Custodia De Tu Corazón

Estaba hablando con mis abuelos y Vladimir. Aunque la charla empezaba a subirse de tono. Mis abuelos insisten conque olvide el pasado y continúe con mi vida, que deje de aferrarme a un imposible y por develar lo que pasó con mis padres.

Era entendible, no querían sufrir más pérdidas. Y la sola idea de que esté con María era detestable para ellos.

- Pietro mi niño escúchanos. Entendemos tu plan, pero enredarte con esa mujer no solucionará nada. Tus padres no volverán, Sasha tampoco...- tiembla al nombrarla y me mira con preocupación- Cariño la venganza no te dará paz.

Entre cierro mis ojos y aprieto mis puños para poder controlarme.

- Le dará paz a los que perdimos -y me marcho dando un portazo.

Sé que dejo sin consuelo a mis abuelos, pero debo llegar al fondo de todo esto.

-Y tu que opinas Vladis - Él me mira como angustiado ya que Sasha le decía así - Crees que enloquecí? Te doy autorización a opinar lo que sea.

- Señor, en su lugar haría lo mismo, en poco tiempo Sasha se convirtió no sólo en colega sino una amiga, y sus padres no tuve el agrado de conocerlos, pero por lo que he escuchado de usted y la familia, eran excelentes personas. No dudaría ni un segundo en tomar cartas sobre el asunto. Por eso lo seguiré siempre señor. No sólo porque me pague.

Vladimir se unió a mis custodios hace diez años y por primera vez hablamos de ésta manera, chocamos puños y subimos al auto.

- Muy bien Vladimir, sigamos investigando y pasando mal trago con María y compañía.

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Buscamos a María y nos dirigimos al dichoso evento.

Habían armado un escenario y el mismo era custodiado por fuerza policial. En el mismo aparece Dimitri y empieza a dar un discurso referente a la inauguración, le digo a María que me disculpe, ya que me urge ir al baño.

Dentro del mismo lavé mi cara varias veces, pues estoy seguro de haber sentido una fragancia que me recordaba a ella, otra vez todo me daba vueltas y me invadió la angustia por no tenerla, pasé unos diez minutos así, hasta que me dije a mi mismo que tenía que ser fuerte y pensar en lo planeado.

Vladimir me esperaba afuera Y noto que estaba pálido, me acerco porque era raro verlo así hasta que noté un leve nerviosismo y que sudaba mucho.

Viene María, también su semblante es blanco cómo una hoja, corre agitada hacia mí y mirando hacia todas partes.

- Pi... Pietro, ya vámonos... Me aburro... hablaré después con Dimitri y me excusaré en nombre de todos.

Ella me jala hacia una salida de emergencia, lo cuál me pone los nervios de punta, porque tanto misterio? me fijo en Vladis y sigue tieso. Qué rayos pasa???

- Vladimir qué ocurre? pasó algo durante mi ausencia? Te encuentras bien?

En eso se gira y observo hacia la dirección que está mirando. Tiene que ser una maldita broma.

- Ya sé retiran? tan temprano? Qué lastima quería disfrutar mi dicha con ustedes...