Capítulo 𝟐

─Señorita Colin.

Al culminar la reunión, Colín tenía varios pendientes acumulados en su oficina. Razón por la que al terminar se despidió apropiadamente de tlos presentes para regresar a su oficina, poco consiente de la figura que la seguía por los pasillos hasta que su propia presencia ya no podía pasar desapercibida, por alguna razón el chico de antes que no paraba de mirarla la había seguido sin ninguna razón aparente.

─¿Puedo ayudarlo en alguna cosa señor Mawers?

─Verá señorita Colin, no soy muy bueno prestando atención ¿Podría explicarme el acuerdo de alianza más a fondo?

─No veo porque no─ Suspiro, no muy convencida pero aún así, no podía permitirse ser hostil con un nuevo socio ─Adelante, entremos a la oficina

Y así ambos, uno al lado del otro sin decir nada pero con una incomodidad intangible entre ambos. El recorrido no tardó demaciado, pronto ya se encontraban en la oficina de Colín donde está le ofreció sentarse mientras iba a buscar una copia del documento que minutos antes le habían entregado con intención de revisarlo minuciosamente antes de firmarlo.

─Bueno, podría decirme. ¿Qué es lo que no entiende exactamente?

─No entiendo como es tan hermosa─ Murmuro casi para si mismo

─¿Disculpe?

─No me quedo muy clara la parte de venir a la empresa. ¿Puedo venir?

─En el contrato aclara que está en todo derecho de intervenir, aceptar y dar sugerencia de todos los proyectos de la empresa, para ser breve, sí. Tiene total libertad de entrar a esta empresa

─Eso significa que puedo venir a verla ─Soltó, en un tono demaciado claro cómo para no entender a lo que se refería ─Claramente, por trabajo

─Si, a eso mismo me refiero.

─ Será todo un placer trabajar con una mujer tan hermosa

No era tonta. Lo supo desde el primer momento. Él no estaba ahí por una simple indicación del contrato y sus pautas. Él quería algo más.

─Colin ¿tiene algún plan para el almuerzo?

─Por supuesto, almorzar.

─ Casualmente iré en un rato, que le parece si la invito a almo─ Pero antes de poder terminar Colin dio un suspiro evidentemente molesta. Odiaba eso, Odiaba por esa clara razón a todos los hombres como él.

—Señor Mawers, por si no lo ha notado, soy una mujer sumamente profesional. Le pido que deje de perder su tiempo, otra cosa para usted. Soy la señorita Colin, no Colin, usted y yo no somos lo suficientemente cercanos para ser tan informales. Ahora que somos socios y voy a tener que verlo, quiero que eso le quede claro. Si no tiene nada más que entender le pido se vaya y me deje hacer mi trabajo

─Si, lamentó mucho mi atrevimiento

Anton se retiró antes de poder decir algo más, era evidente que su intención había quedado al descubierto. Su naturaleza era galante y ese rechazo elegante le había dado en su ego. Y eso, era algo que no todos lograban en el gran Anton Mawers.

Más tarde. En medio de un bar sofisticado de la ciudad donde la herencia influyente de la sociedad se reunía a sus fiestas desenfrenadas. Un joven refunduñaba evidentemente enojado. Respiraba por la herida, era la primera mujer que rechazaba tras unas cuantas palabras. ¿Acaso ella no sabía quien era el?, si quería, podía acabar con su empresa en un abrir y cerrar de ojos

—¿Entonces?

—Entonces ¿qué?— Respondió en un tono que lo dejó al descubierto

—¿Por qué estamos aquí?

─Estamos aquí para divertirnos, eso es todo

─Lo habitual, pero normalmente no respondes con ocho piedras en la mano cuando te pregunto algo hombre. Así que ya, anda, dime que es eso que te molesta

─¿Y tu que vas a saber? ¿Acaso no puedo estar molesto?

—Habla, no te daré ninguna otra oportunidad para contarme tus desgracias. Este es un privilegio que te doy sólo por hoy.

─Hoy fuí a esa empresa de quinta de la que todos hablan, Grim o como se llame. A lo que voy es, ahí conocí a esta mujer llamada Colín que además de hermosa es toda una aguafiestas. ¡Me rechazó en cuestión de segundos! ¿Puedes creerlo?

—¿Una chica te rechazó?—

Luca se encontró confundido. Conocía a su amigo desde que ambos eran unos mocosos y desde jardín de niños, las chicas siempre se lanzaban a él, ya fuese por su atractivo o por su apellido. Pero esa noticia le causaba burla, ahora entendía porque su amigo se comportaba tan inmaduro ante tal miniedad. Nunca había sido rechazado y eso seguramente era un golpe duro.

─¿Verdad que es muy estúpida al rechazarme?

─Yo diría que es muy interesante toparse con ese tipo de mujer. Si tú cara bonita y dinero no la deslumbraron, ¿que cosa sería lo que sí?

─Esa chica lo único que tiene es un cuerpo y una cara linda eso es lo único interesante en ella, porqué del resto tiene una maldita actitud.

─Entonces apartando que te rechazo ¿admite que es bonita?

─Malditamente hermosa─ Sonrió inconscientemente.

— Si esa es la situación, entonces estaba fuera de ti alcance

─¿Que dijiste?

─Hermano esa chica es demasiado bonita y si es como dices, la que levantó a 'Grees model' de la quiebra entonces también es inteligente. No me lo tomes a mal, pero lo tuyo no son mujeres inteligentes y cero emocionales. Lo que te gusta son chicas bonitas sin cerebro, mejor ríndete. Busca otra. Porque esa mujer, es tipo de mujer como tú hermana. No son de una noche, son para una vida.

─No metas a Mía en esto.

—Solo te doy un claro ejemplo. No te gustaría que alguien solo quiera jugar con ella ¿verdad?, entonces no te metas con esa mujer. Tu karma llegará cuando seas padre y tengas una hija.

—Primero, nada está fuera de mi alcance. Segundo, Mía es un tipo de mujer diferente. Y tercero, pero más importante, Yo jamás tendré un hijo.

Lucas soltó una risa burlona ante las palabras de su amigo. Sabía que nunca ganaría contra él en una discusión.

—Tú ganas. Entonces ve y enamórala, intenta meterla a tu cama y me a burlarme de ti cuando tengas una denuncia por acoso

—¿Quieres apostar?

—Eso es poco ético. Somos caballeros, ¿Qué hacemos apostando sobre damas?

—No te hagas el idiota, apostemos al beneficio del otro. Si yo gano y esa mujer cae rendida a mis pies. Quiero la casa de la playa de tu familia. Y más importante, te casas con mi hermana.

Al escucharlo el contrario tomó un trago de golpe desviándo su mirada. Sabía que la hermana de su mejor amigo estaba enamorada de él, pero ante sus ojos era una niña. La hermana mejor de alguien que era casi su hermana y aunque su coherencia le advertía no hacerlo. Su competitividad tenía más poder sobre él.

—Me parece un buen trato. Si yo gano me das tu casa de campo y tendrás que vivir con el hecho de que no eres un Casanova.

Ambos sonrieron el complicidad, un juego había iniciado y las consecuencias de este serían irreversibles.. Porque a veces, el amor no es algo que planeamos, es algo que nace de manera inocente.

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