pero ni una lágrima salió de mis ojos

Toque el timbre y espere a que abrieran pero nadie salió así que solo me senté afuera a esperar no supe en qué momento me quedé dormido,

Cuando desperté estaba en una cama rodeado de varios niños sus cuchicheos fue lo que me despertó una niña salió y regreso con una señora que daba un poco de miedo tenía cubierta la cabeza solo se le veía la cara y aunque me sonrió su sonrisa me dio más miedo

—hola pequeño ¿Cómo estás? ¿Dormiste bien? Estabas afuera en el frío cuando salí y te vi me lleve el susto de mi vida… ¿Puedes decirme tu nombre?—

Yo no quería hablar tenía mucho miedo avía muchos niños a mi alrededor y todos tenían una mirada triste, no podía hablar no me salían las palabras

La señora se presentó como la prefecta ANALUZ pero aún que me dijera su nombre no me dio mucha confianza.

Paso un mes y yo seguía sin hablar, los niños me evitaban y las institutriz preferían dejar que me adaptará solo.

Era domingo y muchos niños estaban emocionados al parecer era un día especial en el que muchas parejas que querían adoptar iban a visitar a los niños para así decidir a cual llevarían para poder darle una familia,

E el jardín estaban todos felices y alegres jugando y encontrando a sus futuros padres, yo estaba sentado en una banca… varias parejas se me avían acercado pero al no obtener respuesta de mi parte se iban a buscar a otro niño,

Yo no quería estar hay pero no podía entrar nos pidieron salir a jugar y convivir con las parejas mientras que adentro unas parejas llenaban los papeles para así adoptar al niño que les avía robado su corazón

No tenía de otra que seguir donde estaba sentado en la banca abrasando a mis rodillas, no podía dejar de pensar en mi madre el por qué ella no me quería, por qué me izo muchas promesas y nunca las cumplió me preguntaba si era verdad que regresaría por mi,

No lo creía pero quería un poco de esperanza algo que me diera un poco de tranquilidad estaba tan sumergido en mi mente que no le di cuenta cuando alguien se sentó conmigo asta que su voz me izo alzar mi vista

—no quieres jugar?— me preguntó un hombre su voz era algo relajada y serena levanté mi vista para mirarle a los ojos y me detuve en ellos su mirada me atrapó dando me paz al ver esos ojos azules como el mar hicieron que todo lo que pensaba se me olvidará

—no… no quiero estar aquí este lugar me da miedo mi mamá prometió que regresaría por mi pero ya no creo en sus promesas, ella siempre me decía mentiras—

El hombre me observo detenidamente yo no podía dejar de ver sus ojos me gustaban me gustaba esa calma que me asían sentir el me sonrió y yo también le sonreí

—mi nombre es Esteban Bianchi— se presentó dándome la mano en modo de saludo

—mi nombres es Dalton— ese era mi nombre antes de ser adoptado

—mucho gusto Dalton, ¿quieres que juguemos o prefieres seguir platicando y conocernos mas? a mi me gustaría conocerte y saber que es lo que te gusta— yo solo quería seguir viendo sus ojos ni siquiera me avía dado cuenta de que el venía solo, todos los padres venían en pareja

—no quiero jugar solo… solo quiero ver sus ojos tiene unos ojos muy bonitos— mi respuesta le causo gracia formo una gran sonrisa asiendo que se le notarán dos hoyuelos en los cachetes y sus ojos brillarán

—mi esposa siempre me decía lo mismo, ella prefería verme a los ojos que hacer otra cosa decía que mi mirada era como el mar azul y que era lo que la calmaba o la llenaba de paz cuando estaba triste— así me sentía yo reí por qué se podía ver qué el era un hombre que estaba sufriendo pero asía un esfuerzo para estar bien

—su esposa tiene razón yo estaba triste por… por mi mamá pero al verlo a los ojos ya no me siento así pero no quiero dejar de verlos—

—bien entonces nos quedaremos aquí sentados y seguiremos platicando está bien?— pregunto a lo que yo solo asentí

Continuamos hablando un rato asta que solo se levantó por algo de beber para los dos el orfanato daba comida y bebida, cuando regreso conmigo se sentó donde mismo y me tendió el vaso que tome feliz me sentía con mucha confianza con el me platico que su esposa estaba enferma y que por eso no lo acompañó ella estaba muy triste por qué se robaron a su bebé al nacer yo era un niño pequeño pero entendí lo que me dijo cerca de dónde vivía con mi madre se avían robado un niño de mi misma edad y nunca lo encontraron sus padres estaban tristes y la mamá nunca dejaba de llorar así que me imaginé por lo que ellos avían pasado

Casi era hora de que acabará el evento y muchos niños estaban felices pues tendrían papás y se irían en cuestión de días yo no quería emocionarme ni mencionarlo pero esperaba que el me quisiera llevar me avía caído bien y ya no quería seguir en ese lugar estaba nervioso pues el solo hablaba y reía platicando conmigo pero no me decía nada de adoptarme no sabía que era eso pero avía escuchado a un niño grande decir que es cuando tienes una filia feliz así que esperaba que el quisiera que yo formara parte de su familia no me avía olvidado de mi madre pero ya no creía que volvería por mi

—usted vino a adoptar a un niño?— tenía duda ya que el no me menciono nada y solo avía platicado conmigo si a mi no me quería adoptar me dolería pero más me dolería saber que por estar conmigo no encontró a algún otro niño que adoptar

—yo… yo avía venido a donar dinero a este orfanato— no entendía que quiso decir solo entendí que el no iba a adoptarme así que entristecí y baje mi mirada no quería que viera mis lágrimas

—pero hay un niño que se robo mi corazón— alcé mi mirada rápidamente me alegraba que por lo menos haya encontrado a alguien

—crees que deba adoptarlo?— pregunto y yo no tuve duda

—si… sin duda el tendría una familia y usted tendría a alguien más para amar además de su esposa ustedes le podrían dar una familia— el sonrió serrando los ojos, respiró profundo y me miró sus ojos brillaban más se veían hermosos verlos me llenaba de alegría no sabía por qué pero yo también estaba feliz

—tienes razón entonces si no te molesta le preguntaré si quiere ser mi hijo está bien?— yo lo mire y solo asentí las palabras no me salían se me estaba formando un nudo en la garganta me alegraba saber que el tendría un hijo al cuál amar pero me dolía que no fuera yo ya que en el tiempo que estábamos platicando le empezaba a tomar un poco de cariño el se avía portado muy bueno conmigo y nadie se avía preocupado por mi, quiso saber de mí, que me gustaba, que me asía feliz y pocas veces en mi pequeña vida avía sido feliz

Lo vi voltear asta quedar frente a mi me imaginé que se despedirá para ir a buscar al niño

—Dalton me ha gustado platicar contigo eres un niño muy bueno y mereces ser feliz, mereces que te amén y te den un hogar que tengas una familia que te pueda dar todo el amor que te mereces así que..—

Estaba apunto de llorar de tristeza sus palabras me estaban llegando en lo más profundo de mi ser solo de escucharlo empezaba a sollozar era una despedida dolorosa o eso creía

—te gustaría que te adoptará?— llore… Me sorprendió y no pude más llore de felicidad me lancé a sus brazos y le dije que si, pensé que adoptaría a otro niño pero era a mí y eso me lleno de felicidad por primera vez alguien me quería y me daría una familia una de verdad

Mi padre me devolvió el abrazo apretándome fuerte sentía que el no quería que me alejara y no lo aria.

Entramos juntos a la oficina de la prefecta y el lleno y firmo muchos papeles llegaron varios hombres que ahora se, eran los abogados de mi padre el quería llevarme ese mismo día con el yo le avía dicho que ya no quería está hay y el me ayudó

Después de unas horas salimos de ese lugar me llevaba en brazos a un carro con muchos hombres alrededor no entendía que pasaba cuando los Flash y las personas se nos querían acercar le intentaban hacer preguntas sobre mi, a mi padre a lo que el solo les respondió que yo era su hijo JOSHUA BIANCHI cuando estuvimos platicando yo le avía dicho que mi nombre no me gustaba y el me avía platicado que de tener un hijo el le pondría el nombre de su padre el hombre que más lo amo así que desde ese día mi nombre es Marón Joshua Bianchi Alcalá

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