EL AMOR LLEGA DESPACIO

Pasan los días y Julia está esperando con ancias que llegue el sábado para la visita de Máx, hasta que por fin llega, ya es sábado y ha decidido cocinar lazagna, verduras al vapor y una pasta César y de postre hizo un pay de zarzamoras que es su favorito.

Por fin llego la hora y puntualmente a las tres sonó el timbre, Julia corrió a abrir y ahi estaba tan guapo con un short de mezclilla y una playera deportiva y gorra de los yankees.

Wow que bien te ves ¿Y ese atuendo?

¡Qué! No se te olvide que hoy destrozaremos a los Marlins.

Estás loco como mi papá y Miguel bueno, pero pasa o ¿Te piensas quedar ahí?

Le dio un beso en los labios y entró.

¡Oh! Ten traje la botana y las bebidas para disfrutar durante el juego.

Papá, Miguel ya llegó Máx.

Ellos rápidamente se acercan.

Que bien, ¿Cómo estás, hijo?

Yo bien gracias, pues esta semana comencé a trabajar en la empresa de mi abuelo, pues falta muy poco para nuestra boda y tengo que hacer algo para mantener a esa preciosidad que tendré por esposa.

Dice esto volteando a ver sus ojos hermosos y ella se sonroja y dice.

¿Y que tal? ¿Dificil?

Para nada, como dice mi abuelo lo que bien se aprende jamás se olvida y más cuando a uno le gusta lo que hace, al principio yo me rehusaba a estudiar, pero todo era que comenzará después le tome el hilo al carrete, como dicen, al final descubrí que esto era lo que me gustaba y era lo que mi abuelo esperaba de mí, ahora solo me queda echarle todas las ganas para no defraudarlo.

Y lo vas a conseguir, porque como dicen lo que uno hace con amor siempre sale perfecto.

Pues entonces usted hizo con amor a sus hijos porque déjeme decirle que tiene una hija preciosa, creo que me llevaré el premio mayor.

Y no es porque sea mi hija, pero de verdad que te sacaste la lotería con ella.

Asi lo creo.

Julia interrumpe la platica.

La comida ya está lista, así que ala hora que gusten.

Pues por mí ya, estoy ansioso por probar lo que ha cocinado para mí, mi hermosa prometida.

Pues vamos entonces.

Todos caminan hacia el comedor, Julia sirve primero a su padre, después a Máx, luego a Miguel y por último ella y se sentó al lado de Máx y como la vez anterior se saboreó hasta los bigotes.

Mmm que delicia, ya espero la hora en que seas la señora Johnson y vivas conmigo para poder deleitar tus comidas todos los días.

El padre de Julia suelta un suspiro y dice.

Mi muchachita hermosa, mi palomita ya as crecido y pronto dejarás el nido.

No papá, vendré lo más seguido que pueda para cocinar para ustedes ¿Verdad?

¡Caro! O ustedes podrán visitarnos todas las veces que quieran.

No te preocupes hija recuerda que tenemos nuestro propio restaurante eso no será necesario, sino que chiste tendría que te cases y te cambies de casa.

¡Papá!

Bueno interrumpió Carlos.

Hija por favor ahora muéstrale a tu prometido que también eres buena en los postres.

¿En serio?

Dijo Máx.

Pero por su puesto que si, anda hija trae el pay que has preparado.

Julia seco las lágrimas de su rostro y se puso de pie, abrió la nevera y saco el pay de zarzamoras que había preparado, dio un trozo a cada uno de los cuatro y regresó a su lugar, por su puesto que también estaba delicioso y Máx lo dijo.

Mmm delicioso, acercó su boca al oído de su prometida y le dijo.

Igual de delicioso que la chica que lo preparó, también quisiera devorarte igual que a esta rebanada de pay.

Julia sonrió y se puso algo nerviosa, de pronto dijo Miguel.

Pero vamos está a punto de comenzar el partido, donde destrozaremos a los Marlins y a un mismo tiempo todos gritaron y levantaron los brazos, Julia los observó y dijo.

Todos están igual de locos, vayan yo limpiare este desastre y despues los acompaño.

Miguel y su padre salieron del comedor y Máx espara un poco, cuando ya quedaron solos se acerca y le rodea con sus brazos y le dice.

¿Ya te dije que te he extrañado mucho? No sé que me has hecho, pero no puedo dejar de pensar en ti.

Y Máx no mintió es verdad que no puede dejar de pensar en ella, ni siquiera le da tentación salir de fiesta, sé la pasa de su departamento a la oficina y viceversa, en sus ratos libres piensa en ella y los días que no la ve le manda mensajes o hace una llamada solo para escuchar su voz, ella se giró hasta quedar frente a él y se besaron, ella le dijo.

Ve a ver el juego ahora voy.

Llega a la sala y el padre le dice.

Anda hijo toma tu asiento.

Max hace caso a su suegro y se dienta, Julia termina de limpiar y sale de la cocina y se dirige a la sala y lleva las botanas y las bebidas que ha llevado Máx, las coloca en la mesa de centro y toma asiento en un lado de él y comienzan a disfrutar del juego. Al terminar el juego su padre se despide y se retira, al igual que Miguel y solo quedan ellos dos, Máx pasa un brazo por detrás del cuerpo de Julia y la acerca a el y la comienza besar, ella responde a sus besos, después de un largo rato ella se encontraba aún perdida en sus brazos y saboreando sus labios.

Ya es tarde y mañana tienes que trabajar.

¿Me corres?

No claro que no pero...

Máx no la deja terminar la frase y roba nuevamente sus labios y sin despegar sus labios susurra.

Cada vez es más difícil separarme de ti.