El primer enemigo caído

Ese mismo día un sirviente de la Emperatriz fue a la residencia de la concubina Lucía madre de Martín, este le dijo lo que había pasdo después de la comida, que el príncipe estaba hablando sobre el atuendo que llevaría, se sintió tan humillada que fue directo al palacio del emperador hacia el área donde estaba la alcoba de Martín, antes de llegar se lo encontró en el camino, este no hizo reverencia ni la saludo pues para el ella era una mujer desagradable.

Ahora que lo recuerda en su vida pasada su madre iba a verlo muy seguido y en una ocasión le llevó un té como forma de disculpa por los malos entendidos y él lo aceptó después de ahí empezó a sentirse poco a poco más débil, si sus sospechas son siertas es obvio que ella ayudó a terminar con su vida

-¿Que le trae por aquí concubina?

-¿como es que te atrevez a pedir ayuda a la emperatriz para que te ayude con el atuendo? yo soy tu madre y las tradiciones dicen que soy yo quien te debe ayudar el día que cumples la mayoria de edad

- si lo se, pero soy huérfano, por eso le he pedido ayuda a la emperatriz, sabe me debo ir no debo perder tiempo con una concubina debo ver a la emperatriz ella si es alguien importante

Sin más se fue sabe que es riesgoso provocar su ira pero debe hacerlo así la expondrá y podrá deshacerse de ella, está sería la primera a la que hará llegar su venganza.

Un día antes del baile como el príncipe lo había prometido le dijo a su padre, que haceptaba llevara el apellido de la Emperatriz pues ha pasado varios días con ella y era muy agradable y lo trataba mejor que su propia madre

-me alegra que se lleven bien, aun que ella parece que es muy amable puede ser muy severa y dura

-no te preocupes padre no haré nada para que ella se arrepienta de esto

-no me arrepentire eres un buen muchacho y me gustaría que me a partir de hoy me digas madre, llevaras mi apellido es lo más conveniente

-como usted diga madre,

La Emperatriz lo abrazo pues se sentía tan bien que le diran así, él por su lado siempre quiso el amor de una madre que sintió tan cálido el abrazo que no dudo en abrazarla más fuerte la emperatriz se dio cuenta así que no hizo nada y también lo abrazo con fuerza. Al soltarse del abrazo, lo vio en el traje que ella le había ayudado a escoger

-te vez muy bien, sabes me recuerdas a tu padre él era muy apuesto igual que tu, espero hoy encuentres una bella joven y así seas feliz con ella

-ahora no estoy interesado en mujeres prefiero seguir entrenando debo ser el mejor guerrero que el reino allá tenido madre

-¿QUE? ¿CÓMO TE ATREVEZ A LLAMAR MADRE A LA EMPERATRIZ? Esa mujer inservible para enjedrar no es tu madre, yo soy tu madre

-Concubina Lucía no le permito que le hable así a mi madre, ayer ella me ha dado su apellido que es más honroso que el de una concubina que desprecia a su hijo

-¿cómo te atrevez insolente? Yo tenía mejores planes para ti, podrías llegar a ser el rey pero prefieres ser un simple soldado, mi hijo no puede ser uno de esos mugrosos

-concubina el príncipe le ha dicho que yo soy su madre ¿quien se cree usted que es para desafiar la autoridad del emperador? él ha desidido que él sea mi hijo y claro que yo estoy de acuerdo con eso

-mujerzuela primero me robas el amor del emperador y ahora te atrevez a quitarme a mi hijo te juro que te mataré te haré pagar por todo

-¿Qué ha dicho concubina?

El emperador fue a ver como estaba su hijo antes del baile quería decirle que tenía una sorpresa para el pero no esperaba escuchar como amenazaba Lucía a su amada

-em-perador no es lo que usted piensa...

-¿cree que no se lo que escuche? acaba de amenazar a mi emperatriz y cree que se puede salir con la suya

-padre creo que es mejor que la encierre es un peligro para mi madre que está concubina ande suelta, ahora que la ha amenazado, no hay que correr riesgos,

-¿Como te atrevez? Hijo insolente

El emperador hizo caso al consejo de su hijo y mandó a la concubina a una selda ahí estaría hasta que el considere cual será el castigo pues fue una amenaza muy seria la que hizo. Martín solo sonrió de lado al ver como los guardias se llevaban a esa mujer.

-madre lamento que esa mujer te allá causado daño con sus palabras pero yo no dejaré que nadie te haga daño

Ella solo sonrió aun que le dolían las palabras ella estaba feliz de que él la llamara madre y la quisiera protejer ella ya lo estaba queriendo como aun verdadero hijo pues él se daba a querer fácilmente.

Llegó la hora de que comenzará el baile, el príncipe se fue a la puerta a recibir a los invitados, fueron llegando todos, por lo que recuerda el carruaje de Lizbeth y su padre el archiduque Ben Lauren, llegó un poco tarde y eso hizo que él les prestará más atención pues al llegar tarde llamó la atención de todos y él no pudo avistar sentirse atraído por la joven bella que había llegado.

Pero ahora no le prestaría atención así que se retiro de la puerta y espero a que llegara para comenzar su juego, ahora que sabe que pasara no caerá de nuevo en sus trucos. Paso más o menos una hora desde que el baile empezó y si mal no recuerda estan apunto de llegar y así pasó

-valla ¿porque no me sorprende?

-¿de que hablas hijo?

- oh! madre hablo del archiduque creo que llego tarde para llamar la atención o usted no lo cree así

- ahora que lo dices ese hombre siempre me resulto un poco desagradable y su hija cada que viene a verme solo habla de si misma es algo tedioso tener que tratar con ella

El archiduque Lauren se presentó junto a su hija frente al príncipe y este solo le hecha un ligero vistazo pues estaba comiendo un trozo de torta de cumpleaños que su nana le hizo especialmente para el.

Miestras la ve tiene el seño fruncido pues ella ahora se ve como una cualquiera no sabe porque no lo noto antes ahora solo le da asco estar cerca de ella.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***