La Gordita Será Mi Reina

"Muere lentamente quien no se atreve a abandonar lo seguro para luchar por sus sueños." – Jesús Quintero. 

El rey Arthur se puso de pie, con el rostro endurecido; la reina Kira, en cambio, contuvo un suspiro que solo una madre entiende.

La novia no se resignaba porque no había llegado tan lejos para perder delante de esa mocosa que pensó había vencido meses atrás y que ahora estaría bien lejos de su mina de oro.

 ¡¡tú estás casada con otro hombre!! le grito delante de todos

La gente en la iglesia estaba muy sorprendida, como podía una mujer casada asegurar que estaba esperando un hijo del futuro monarca.

¡¡Le fue infiel a su esposo!!

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Isayel avanzó entre los invitados sin miedo 😨

 🤣🤣 sabía que usarías ese truco sucio, para enlodar mi nombre, pero yo tengo pruebas de mi inocencia.

Mirando al amor de su vida desde que era una niña

Y no estaba dispuesta a perderlo por una mujer que no valía la pena

le costo conseguirlas, pero con ayuda de sus padres, de sus suegros y de todos sus amigos, lo logró

Toda esta boda fue un teatro que montaron para desenmascarar a esa mujer de una vez por todas.

kira y Arthur se miraban triunfantes esa mujer tenía sus días contados en la vida de su hijo y en la de ellos.

El silencio fue absoluto. Y el futuro rey de Inglaterra, con el alma desgarrada, dejó caer la corona que sostenía entre sus manos.

Kira recordó cuando esa rastrera quiso conquistar a su esposo, después de casi acabar con la vida de Demian,

pero ya sabemos que nuestro Arthur solo tiene ojos para su reina kira, aunque ya no sean tan jóvenes la pasión sigue ahí no con la misma intensidad, pero el amor es lo que cuenta al final

Y como no lo pudo conseguir, fue por el premio de consolación que en este caso era su hijo.

Lupita era otra que agradecía al cielo, había perdido la cuenta de las veces que le pidió a la virgen de Guadalupe por un milagro

 ¡por poco no lo consiguen!

esa mujer le hizo tanto daño a su hijo que si no fuese por su dulce nuera Melody

Demian estuviera perdido en las drogas por culpa de esa mala mujer.

Y que el bobo de Adrick cayera en sus garras era algo imperdonable, ella pagaria por todo el daño que había hecho

separar a dos personas que nacieron para estar juntas no tenía perdón de Dios.

Todo por ambición, y casi destruir una hermandad de años

ellas daban gracias todos los días por esa amistad tan inquebrantable que forjaron con los años

De lo contrario esa advenediza se hubiese salido con la suya

 💔👑

💍 El día en que el corazón del príncipe se detuvo.

El silencio pesaba como una losa sobre los muros dorados de la catedral.

Nadie se atrevía a moverse. Nadie, excepto él.

Adrick dio un paso hacia adelante, con el rostro desencajado y la mirada fija en aquella joven que había creído perdida.

El mundo entero desapareció.

Las flores, las luces, los cientos de ojos sobre ellos… nada existía más allá de Isayel, temblando, con las lágrimas a punto de salir como ríos de agua viva

¿Isayel…? susurró su nombre como si temiera que decirlo la hiciera desvanecerse.

Ella asintió, y el leve movimiento bastó para quebrarlo.

Bárbara soltó una risa amarga, elegante y venenosa.

Qué conveniente dijo con una sonrisa gélida. Justo hoy, justo ahora, ¿vienes a inventar semejante historia?

Isayel la miró sin vacilar.

No invento nada. Él lo sabe, posando una mano sobre su vientre. Este hijo es suyo.

El murmullo se volvió ensordecedor. Los ministros, las duquesas, los nobles... todos se inclinaron hacia adelante como si la historia más escandalosa de la realeza estuviera revelándose ante sus ojos.

El rey Arthur se levantó del trono, su voz retumbó entre las columnas:

* ¡Esto es una ofensa a la Corona! 🤭 tenía que disimular.

Pero la reina Kira permaneció sentada, con la mirada fija en Isayel.

Adrick se volvió hacia su padre.

Padre, por favor… su voz se quebró. Déjame hablar con ella.

El rey asintió lentamente, aunque la tensión podía cortarse con una espada.

Adrick bajó del altar, cada paso un desafío al protocolo, a su deber, pero ya nada de eso importaba, ella estaba ahí

Cuando al fin llegó frente a ella, la vio temblar.

Isayel… susurró, con la voz temblorosa y los ojos empañados.

Ella levantó la mirada. Demostrando que era la misma, que nada había cambiado.

Él extendió la mano y la apoyó suavemente sobre su vientre.

Una lágrima rodó por su mejilla.

Dios mío…. ¿Es verdad?

Ella asintió.

Y en ese instante, el heredero al trono entendió que ninguna promesa hecha después, valía más que aquel amor.

Bárbara lanzó un grito ahogado y arrojó su ramo destrozado al suelo.

¡Esto es una farsa! ¡Una vulgar mentira de una mujer desesperada!

Pero ya era tarde. ¿O no?

Porque cuando Adrian abrazó a Isayel frente a todos, la verdad se volvió imposible de negar.

Las campanas de boda seguían repicando afuera, pero ya no sonaban a celebración.

Sonaban a destino.

Mucho antes de que los envidiosos y los secretos los separaran, hubo un jardín, un columpio y una niña que reía con la boca llena de migajas de pastel…

Sin embargo Bárbara, no se daría por vencida. No cuando ya estaba a un solo paso de conseguir su tan anhelado objetivo. ¡Y que esa mocosa estuviese embarazada cambiaba todo!.

Así que uso su mejor arma secreta según ella.

¡¡Yo también estoy embarazada!!,

¿Cómo sabremos si es verdad que ese bebé, señalando su abdomen, es de mi novio? Y no de tú esposo

"Uf ¡esto se pondrá bueno!, dos mujeres, un camino 🤭 ¿Cuál tomará nuestro príncipe Adrick?"

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Les deseo un excelente fin de semana