LA TRAICIÓN DÉ MARIANO

En esa mañana Marina caminaba dé prisa pues estaba a punto de llegar tarde al trabajo y con paso firme y rápido pensó "- es tardísimo nuevamente voy a llegar tarde"- Marina era empleada en una cafetería en el centro de la ciudad.

Llego corriendo a la cafetería y con pasos torpes casi tropieza al entrar, ahí estaba ya Mimi su mejor amiga y compañera de trabajo y al verla le dice muy apurada"- Marina rápido qué no tarda en llegar el jefe y si té ve llegar tarde nuevamente sé molestará"-

"- Ya lo sé"- dijo Marina "- será la última vez que llegue tarde lo prometo"- "- Hay amiga siempre dices eso "- le contesta Mimi moviendo la cabeza.

Marina era una chica hermosa de tés morena una sonrisa inigualable sus ojos café, siempre estaban brillantes con una figura que muchas chicas podrían desear y que a pesar de lo que había pasado en su vida, siempre mantenía una bella sonrisa.

Atendía a los clientes con amabilidad y a pesar de siempre llegar tarde, era la favorita de don Emilio el dueño de la cafetería y más porque sabía lo dura qué había sido su vida.

Él celular de Marina sonó, Rin Rin, Marina al ver quien era rápido sé apresuró a contestar emocionada.

"- hola mi amor aún estoy en el trabajo y estoy ansiosa porque vendrás por mí"- dijo Marina con tremenda sonrisa, de repente Marina cambio su bella sonrisa y se mostró sería y con un tono más bajo, dijo con un poco de tristeza.

"- Está bien amor entonces te veré la próxima semana te amó cuídate adiós"- muy triste Marina siguió con su trabajo y Mimi al verla tan desanimada le hizo seña para qué sé acercará -" ¿qué te pasa porque té pones así quién te llamó?"-

Marina con tristeza, casi con las lágrimas brotando de sus ojos dijo muy sería y bajando la mirada "- es Mariano no va a poder venir a verme hasta la próxima semana y lo que me da tristeza es qué ya tiene algunos meses diciendo lo mismo, siempre está tratando de darme excusas para no venir y yo ya no sé qué pensar"-. Dijo Marina con dolor.

"Hay amiga ya té dije muchas veces que ese tipejo no té merece y creó qué no té valora lo maravillosa mujer qué eres"-.

"- Yo lo sé amiga pero.. Qué quieres qué haga lo amó y a pesar dé lo qué digas sé qué él me ama tanto como yo"-, exclama marina con una leve sonrisa.

"- Hay amiga estas ciega por él, espero que te dés cuenta lo patán y mentiroso qué es pará qué no sigas viviendo en un sueño y en promesas que él no té va cumplir"-.

"- Bueno vamos a seguir trabajando ya dejemos el asunto en paz "- le dice Marina muy apurada y dejándola casi con la palabra en la boca.

Marina.. Caminaba muy pensativa dé regresó a casa y decidió pasar por un hermoso parque, jamás hacia paradas así y nunca le había dado por desviarse del trayecto a casa.

Pues sabía cómo se ponía su madre doña Clemencia, qué era demasiado dura con Marina.

En un momento Marina respiraba aire tan fuerte cómo si tuviera tiempo sin hacerlo. Sé empezaba a sentir mejor con el ambiente, los árboles, el canto de las diferentes aves la estaban verdaderamente relajando, tenía los ojos cerrados y al abrirlos sus ojos se abrieron cómo jamás lo había hecho.

Su corazón empezó a latir cómo nunca y su pulsó se aceleró tanto qué sintió qué sé le iban las fuerzas. Sintió qué sus piernas no la sostenían, poco a poco sus ojos sé llenaron de lágrimas y sin más rodaron por sus mejillas sin poder contenerlas... lo qué veían sus ojos era demasiado doloroso no podía soportarlo.

Con un nudo en la garganta grito lo más qué pudo "-

Marianoooo"-

Mariano.. Sobresaltado se dio la vuelta y se dio cuenta de que había sido descubierto,"- ma.. ma.. Marina qué haces aquí "- dijo Mariano tartamudeando y sin saber qué hacer y con cara de asombro.

"- Quién es ella Mariano y porque está así -" exclamó Martha la mujer con la que se estaba besando.

Mariano, "- ella es una vieja amiga no té preocupes"- dijo Mariano muy seguro y se apresuró a darle un beso a Martha

Marina estaba devastada pues en un abrir y cerrar de ojos su mundo sé derrumbaba.. Y era un dolor qué jamás había sentido, no se comparaba con lo que había vivido con su madre Clemencia. Marina deberás se miraba el dolor por él qué estaba pasando lo veía y aún pensó que estaba soñando se dio un ligero pellizco, pero dolió y supo que era la realidad, y mirando con resentimiento a Mariano dijo con las fuerzas que le quedaban "- ¿porque Mariano si yo té amaba”- dijo Marina con sus mejillas empapadas de lágrimas.

Mariano sé empezaba a incomodar pues Martha veía todo sin decir nada y se apresuro a decir con un leve suspiro "-.

Martha y yo nos vamos a casar estoy enamorado de ella y pronto seremos marido y mujer"- le dijo Mariano muy seguro dé lo que decía y agarrando fuerte la mano dé Martha. Marina no pudo soportar más y echó a correr entre sollozos.

Era demasiado el dolor qué sentía, su corazón estaba destrozado sentía cómo si tuviera un cuchillo incrustado en su pecho y sin poder sacarlo.

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