— Ah~, Ngh- Ma-más lento obito~ — Gemía el rubio debajo de peli-negro el cual entraba y salía salvajemente de su interior.
Obito solo gruñó en respuesta, Y dando a señal que ya había terminado, saliendo del interior del rubio y quitándose el condon para tirarlo.
El rubio solo miro esta acción sin decir nada, se acomodó bien en la cama mientras veía como el mayor se empezaba a cambiar y prendía un cigarro.
— Ya te vas? — Preguntó naruto un poco desilusionado, pensó que el mayor se quedaría con el un rato, Como lo solía hacer antes. el azabache solo respondió un seco "si", sin voltearlo a ver y saliendo de la habitación.
El rubio se sentía Usado.
[…]
Por otro lado se encontraba óbito, llegando a un club nocturno que frecuentaba últimamente, solo por una razón, Rin.
Ahí se encontraba, sentado en una esquina, viendo los movimientos de la Peli-castaña, de un lado a otro con bebidas y regalando sonrisas por aquí y por allá, sonrisas que el uchiha egoístamente quería que le pertenecieran.
Parecía un perro, un perro que esperaba por ella a la hora de salida, Estando tras de ella a pesar de los años y las veces que ella lo ha rechazado.
— Hola óbito — Saludó la castaña sonriéndole— Ya te he dicho que no es necesario que vengas por mi todos los días, se cuidarme y puedo irme sola—.
— Hola rin, jaja, ya te he dicho que yo vengo por ti, porque me preocupas— Dijo mientras le sonreía mirándola a los ojos— y quiero que estés bien—.
la castaña sonreía negando con la cabeza, Óbito nunca cambiaría.
llegaron al departamento de la Nohara, esta invitó a pasar al uchiha ofreciéndole un vaso de agua...
— Sabes.. — habló el peli-negro recibiendo la atención de la chica— No he podido dejar de pensar en ti, se que es algo tonto, pero te sigo amando como cuando éramos niños— Mirando a los ojos de la castaña, la cual se encontraba sonrojada y un poco sorprendida, aprovechó y se acercó a ella, la agarró del cachete y le dio un beso en los labios— Te amo rin.—
la castaña aún sorprendida reaccionó y volvió a besar al uchiha, el cual respondió gustoso y pasaron a lo íntimo, dando como resultado los dos abrazos sin ropa, en la cama de la castaña.
Óbito estaba que no se la creía, hasta se pellizcó un poco el cachete, rin lo vio y no pudo evitar reír un poco, El uchiha al verla reír, hizo un puchero en el cual la castaña plantó un besito, el cual el uchiha intensificó, cuando se separaron se abrazaron y durmieron, parecían una pareja enamorada.
Por su parte, rubio se encontraba triste, pensado el por que de los comportamientos de su pareja, se sentía mal, hasta el momento nunca a hecho algo mal, ahora solo se ven para tener sexo, ya no le dice que lo ama, ya casi no se ven, ya no le sonríe como antes, Ya no lo ama como antes. Tiene que estar rogando para verse y siempre que se ven, el peli negro lo trata algo mal, siente feo, muy feo, no le ha dado razones para que lo trate así.
Desde la última vez que se habían visto ya había pasado una semana, semana en la cual el peli-negro no se había contactado con el, Vaya, ya ni sabía si estaba vivo o muerto!. Toda esta situación se la contó a su amigo de confianza, Kakashi hatake, el cual solo lo escuchaba y de vez en cuando le daba uno que otro consejo, aunque el desde un principio nunca le gustó la relación que tenía con el uchiha, no por el echo de que tenía cierta rivalidad, si no por que el sabía los sentimientos del Uchiha por la Nohara, nunca se lo dijo al rubio y se siente culpable por ello.
El Uzumaki y el Hatake se encontraban en departamento del primero, Ante la situación el hatake llevaba desde un día antes ahí, no era la primera vez que se quedaba con el rubio, así que ya tenía algo de ropa en el departamento del rubio, y también tenía llaves de repuesto, etc.
El Hatake se encontraba haciendo el desayuno, con una camisa de resaque y unos boxer algo holgados que parecía shorts, el rubio se encontraba despertando, un poco despeinado con una camisa holgada y unos boxer.
— Esos boxer de anciano que Jajaja— Dijo el rubio entrando a la cocina y burlándose del peli-plata
— Shh, te dan envidia por que tú no tienes unos así— Respondió el Hatake dejando un plato enfrente del rubio
— JAJAJAJA, Nada que ver de ech-
Ding dong
—Eh? Estás esperando a alguien?— Preguntó el Hatake
— No que yo recuerde— Respondió el Uzumaki
Ding dong, Ding dong
—Ve a abrir, estás más cerca de la puerta— Dijo el rubio mientras que el Mayor se dirigía de mala gana hacia la puerta y la abrió.
— Naruto lo siento, estuve muy ocupado esta semana, perdonaa— El uchiha se encontraba en la puerta con un ramo de flores viendo el piso, cuando levantó la miraba se encontró con la del Hatake y no pudo evitar fruncir el ceño- Me.. Que haces tú aquí!? —
— Wuo, tranquilo, solo estoy en la casa de mi amigo jaja— contestó el hatake tranquilo—
—Kashi, Quien es? — Preguntó naruto desde adentro de la casa
—Mmm, alguien— Respondió el hatake indiferente
— Perdona? Alguien? Naruto, soy yo, Óbito! — dijo el uchiha gritando para que el rubio lo escuchara
— Óbito? — naruto se paró de la silla para dirigirse a la entrada con el hatake- Ah, Óbito..
[…]
laik para parte dos..