Los días pasaron volando, ni cuenta me di por estar pensando en todos los recaudos para la inscripción, el viaje ya que eran 5 horas de recorrido, la búsqueda de residencia, la mudanza y todo el resto.
Por fin logré conseguir un pequeño apartamento de estudio relativamente cerca de la universidad y con suficiente espacio para mis cosas, al entrar tenía una cocina de tope con su alacena, lavaplatos, una nevera, un mesón que separaba la cocina de la pequeña sala que tenía puertas de vidrios hacia un pequeño balcón, el baño se encontraba en el pasillo era acojedor, al otro lado del pasillo un cuarto pequeño aunque lo suficiente para la cama matrimonial, su clóset decente, una mesa de noche y otra de estudio, el baño interno y por último al fondo del pasillo estaba un pequeño cuarto donde se encontraba lavandero. Era agradable estar en este sitio, los colores eran claros y llenaban de vida, decorado a mi gusto para sentirme más cómoda y empezar con grandes carga de energía la universidad.
Después de cuatros días agitados me encontraba totalmente exausta, por fin iba a iniciar las clases, al acostarme planifico mi mañana para que todo salga bien y evitar cualquier contratiempo; despertar al sonar la alarma a las 5:00 de la mañana, levantarme, hacer un desayuno fácil, preparar café y unos panes tostados con tortilla, bañarme y colocarme un conjunto algo "guay" para dar buena impresión, hacerme algún peinado y salir tiempo para tomar el bus de las 6:30 y así llegar a la universidad puntual.
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Carlota: ¿Qué pasa? Algo suena - digo y con lo ojos entreabiertos miro el teléfono.
Sonaba la alarma del teléfono por cuarta vez eran las 5:40
Carlota: Mierda... Voy tarde, voy tarde - grito tratando de levantarme de la cama el cuál me termino cayendo enredada con la sábana.
No conseguía las pantuflas, voy a la cocina y preparar el desayuno para bañarme, colocó la cafetera a calentar, pongo a tostar los panes y en un sartén la tortilla a fuego lento, mientras tanto saco ponquesitos y jugo de los estantes para llevar de merienda. Salgo corriendo al baño para asearme, el agua estaba más fría de lo común.
Carlota: Mi alma! con este baño si me terminó de despertar
Voy al clóset y busco el outfit que había elegido para este momento, algo casual un suéter tejido rosa claro, pantalón claro alto y unos vans rosas que se asemejan al suéter; me aplico maquillaje y peino haciéndome una media cola alta y dejar el resto del cabello suelto con ondas.
Carlota: Todo va fluyendo - pienso a mis adentros.
Comenzó a oler a quemado, recuerdo que deje los panes y la tortilla, corro a la cocina y el café estaba listo, la tortilla le faltaba un poco, pero veo los panes y estaban totalmente rostizados, no importaba tocará pan sin tostar, me siento a disfrutar el desastre de desayuno.
Veo la hora y eran las 6:20 buen tiempo para salir. La parada que estaba a tres cuadras del apartamento no esperé mucho el bus. Ya casi llegando me atacaron lo nervios, empecé a sudar frío. Mi primer día de universitaria.
Camino en busca de la dirección que me indicaron al inscribirme, veo unas chicas en un banquito.
Carlota: Buen día, disculpa ¿Sabes dónde queda está dirección - muestro el papel donde estaba anotada.
Torre "D" pasillo 4 ; aula "K"
Otro: Estamos en la torre "C" camina por este pasillo al fondo, pasas la cafetería y sigues a otro lado, ahí te vas a encontrar en la Torre "D", cuentas al cuarto pasillo del lado derecho y ahí está el aula que buscas.
Carlota: ¡Gracias!
Otro: ¡A la orden!
Camino siguiendo las indicaciones que me dieron las chicas, miro la hora y la eran las 6:58 tenía que encontrarlo antes de la 7 voy acelerando el paso, casi corriendo.
Al llegar el pasillo escucho cerrarse la puerta del aula, corro y tocó tres veces. Acción inmediata abren la puerta. Una señora trigueña, de cabello Lazio oscuro, de baja estatura con lentes y una cara no agradable.
Prof. Maiden: ¿Dígame?
Carlota: Buenos días, profesora ¿Puedo pasar?
Prof. Maiden: Llegó dos minutos tarde, por ser su primer día adelante, pase pero espero que no se repita. En mi clase debe ser puntual, si quiere estar aquí debe estar a la hora o antes si es posible - dice en voz alta, voltea y mira al resto y agrega - esto va con todos - hace seña para que entre.
Carlota: Disculpe, no sé volverá a repetir; estaba un poco perdida - le aclaro mientras paso
Toma asiento en un puesto de adelante que estaba vacío, me acomodo y saco mi libreta, pero estaba totalmente nerviosa, ésta señora si que daba miedo.
Prof. Maiden: Buenos días, mi nombre es Maiden Orellana y seré su profesora de histología por un año donde tendremos muchas actividades. Necesito interacción e interés de su parte, la clase fluirá a medida que vayamos discutiendo en grupo...
Dijo demasiadas cosas que me perdí, me inunde en el pensamiento. A lo que me interrumpen
Prof. Maiden: Señorita, preséntese ¡Por favor!
Carlota: Buenos días, mi nombre es Carlota Alejandra Torres Andrade, tengo 18 año de edad, desde pequeña tuve afinidad por los animales, me gusta los caballos y ha sido un trabajo duro para estar aquí y poder alcanzar mi sueño.
Todos: Bienvenida, Carlota.
Sucesivamente se fueron presentando uno por uno, ya casi terminaba la clase, la profesora da la asignación para la próxima clase y pide conformar grupos de estudios de 3 personas y s retira.
Una chica se me acerca, delgada, caucásica, cabello oscuro, liso, ojos azules claros, un estilo delicado y de baja estatura, se presenta muy amablemente.
Graciela: !Hola! Mi nombre es Graciela Lancaster- dice extendiendo su mano hacia mi.
Carlota: ¡Hola, Graciela! Mucho gusto - respondo al saludo extendiendo mi mano - Soy Carlota Torres.
Graciela: Carlota, la profesora acaba de pedir grupos de estudio ¿Quisieras hacer grupo conmigo? Claro está si aún no tienes grupo.
Carlota: Aún no tengo grupo, me parece bien.
Graciela: ¡Perfecto! Toma mi número para que estemos en contacto.
Saco mi teléfono y anoto su número al que procedió a dictar, luego llamo a su teléfono para que ella guarde mi número.
Carlota: Ese es mi número, para que lo guarde.
Graciela: Me parece bien ¿Que harás? Tenemos 20 minutos de descanso ¿Quieres ir a la cafetería conmigo un momento? Aún no desayuno. - me mira y hace un gesto como horrorizada.
Carlota: Esta bien ¡Vamos!
Caminamos a la cafetería y nos sentamos a unas mesas que están un poco retiradas del resto, ya que era incómodo todos nos veían como bichos raros por ser nuevas en la universidad.
Graciela: Cuéntame de ti, Carlota. - dice mientras comienza a desayunar.
Carlota: No hay mucho que contar. Soy foránea, estoy en un apartamento residencial relativamente cerca de aquí, en casa vivo con mi mamá, papá y hermana, termine hace poco el colegio, me gusta trotar y ahorita estoy tratando de adaptarme a este nuevo lugar y rutina ¿Y tú?
Graciela: Soy hija única, mis padres están separados, vivo con mi mamá, también soy foránea, por el momento vivo en un hotel mientras consigo algo cómodo para vivir. Desde joven trabajo en la empresa de mis padres, una constructora reconocida.
Carlota: ¿Por qué decidiste estudiar esto si no se relaciona en nada?
Graciela: Demasiado, pero no es lo mío, por trabajar ahí se que no me gusta, quiero algo diferente. Mi madre no estaba muy de acuerdo cuando decidí esta profesión pero es lo que quiero y debe respetar mi decisión.
José: Disculpe que las interrumpa, señoritas ¡Mucho gusto!- dice extendiendo su mano hacia nosotras- Mi Nombre es José Maldonado, soy su compañero de clases, las vi en el salón y quería preguntarles ¿Tienen grupo de estudio?
Graciela: Un gusto, José. - fijando su visto má en él- Sí, nosotras estamos juntas ¿Por qué?
José: ¿Podría estar con ustedes en el grupo? Es que no consigo con quién y se ven que son personas agradables.
Carlota: ¡Gracias, José! Sí, puede ser - miro a Graciela y hago ojitos esperando que ella responda también.
Graciela: Sí, por mi no hay inconveniente sólo que tienes que poner de tu parte y estudiar.
José: ¡Gracias, chicas! No les causare ningún problema.
Se levanta y me extiende la mano para despedirse, luego se despide de Graciela y dándole un beso en la mejilla. Ambas quedamos perplejos porque no entendimos lo que acababa de suceder.
José era un chico muy simpático, ojos azules claros intimidantes, cabello castaño corto con un estilo un poco despeinado pero le lucía, realmente era atractivo.
Seguimos hablando hasta que se hizo la hora para ir a la otra clase, fuimos y nos sentamos juntas. Ella era un chica agradable y veía que íbamos hacer una bonita amistad. Pasamos el resto de las clases, comidas y descanso hasta la tarde que vimos nuestra última clase.
Graciela: ¡Vamos Carlota!
Carlota: ¿Para dónde?
Graciela: A comer un helado y luego te llevo a tu residencia - dice haciendo pucheros - así aprovechamos y conocemos la ciudad.
Carlota: ¡Vamos!
Estuvimos en el centro comercial, hablando tonterías, comer helado y compartiendo, luego me dejó en mi residencia. Al estar ahí me sentía un poco sola pero al pasar del tiempo sé que me adaptaría a ese estilo de vida, esta nueva etapa.
Los días fueron pasando y fueron casi iguales, iba a clases, compartir con mis Graciela y José aveces salíamos a comer, tomar café y distraernos. Estaba haciendo mis amistades en la universidad
¡Grandioso!
Poco podía hablar bien Francis, no supe mucho de ella entre la mudanza, las clases, adaptarme a este nuevo lugar al igual ella y sus ocupaciones no le he podido contar nada de este nuevo sitio, me comunicaba con mi familia casi todos los días, para contarle lo sucedido, aunque aveces sentía que sonaban extraños, decían estar bien, sabía que algo andaba mal, pero faltaba mucho para regresar a casa.
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