DEMONIOS VANNECELLI

** Gino Vannecelli**

-Elio y yo ya estábamos listos para buscar a Claudia, pero hoy sería el día en que Jim se enteraría de toda la verdad sobre su hermosa novia, de quien tanto presume y adora. Solo quiero ver su reacción cuando sepa que su novia tiene relaciones con nosotros. Mientras bajábamos las escaleras, nos encontramos con mis padres, mis hermanos y esmeralda. Mi madre, al vernos, preguntó- ¿A dónde piensan ir?.

-Le respondí-Iremos al centro comercial a comprar algunas cosas.

-Esmeralda se acercó a mí y, poniéndome a su altura, dijo con un tono dulce-Gino, ¿puedes traerme un chocolate, por favor?

-La observo; su nombre, Esmeralda, le queda perfecto. Sus ojos verdes y su cabello rubio la convierten en una niña muy hermosa, una esmeralda. Se parece mucho a su madre. Su sonrisa es tan dulce y pura. Le comento mientras acaricio su hermosa cabellera-Puedo traerte todos los chocolates del mundo si así lo deseas.

-En ese momento, siento que alguien se coloca a mi lado. Al voltear, veo a Elio, quien nos observa con una expresión seria y dice-Los chocolates blancos, ¿cierto?

-Ella responde-Sí.

- Me levanto y nos despedimos de todos. Al caminar hacia el automóvil, le digo- Esmeralda, cada día estás más bella; en unos años serás una mujer deslumbrante, y su belleza atraerá a muchos hombres.

- elio se gira hacia mí con una expresión seria y, en un tono irritado, responde- Eso mismo he pensado, pero aún faltan años para eso. Mientras tanto, puedo estar tranquilo.

- ¿Qué quiso decir con eso? ¿Acaso tiene interés en ella? No puede ser, no puede fijarse en ella. Subimos al auto y, tras unos minutos, llegamos al departamento de Claudia. Al llegar, tocamos la puerta y, en cuestión de segundos, ella nos abre. La vemos vestida de manera provocativa. Entramos; le doy un beso en los labios y ella me corresponde, para luego besar a mi hermano. Yo me alejo y voy a la cocina en busca de algo para beber. Me sirvo una soda mientras observo cómo se besan apasionadamente y disfruto de la escena. Tomo mi teléfono y envío un mensaje a Jim, preguntándole-¿Sabes lo que está haciendo tu adorada novia en este momento? Deberías venir a su departamento.📲

-Apago mi teléfono y me acerco a ellos. Comenzamos a despojarnos de la ropa hasta llegar a su habitación, donde los tres nos unimos en una sola experiencia, atrapados en la lujuria y el deseo de tenerla entre nosotros. Los gemidos de los tres resuenan por el apartamento, y no se puede negar que Claudia sabe cómo manejar a ambos en la cama.Los dos estamos en ella mientras yo presiono su cuello y lo beso. Elio la presiona más a él, la tomo del rostro y la beso con desesperación mientras estoy dentro de ella. Escuchamos sus gemidos; nos pide más, por lo que nuestros movimientos son más fuertes, hasta que llegamos al clímax en ella. Pero queremos más, pasamos así varios minutos. Al terminar, nos cambiamos y vamos hacia la sala. Claudia comienza a besarme mientras Elio nos observa con atención. Parece que esta chica aún desea más, y nosotros estamos dispuestos a complacérsela. Elio se acerca a nosotros, toma su cabello y la besa. En ese momento, escuchamos que la puerta se abre. Los tres nos giramos y vemos a Jim con una expresión de asombro que rápidamente se transforma en enojo. Ella empuja a Elio, se ajusta la blusa y dice-Jim, permíteme explicarte.

-Al observar la expresión de Jim, con sus ojos vidriosos y la vena marcada en la frente, no podemos evitar reírnos; es un pobre tonto. Él le dice- ¿Cómo pudiste hacerme esto, con ellos? Eres una...

-Hemos terminado de cambiarnos, dice Elio.- Muy bien, nosotros nos vamos. La pareja más popular y enamorada de la escuela necesita hablar a solas. Claudia, cuando quieras repetir esto, no dudes en llamarnos.

-Nos acercamos a ellos. Elio toma a Claudia y la besa en los labios, pero ella lo empuja. Jim intenta golpear a Elio. Este lo esquiva y le propina un puñetazo en la cara, haciendo que caiga al suelo. Claudia intenta ayudarlo a levantarse, pero él la rechaza. Se pone de pie, pero yo lo empujo de nuevo, provocando que vuelva a caer al suelo. Le digo-Ay, Jim, nunca debiste meterte con nosotros. Mira, tu sexy y deliciosa novia estuvo con nosotros. Este sufrimiento se nota en tus ojitos, mira cómo lloras. Se hubiera evitado si no te hubieras metido con nosotros.

- Claudia grita - ¿O sea que yo fui parte de su venganza?

- Elio dice - Claro, ¿acaso pensaste que de verdad te queríamos? Fuiste excelente en la cama, cuando quieras nos llamas.

-Jim se levanta y expresa- Esto no quedará así; algún día me lo van a pagar.

-Claudia nos grita que nos vayamos de su apartamento, así que nos retiramos riendo. Nos dirigimos hacia el automóvil y nos encaminamos al centro comercial para comprar algunas cosas, especialmente los chocolates blancos que le encantan a mi querida Esmeralda.-