SIN MIEDO AL ÉXITO

Naudi salió del edificio con aires de victoria, salió sonriente, se subió a un taxi con sus documentos, le esperaba una larga noche, pero sabía que era lo mejor para así no estar tan abrumada al día siguiente de tanto trabajo, así empezaría a organizar los de cada día, para no dejar acumular y no estresarse por tanto trabajo, ella era una mujer muy organizada y responsable con su trabajo.

Cuando llegó a casa la recibió su hija sobrina muy emocionada, quería saber como le había ido con el jefe ogro gruñón, Sofía le dijo a su madre.

SOFIA: Mami Nau, ¿Tu jefe no te dejo sin cabeza?

NAUDI: No, yo lo deje sin lengua.

SOFIA: ¿Te le comiste la lengua con un beso?

Naudi soltó una carcajada por las ocurrencias de su sobrina, y decidida a cerrar el tena dijo.

NAUDI: No, me regaño y yo también lo regañe, me vine y el solo se quedó mirándome, por eso digo que lo deje sin lengua.

Shirly llegó a las cinco y treinta a su casa, era su primer día y tenían que aprender muy rápido, al día siguiente entraba a las siete, tenía que trabajar ocho horas diarias, las hermanas se contaron como les fue en su primer día de trabajo, para Shirly fue un día normal, pero para Naudi fue pésimo, le contó todo lo sucedido con su jefe y la conversación con su sobrina, Shirly no aguantaba la risa por todo lo que su hermana le habia hecho a su jefe, Shirly sonriente le dijo a su hermana menor.

SHIRLY: No abuses Nau, un día de esto te hecha de patitas a la calle.

NAUDI: Nojoda... cuando yo vea indicios que me quiere hechar, renuncio primero, no le voy a dar el lujo de que me corra.

SHIRLY: Hay que ver que tu tienes más cara que espalda, tu primer día de trabajo e hiciste lo que te dio la gana con el delante de sus empleados, cuando tengas el mes te adueñas de la empresa y lo hechas a él.

NAUDI: Tampoco hasta allá, pero no me voy a dejar pisotear de el por se el jefe, no mija, sobre mi cabeza mi pello.

La madre sólo escuchaba la conversación, sabía que Naudi no se dejaba de nadie, y si se dejaba era porque quería; ella intervenía con sus hijas cuando se daba cuenta que estaban haciendo algo mal.

Naudi terminó la conversación con su hermana y se puso a organizar las carpetas, suspendió cuando iba a cenar y comenzó de nuevo, la amiga de su hermana le dijo que se podía quedar en la sala terminando su trabajo, a las dos de la mañana Naudi terminó todo, estaba cansada y se acostó.

A las cinco y quince de la mañana Shirly ya estaba despierta al igual que su madre que ya estaba acostumbrada a madrugar asi no fuera hacer nada, Shirly vio a su hermana dormida muy cómoda que le dio pesar levantarla, pero con el dolor de su alma tenía que hacerlo y dijo.

SHIRLY: levántate que vamos sin miedo al éxito, vamos que hoy tu día va a ser mejor.

Ella le estaba transmitiendo una actitud positiva y empoderante a su hermana menor, la estaba animando a levantarse y avanzar hacia sus objetivos. Naudi se sentó en la cama y le sonrió a su hermana, Shirly también le sonrió y pensó: La confianza y el apoyo de alguien que cree en nosotros puede hacer una gran diferencia en nuestra vida, puede ayudarnos a superar nuestros miedos y dudas, y a creer en nuestras propias capacidades, ella vio todo eso reflejado en su pequeña hermana.

Shirly levantó también a su hija para que reposará y poder bañarla, una vecina le regalo el uniforme del colegio porque su hija tenía tres porque también le habían regalado, todos estaban listos, la madre de las hermanas ya tenía el desayuno listo, también le preparo el de la amiga de su hija y le dijo que le guardaría la cena, la mujer le agradeció porque ya no iba a tener que cocinar cuando llegara, le dio a la señora para que le hechara también la comida para llevar de almuerzo al día siguiente; la señora aceptó con gusto, ella ha sido de gran ayuda para su familia y también quería retribuir.

Naudi se despidió de su sobrina, después de su madre y hermana, ella iba cargada de la caja con las carpetas, a la empresa se iba en trasmilenio, la dejaba diagonal a la empresa; cuando llegó al primer piso la recepcionista le sonrió y la felicitó por no dejarse de su jefe, Naudi no entendía como sabía ella, la mujer se dio cuenta y dijo.

■ Tenemos un grupo de WhatsApp, eres la única que no estás, allí hablamos de todo un poco, pero el tema de conversación eres tú y el jefe, eres mi heroina, la de todos.

Naudi sonrió y se fue al ascensor para llegar a su piso, acomodó sus pertenencias y una de las compañeras le dijo que el jefe ya estaba en la oficina, ella inmediatamente fue a su oficina, pero antes tocó y el autoriza su entrada; Naudi entró y dijo.

NAUDI: Buenos días jefe.

RODIN: ¿Qué tiene de bueno?

NAUDI: Todo, un día más de vida, porque lastimosamente muchos no amanecieron para disfrutar de las maravillas de la vida.

RODIN: A mi no me interesa eso.

NAUDI: ¿Porque es tan desconsiderado? ¿porque no deja esa amargura?

RODIN: ¿Porque eres tan metida? limítate a tu trabajo, no te metas en mi vida personal, yo tampoco lo haré con la tuya ¿Estamos?

RODIN: Aja.

RODIN: ¿Aja que?

NAUDI: Si, nada de vida personal, ya entendí, ya tengo todas las carpetas organizadas.

RODIN: Llévalas al archivo y organízalas, allí todo está por fecha y por departamento.

Ella se dio cuenta que el nunca necesitó las carpetas, solo era para amargarle el día, Naudi le pidió permiso para salir y el no dijo nada, afuera los demás esperaban la discusión, pero no sucedió nada, la mañana comenzó tranquila para todos.