Santiago Jr. y Maggie se casaron en una noche de copas en Las Vegas. Ella desapareció después de la noche de bodas y Santiago Jr. comenzó a buscarla para corregir su error y divorciarse. Pero Maggie después de esconderse por meses viene dispuesta a sacarle a Santiago Jr. hasta el último dólar a cambio de darle su libertad.
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CAPÍTULO 1
⭐⭐NOTA DE LA AUTORA⭐⭐
Bienvenidos a esta nueva historia. Para mis FIELES LECTORES, lo prometido es deuda, y a los nuevos SEGUIDORES, esta novela es la cuarta de la saga. Por eso, les invito a leer, antes de esta historia, las novelas anteriores, para una mejor comprensión. Debes leerla en el siguiente orden:
LA PROSTITUTA DEL CEO
100% TÚ
TE ENCONTRÉ
El SEXY GENIO Y EL MAFIOSO DE JUGUETE.
Después si te doy la bienvenida para acompañarme en esta gran aventura...
🌹🌹 CAPÍTULO 1🌹🌹
Santiago Jr. estaba en la habitación de su hotel de pie, junto a la ventana, donde podía ver la hermosa ciudad de París. Sí, París, este fue el último destino donde el detective reportó haber visto a su esposa. Al parecer Maggie era una modelo con carrera en ascenso.
Por eso viajaba por todo el mundo y esto había retrasado el encuentro con su marido. Santiago Jr. se sentía frustrado. Ya había pasado un año desde aquella tarde donde recibió la absurda demanda de divorcio.
Su negativa a aceptar ese robo sin pistola, hizo que su esposa se esfumara, al igual que su dichoso abogado.
Su familia decidió dejarlo solo. Maggie Silver no tenía fortuna y por esa razón él debía ser capaz de lidiar con ella. Además, de que ella no representaba ningún peligro para él.
Pero Maggie no quería divorciarse bajo otros términos que no fueran los establecidos en la demanda interpuesta por ella.
Santiago Jr. en un inicio, decidió ignorarla y dejar pasar varios meses para tratar de, calmarse antes de enfrentarla. Cada uno siguió con su vida.
Santiago Jr. retomó su vida de soltero y comenzó a salir con muchas mujeres, lo que molestaba más a su querida esposa que decidió castigarlo filtrando a las redes las fotos de su matrimonio y hasta el acta de matrimonio. Lo que dejó a Santiago Jr. cómo un mentiroso delante de las mujeres que pretendía, lo que molestó mucho a Santiago Jr. al punto de dejar sus negocios en manos de su hermano Cristiano Jr. para dedicarse en cuerpo y alma a cazar a su esposa como si fuese una presa.
Por eso en este momento estaba llegando a esta hermosa ciudad. Dónde supuestamente su esposa va a estar en un desfile de pasarela.
—Llegó tu hora. Esposita. Loca desgraciada. Vas a desear firmar el divorcio gratis. Es más, vas a querer pagarme para que te deje alejarte de mí.
Por otra parte, Maggie se preparaba para su desfile mientras se burlaba de los reportajes en las revistas de chismes. Ella estaba a salvo de esos comentarios, porque en las fotos sale disfrazada y todos la conocían como Marie Montenegro.
—Eres muy malvada, Marie, recuérdame jamás hacerte enojar, por favor —le decía su fiel amigo y cómplice de fechorías.
Maggie soltó una pequeña risa. Mientras miraba a su amigo a través del espejo. Ella terminó de pintar sus labios y se giró hacia él.
—Y esto es solo el comienzo. ¡Mi querido esposo, ni se imagina lo que le espera!
Maggie salió de su camerino lista para triunfar. Sin saber que su querido esposo estaba en el área VIP del evento.
El desfile comenzó y Santiago Jr. disfrutaba del espectáculo. Algunas modelos no dudaron en coquetear con él durante el evento. Casado, soltero o viudo, Santiago Jr. era un bombón que cualquiera quería comerse.
Marie lo observaba con repulsión desde su lugar, antes de salir a modelar.
—Ese viejo tonto. No sé, qué le ven. —susurró para sí misma.
Su turno llegó y ella se destacó entre las demás. Era una mujer de 25 años, su cuerpo estaba bien definido y sus medidas eran perfectas, su gracia y glamour la hacían lucir más hermosa.
Santiago Jr. recorrió con la mirada el cuerpo de su esposa y no consiguió nada excepcional en ella.
—Está más delgada de lo que recuerdo —le susurró a Braulio su mano derecha.
Braulio solo le sonrió.
—¿Recordó? Pensé que no recordaba nada —le respondió Braulio con una mirada inquisitiva.
Santiago Jr. lo fulminó con la mirada y el hombre solo negó con la cabeza y volvió a fijar la mirada en la joven mujer.
El evento terminó y Santiago Jr. se levantó y caminó hacia los camerinos.
Todas las modelos quedaron sorprendidas al ver a ese grandioso espécimen al lugar.
—Buenas tardes, muñecas. —Saludó Santiago Jr. en un tono seductor. Todas las mujeres respondieron con sonrisas y voces seductoras. Mientras que Maggie lo miraba con indiferencia a través del espejo.
—Viejo verde —susurró ella, antes de emitir una sonora carcajada que atrajo la mirada de reproche de sus compañeras.
—Qué grata sorpresa tenerlo por aquí. Señor Santiago Jr. —le dijo la organizadora del evento —.¿En qué puedo servirle? —le preguntó la mujer con una mirada seductora y una voz melosa.
Santiago Jr. le sonrió a la mujer con cordialidad y negó con la cabeza antes de responderle.
—Vine por mi esposa, aunque debo decir que me entristece que ustedes no estén enterados de nuestro matrimonio.
Maggie levantó la mirada y le hizo señas de advertencia con los ojos a través del espejo para que se callara. Pero Santiago Jr. solo le guiñó el ojo antes de terminar de llegar hasta ella y encorvarse para dejarle un beso en el hombro.
Todas las mujeres se quedaron paralizadas y comenzaron a murmurar. No era posible que esta odiosa y engreída mujer haya atrapado a este bombón italiano. Marie entrecerró los ojos y tomó la mano de Santiago Jr. para encajarle las uñas en ella.
Santiago Jr. se quejó y sutilmente retiro la mano del hombro
—¿Marie? Pero qué bien guardado te lo tenías. Así que, ¿tú eres la mujer de la foto? —le preguntó una de sus compañeras.
Maggie quería que la tierra se la tragara. Pero no sé dejará intimidar por este idiota. Entonces, solo se levantó de la silla y salió del camerino sin decir una sola palabra, pero Santiago Jr. no estaba listo para dejarla escapar. Entonces la siguió y la abrazó para caminar juntos hacia la salida con una sonrisa fingida en su rostro.