DILEMAS DE UN CORAZÓN ADOLESCENTE

Después de mi pequeño incidente con Lian, me fui a casa.

No le conté sobre eso a Roger decidí no hablarle aunque quería golpearlo mil veces y de muchas formas diferentes por haberme dejado sola con él.

Él me vio sería y se rió de mí todo el camino a casa después de decirme:

—aprovechalo, no todos los días tu crush dice que te ves bien.

No es uno de los mejores consejos que me ha dado a lo largo de mi vida pero sí tiene un poco de razón aunque no se lo reconoceré jamás.

Jamás hubiese imaginado que esas palabras podrían salir de los labios de Lian, ni siquiera en mis mejores sueños.

Roger me habló de como seducirlo, pero no voy a tomar en cuenta nada de eso porque básicamente quedaré como desesperada y no es lo que quiero hacer, me dijo que por la noche me ponga algo provocador y me ponga sexy para él lo que no me parece buena idea; no soy de esas chicas que se ponen algo sexy para llamar la atención de un chico, prefiero llamar su atención de manera sutil, con una ropa normal, con mi carisma, con mi humor raro y mis ocurrencias.

Cuando llegamos a casa, me bajé del carro sin decir una sola palabra y sin mirarlo, hoy lo odio porque sospecho que fue el quien le dijo a Lian lo que yo sentía, sé que siempre digo que lo odio pero está vez creo que es encerio.

Entro a mi casa y mi abuela está levantando la mesa, llegué tarde y mis primos,mi tía y mi abuelo ya no están en casa.

— ¿dónde estabas hija? Te juro que ya iba a salir a buscarte.

—No exageres abuela solo me demoré unos minutos.

— te perdiste el desayuno con Cris y no estuviste para desearle suerte a Hanna en su primer día de clases universitarias te esperaron por más de 15 minutos Ece, dijo en un tono que no era precisamente de reproche como debería, era como de sorpresa o algo así.

—lo se abuela y lo siento mucho no fue intencional, digo mientras la abrazo fuerte.

—¿que pasa mi niña, deseas hablar de algo?, pregunta mientras sigue levantando cosas de la mesa.

—no abue, gracias por preguntar

— ¿sabes que me puedes decir lo que quieras cierto Ece?,no solo soy tu abuela también soy tu amiga.

— sus palabras tan dulces me hacen llorar de inmediato.

—¿porque lloras hija, quién te hizo algo?

— tú abuela, tú¿porque tienes que hablarme así? Sabes que siempre nos haces llorar a todos.

No quería perderme nada, pero... Lo siento mucho abuela de verdad lo siento.

—lo sé y no me digas nada si no estás lista, cuando lo estés sabes dónde encontrarme mi amor, ahora te serviré el desayuno y luego puedes ir a dormir yo me encargo de todo hoy, dijo mientras me secaba las lágrimas.

—Te amo abuela, digo mientras la abrazo aún más fuerte.

—Lo sé, yo también me amo, dijo haciéndome reír.

Desayuné y me fui a dormir, pero como casi nunca me pasa no pude conciliar el sueño pensando en lo que sucedió hoy.

¿Desde cuándo Lian lo sabe? ¿le importará realmente o solo se está burlando de mi?

Roger, Roger...

Se supone que es mi amigo¿cómo pudo hacerme esto, como? Bien dicen que la traición viene de quien menos se espera y de quién más confías.

No sé si exagero, pero es obvio que Roger sabía que si le decía a Lian lo que siento no existiría una reacción que no fuera humillante para mí. No tengo ninguna oportunidad con él y eso es algo que sabemos todos, pero no le importo. ¡Joder! ¿realmente es mi amigo cómo yo creo o eso de ser mejores amigos solo está en mi cabeza? cómo sea solo sé que no le hablaré en mucho tiempo.