capitulo 4

capítulo 4:

"primer paso para no ser un perdedor en la sociedad"dijo Tanya mientras se encontraba delante de una pizarra.

su pequeño tamaño de una loli hacía que la escena fuera cómica, aunque no era recomendable quedar engañado por lo dulce que parecía la pequeña loli, ya que ella era una sociópata,asesina,manipuladora y tal vez una persona que nadie quisiera de enemiga.

"debes pisotear a cada persona, nadie debe ser mejor que tu excepto yo que soy tu igual"hablo Tanya señalando con un palo la pizarra.

"bien…tengo que pisotear y despreciar a todas las personas porque soy mejor que todos…¿estoy en lo correcto?"dijo Hiro según lo que había entendido.

"si…la segunda cosa que debes saber sobre la sociedad, todos son unos malditos manipuladores…así que si una persona se acerca hacia ti con una intención pura es que tienen otras intenciones…todos excepto yo que soy tu maestra para entender el mundo real"dijo Tanya.

"tengo que ser precavido con todas las personas especialmente con las personas que parecen muy amables…"anotó Hiro en su libreta.

"por último y más importante es que debes saber cómo manipular a las masas, tu eres una persona por encima de los demás así que debes de usar a otras personas para que te sirvan y hagan lo que quieres"dijo Tanya.

"lo tengo…"volvió a decir Hiro mientras escribía nuevamente en su libreta.

"me confundí, lo más importante es que …¡debes deshacerte de esta odiosa libreta!" grito Tanya mientras señalaba a la libreta que le había sacado de quicio durante toda la sesión de aprendizaje.

"pero esta libreta guarda todo mi conocimiento para no olvidarme con el tiempo en este lugar"dijo Hiro triste mientras escondía su libreta.

"ya no vas a pasar solo en este lugar…además me dijiste que esta es la primera vez que alguien viene a este lugar, así que significa que muy pronto podrás salir…así que olvídate de esa estúpida libreta que te vuelve patético"dijo Tanya de una forma cruel y concisa.

"está bien…"dijo Hiro como un niño mientras dejaba su libreta en un estante alto para que Tanya no lo destruya por su diminuto tamaño.

"¡lo hiciste para burlarte de mi!" grito enojada tanya al ver el estante el cual no podría alcanzar en su vida.

"me dijiste que debo pisotear a todos excepto a ti, así que como eres mi igual y tu te burlas de mí, eso significa que también puedo humillarte por  tu baja estatura"dijo Hiro dando una sonrisa de superioridad que copio de Tanya.

"creo que cometí un grave problema"se dijo Tanya al ver lo rápido que aprendía hiro.

"él era un lienzo en blanco al principio…¿cómo es que aprendió a formar una personalidad tan rápido?" se dijo Tanya mientras miraba a Hiro.

"por preguntar…¿cual es el IQ que tienes?" preguntó Tanya.

"¿IQ? ¿Qué es eso?"respondió confundido Hiro.

"creo que vamos a tener que hacerte una prueba para medir tu coeficiente intelectual…para nuestra suerte aprendí algunas cosas de un psicólogo en mi anterior vida, así que se como tomar pruebas para medir el coeficiente intelectual"hablo tanya mientras levantaba el pecho plano con orgullo.

"creo que no deberías tener tanto orgullo de ese pecho plano que tienes"dijo con burla hiro.

"¡Ya basta de aprender y copiar mi forma de ser!" grito frustrada Tanya.

"ademas…aun soy una niña así que puedo crecer…"susurro la ultima parte Tanya.

*horas después*

"¡qué es esto! ¡cómo puede ser posible que no se pueda medir bien tu IQ!"grito de frustración Tanya.

*suspiro*

"cálmate tanya…al menos podemos decir que el fenómeno que tenemos delante de nosotros tiene más de 220 de IQ así para sentir que no explota nuestra racionalidad"se dijo Tanya tratando de calmarse.

hiro había resuelto todas las pruebas con mera suposición,Tanya trató de vengarse de hiro soltando algunos problemas de matemática también, pero en base a algunos objetos que tuvo, hiro volvió a inventar la matemática desde 0 en menos de 1 hora, algo completamente loco sabiendo que hiro se había olvidado completamente de las matemáticas por no haberlas usado por quien sabe cuanto tiempo que viendo el nivel de pérdida de conocimiento que tenía hiro no era menos de 1000 años, algo completamente loco.

"¿seguro que no te acuerdas nada?"preguntó tanya.

"no me acuerdo nada de mi vida pasada más que los nombres de mis padre que tengo apuntado en mi libreta y de las 2 personas que me quiero vengar"dijo hiro mientras mostraba su libreta en donde se encontraba sus recetas y algunas invenciones de él junto a su diario que llevaba la cuenta de el tiempo que pasó en el restaurante al menos el que anotó antes de aburrirse de llevar la cuenta.

"¡no te dije que votaras esa cosa!"Gritó de frustración Tanya al ver como Hiro había recuperado su libreta y la tenía a la mano.

"lo siento…pero esta libreta tiene muchos recuerdos y es muy valiosa para mi, así que no me voy a deshacer de mi libreta…"hablo Hiro llevando su libreta al bolsillo.

Hiro había tratado de dejar su libreta, pero así como algunas personas tienen objetos importantes en su vida, objetos que si lo pierden los vuelven inseguros o los hacen sentir desnudos, Hiro se sentía desnudo e inseguro sin sentir su libreta a la mano.

"bien, al parecer no tendré voz ni voto en tu decisión, también ya lo tengo decidido…a partir de mañana vendré a probar la comida de tu restaurante y también te traeré mas libros para que leas y asi aprendas para que me ayudes en mis deberes como suboficial"dijo sin ninguna vergüenza Tanya por tratar de usar a hiro como un trabajador sin salario debajo de su mando.

"claro…¿por qué no?...Me encuentro muy aburrido en este lugar y estaría bien tener algunas cosas para pasar el tiempo"dijo Hiro dando una sonrisa.

"Entonces me voy, tengo que volver o me declararán como muerta en el campo de batalla"se despidió Tanya.

"otra vez solo…"se dijo Hiro mientras miraba como la única persona que había conocido y de quien se había hecho amigo marcharse a su mundo.

La compañía para él era actualmente una droga, una vez que la probó ya no podía estar sin ella y en este momento Hiro estaba sufriendo por eso al sentir como el lugar parecía aplastarlo.

*sonido*

como un padre cuidando y mimando a su hijo al parecer el restaurante oyó la tristeza de Hiro cuando la puerta de la entrada al restaurante se abrió dejando ver a una silueta.

"¡otra personas!" grito feliz Hiro mientras se levantaba rápidamente.

"¡un gusto conocerte y bienvenido a mi restaurante!" dijo feliz Hiro mostrando una gran sonrisa.

"¡por favor ayúdame!" gritó la otra persona mientras señalaba a su esposa al otro lado de la puerta que se encontraba en cama.

la chica al parecer estaba en sus últimos momentos de vida.

la tristeza y desesperación se podía ver en el rostro de la persona la cual no podía contener sus lágrimas mientras se arrodillaba ante quien creía que era dios.

*momentos antes*

hoy supuestamente era el mejor momento de la vida de Tomoya, porque era el día en el que su esposa daría a luz a la primera hija de la pareja.

pero como una maldición que iba sobre la pareja, volvió a pasar el mismo suceso que una vez casi se lleva la vida de su amada nagisa, la cual en su niñez una vez se enfermó en un día de invierno por su débil condición física.

y ahora lo que los padres de nagisa y el mismo tomoya había temido había pasado, nagisa iba a morir luego de dar a luz a su primera hija, siendo lo peor de todo que era el peor dia de invierno posible, complicando más el parto disminuyendo la posibilidad de supervivencia de la madre a 0.

la muerte de Nagisa era 100% posible a menos que pasara un milagro.

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